FÚTBOL FEMENINO

Marta Peiró tras dejar el fútbol a los 24 por una endometriosis: "No voy a dejar que me joda la vida"

La exfutbolista del Valencia ha colgado las botas por culpa de su enfermedad. "Toqué fondo psíquica y psicológicamente".

Sandra Riquelme
Álex Corral

Sandra Riquelme y Álex Corral

"He tocado fondo". Marta Peiró (Torrent, 14 de abril de 1998) se confiesa mientras relata el calvario que sufre: padece endometriosis. Habla con tanta entereza y sinceridad que, a veces, da la sensación de haberlo superado. "A nivel mental, he tocado fondo. A nivel físico, toqué más que el fondo", continúa.

Peiró no vende consejos de vida baratos, ni tan siquiera lo pretende. Tampoco busca convertirse en un libro de autoayuda, ni parecerse a Mr. Wonderful. "Desgraciadamente, no todo trabajo tiene recompensa. Y esta es la vida, también". Peiró es real. Tan real como la endometriosis, una pandemia silenciosa que avanza a pasos de gigante y afecta en torno al 10%, 15% de la población femenina mundial en edad fértil. Una enfermedad que le quitado el fútbol con 24 años. "Era el fútbol o yo".

Nos vamos a verla a Valencia. Su vitalidad y sus ganas te contagian. No tarda en echarnos la bronca en cuanto ve asomar un mínimo atisbo de condescendencia o pena por nuestra parte. Pero también se lamenta. "Al principio, no me he sentido todo lo que comprendida que esperaba. Pensaba que a estas alturas la regla ya no sería un tema tabú, y sí, lo sigue siendo".

Peiró se balancea entre la fina línea que separa la nostalgia de saber que nunca más va a pisar un campo de fútbol -al menos, de forma oficial- y la fortaleza, o resignación, de quien sabe que no le queda otra que mirar hacia adelante. "Voy a tener que aprender a vivir con ella, porque no es una enfermedad que tenga cura. No la voy a estar odiando todo el día. Ya me ha quitado un gran porcentaje de mi vida, que es el fútbol, la vida continúa y no voy a dejar que me joda".

«¿Cómo voy a renunciar a ser madre con 23 años?»

El 30 de octubre de 2021 estará marcado para siempre en su calendario. Ese día señaló un antes y un después en la vida de Marta Peiró. La exfutbolista del Valencia Féminas iba camino de un partido con el Servette, su último equipo. "Ese día, empiezo a tener mucha fiebre, iba a ser titular, pero le digo a mi entrenador que no sé qué me pasa, que me duele mucho el estómago". Inmediatamente, la trasladan al hospital y la operan de urgencia: apendicitis. Sin embargo, y durante el transcurso de la intervención, le diagnostican la endometriosis. Cuando se le pasa la anestesia, su ginecóloga le comunica todo.

La endometriosis es tan desconocida, hasta para los médicos, que Peiró tarda en reaccionar. "Antes del diagnóstico, tenía reglas de diez días, muy, muy, muy abundantes. Con muchos dolores, tanto en la espalda como en las piernas. Me sentía extremadamente cansada. ¿Qué pasa? Que lo normalizas porque los propios médicos te dicen que es así, que te ha tocado y ya está. Un ibuprofeno y a correr", explica y lanza un mensaje: "A ver si con esto, de una vez, nos entra en la cabeza la importancia de ir al ginecólogo". No le quito ni una coma.

"Tenía reglas de diez días muy, muy abundantes. Lo normalicé porque los propios médicos te dicen que es así".

Marta Peiró Exfutbolista del Valencia

Y ahora... ¿qué? Partiendo de la base de que la endometriosis no tiene cura, Peiró y su familia tienen dos opciones: recibir un tratamiento hormonal u operarse. "No quiero operarme, no quiero vaciarme, que es la solución final, quitarte todo el aparato reproductor. ¿Cómo voy a renunciar a ser madre con 23 años?".

En muy poco tiempo, esa gran desconocida se adueñó de su cuerpo. Hasta el punto de sentirse totalmente incapacitada. "¿Un punto de inflexión? Fue un entrenamiento de cardio. De repente, me salgo en mitad de la sesión a vomitar. Vomitar, vomitar y vomitar. En ese momento veo sangre y me asusto. Las pastillas me habían generado un agujero pequeñito en el estómago", recuerda.

"Durante un entrenamiento, me salí y empecé a vomitar sangre. Ese día me asusté mucho, fue un punto de inflexión".

Marta Peiró Exfutbolista del Valencia

En ese momento, Peiró para. Se da una tregua, obligada, de tres meses. El tratamiento hormonal que está recibiendo le está afectando mucho físicamente. Durante esos meses, siente que se le está acabando el tiempo, que el fútbol se agota, que la cuenta atrás está activa. Se empieza a encontrar mejor y decide volver. "Por un momento, se me olvidó la enfermedad. Pero es que está ahí, no se puede olvidar". Fijaos si es poderoso el fútbol.

El último vals

Pero la endometriosis vuelve a dar la cara pronto y tumba hasta el más real de los sueños. El 4 de diciembre, Marta Peiró anuncia su retirada -esta vez, definitiva- del fútbol. "He renunciado porque he cruzado todos los límites, hasta los que no estaban. Ya no me quedan límites por cruzar".

Sin embargo, el fútbol le tenía guardada una despedida a su altura. "El último partido fue increíble. Sentía como todas mis compañeras me buscaban para que marcase gol. La charla previa fue... Mi entrenador, Eric, me dijo que había sido un placer compartir vestuario conmigo, que le había enseñado mucho. ¿Tú sabes lo que es que alguien te diga eso, que compañeras con las que no tenías demasiada relación estuviesen llorando por mí? Me rompí".

¿Has asimilado que nunca más volverás a jugar al fútbol?, le pregunto. "Pff, te diría que sí, pero sé que, en cuanto pase la Navidad y sienta que no voy a preparar más veces la bolsa, que no me voy a poner más veces las botas de fútbol, que no habrá más viajes en bus... El fútbol para mí no solo ha sido un deporte. Ha sido mi vida entera".