LIGUE 1

Luis Enrique no mirará para otro lado con Mbappé

El técnico afronta en el PSG una de las pretemporadas más difíciles de su carrera con la posible salida de Mbappé, una afición crispada y la construcción de un equipo sin Messi.

Luis Enrique en su presentación como nuevo entrenador del PSG. /REUTERS
Luis Enrique en su presentación como nuevo entrenador del PSG. REUTERS
Jonathan Ramos

Jonathan Ramos

Es época de pretemporada y la de Luis Enrique se prevé cuanto menos agitada. El asturiano, que aterrizó la semana pasada como técnico del PSG en la ciudad de la luz y se pone el chándal este lunes, ha pasado un verano movido entre negociaciones con la Premier League, la Serie A y, finalmente, el PSG. Su deseo siempre fue el de entrenar en el país británico, pero los proyectos cortoplacistas del Chelsea y Tottenham erradicaron poco a poco sus esperanzas. El Nápoles se movió rápido, pero el PSG lo hizo de manera más atractiva ofreciéndole un reto que no pudo rechazar.

«Mbappé no saldrá gratis»

Una liga nueva, un vestuario lleno de estrellas o conseguir la ansiada Champions son algunos de los motivos que hicieron más fácil su decisión. Una vez solventado su futuro tocaba planear su nueva vida y la de los suyos. Primero empezó por su staff, cuyo núcleo duro lo componen Rafel Pol (preparador físico), Aitor Unzué (analista) y Joaquín Valdés (psicólogo). En esta planificación tuvo su primer roce con Luis Campos. Como adelantó L'Equipe, el director deportivo del conjunto parisino quiso mantener a varias personas de su confianza en el cuerpo técnico del asturiano, algo que no compró Luis Enrique. Les costó un buen intercambio de pareceres.

Con estos flecos ya solucionados, llegó el momento de instalarse en la ciudad de la luz. Primero se sondearon algunas viviendas en el centro de la ciudad, pero la familia optó por residir más cerca de la Ciudad Deportiva del PSG. Este cambio de aires fue menos brusco para parte de la familia. Elena Cullell, mujer del asturiano, está familiarizada con el francés, gracias a su formación primaria en dicha lengua. Algo que le vino bien a Luis Enrique, quien recitó unas frases en francés durante su presentación que previamente le enseñó su pareja. Y por cierto, el técnico español ya ha empezado a estudiar el idioma galo, porque Luis Enrique busca una integración total en el PSG.

Mientras aprende francés tendrá que gestionar la situación de otro. La máxima que implantará Luis Enrique será la misma que en el resto de sus equipos: hacer grupo. La unión hace la fuerza y el asturiano lo sabe. No quiere ovejas descarriadas, busca que todos los jugadores que vayan a formar parte del primer equipo sumen y no resten. Mbappé no será la excepción. Luis Enrique no mirará para otro lado con el astro francés.

 

Luis Enrique, sobre Mbappé.

El otro 'melón', mucho más pequeño, se trata del ambiente en la afición. El español es consciente del clima que ronda en las gradas del Parque de los Príncipes. Esta temporada se han visto críticas continuas a la directiva y varias pitadas a jugadores y entrenador, algo que el asturiano abraza con su llegada al equipo parisino. Es más, esta situación le motiva y confía en poder darle la vuelta.

Para ello ya ha empezado a mover ficha. Cinco días, cinco fichajes: así se revoluciona un mercado. El equipo parisino es uno de los más activos en esta ventana y es de entender cuando han despedido a dos pesos pesados como Leo Messi y Sergio Ramos. Con estas dos ausencias, Luis Enrique tendrá que confeccionar un equipo que no para de recibir activos y que tiene un objetivo claro: ganar la Champions League.