El cariño del Athletic y la demora del Zaragoza, las claves de la renovación de Herrera: "Un año esperando una llamada..."

Hay fumata blanca en el culebrón Ander Herrera. Y celebración en las oficinas del Athletic Club tras la oficialidad de su renovación. La propuesta del conjunto rojiblanco ha sido la ganadora finalmente. Tras varios ida y vuelta en las últimas semanas, el futbolista ha hecho valer su palabra dada cuando abrió la negociación con el conjunto vasco. El Real Zaragoza se activó en el último momento, cuando esa vía parecía casi descartada, pero tras analizar ambas alternativas ha decidido seguir un año más en Bilbao y competir en Europa con el equipo en el que ha disputado las dos últimas temporadas. En el club maño contaban con su fichaje y así lo reconocían en privado, pero llegaron demasiado tarde. Tanto que su entorno ha criticado duramente a la entidad aragonesa.

El conjunto vasco se mantuvo firme y ha ganado la partida. Primero entendió la postura de Herrera de esperar los movimientos de su club de origen e incluso daban por hecha su salida por momentos. Sin embargo, tras una reunión mantenida en San Mamés comenzaron a perfilar su renovación. Ahí cambió todo y del pesimismo pasaron al optimismo por lo que les trasladó el futbolista. Aún había que llegar a un acuerdo económico, además de tener siempre atención a posibles movimientos del Real Zaragoza, pero a la postre sería el giro decisivo.

Es cierto que hubo cierto nerviosismo la pasada semana por la entrada con fuerza del club maño, que había dado el sí a la posibilidad de incorporar al centrocampista e incluir su sueldo en la complicada estructura del fair-play financiero. Sin embargo, el jugador y sus agentes comunicaron la mañana del miércoles pasado que, pese a la propuesta blanquilla, seguían adelante con su plan iniciado.

Herrera siempre quiso escuchar al Zaragoza y a Víctor Fernández, que era su gran aliado para el regreso a casa. Se estudió la posibilidad del fichaje –en el club maño lo daba por hecho–, pero la demora en los movimientos blanquillos, la confianza que le ha mostrado el Athletic y cómo se ha comportado en esta negociación, además de una falta de seguridad en el proyecto maño le han hecho tomar esta decisión complicada, ya que aplaza su regreso a la entidad en la que se formó. Además, el propio Ander tenía cierto temor a formar parte de un proyecto que no pueda luchar por el ascenso y sufrir durante el curso.

El entorno de Herrera está molesto. Y así lo ha demostrado incluso su mujer, Isabel Collado, con una publicación muy crítica en su cuenta de Instagram. "Un año esperando una llamada, una visita, un proyecto, un poco de cariño... Te quedas donde sí te lo han demostrado", escribió en su cuenta personal. Un mensaje que no ha sentado bien entre los aficionados blanquillos y que pone aún más asteriscos a un posible regreso en el futuro al Real Zaragoza.

En la otra orilla, sonríe Ernesto Valverde y también la dirección deportiva, los dos grandes valedores de la continuidad del centrocampista. En Bilbao encuentra todo lo contrario, ya que el proyecto rojiblanco está al alza, con la seguridad de mantener al Txingurri como líder y la ambición de seguir creciendo, además de estar muy cómodo en lo personal como siempre ha declarado. Por si fuera poco, la entidad rojiblanca le considera importante pese a que no ha podido tener el peso deportivo esperado cuando firmó en el verano de 2022.

Eso no le resta valor para la parcela deportiva, convencidos de que era clave su renovación por la experiencia y calidad que aporta al grupo, más aún tras las salidas importantes en lo emocional como son las de Raúl García, Iker Muniain y Dani García. Por eso se ha mantenido siempre la postura de ampliar por una temporada a Herrera, pese a la demora en las negociaciones.

Esta renovación es una más de las que está consiguiendo cerrar la dirección deportiva rojiblanca, que tenía un gran reto a comienzo de temporada. Ya son doce ampliaciones, consiguiendo dar continuidad a la mitad de la plantilla campeona. Falta la guinda, ya que se sigue trabajando en el contrato de Álex Berenguer, en el que también hay depositado mucho optimismo, pese a que no consigue cerrarse al acuerdo definitivo a falta de semanas para que caduque su actual vínculo.