CÁDIZ

Sergio se va del Cádiz... ¡que no, que es broma, que renueva!

Vizcaíno pareció confirmar que su técnico se marchaba, pero se trataba de una broma. Firma hasta 2025.

Sergio González, en un partido con el Cádiz./EFE
Sergio González, en un partido con el Cádiz. EFE
Jonás Pérez

Jonás Pérez

El Cádiz pareció confirmar a través de un mensaje institucional de su presidente Manuel Vizcaíno que Sergio González no continuaría la próxima temporada al mando del primer equipo. Una noticia que resultaba sorprendente y que en cuestión de minutos revolucionó las redes sociales. El técnico había cumplido los objetivos, sellando una salvación sufrida, pero, de nuevo, sacando el máximo provecho de los recursos disponibles. De hecho, tras sellar la permanencia el propio entrenador había mandado un mensaje de unidad y prácticamente había confirmado su continuidad. Sin embargo, algo parecía haberse torcido... hasta que resultó ser ¡una broma! Finalmente, el técnico firma hasta el año 2025.

Así lo explicó Vizcaíno en un vídeo publicado por las redes sociales del Cádiz: "Buenos días, cadistas. Ante las especulaciones que ha habido en los últimos días, tengo que confirmar que Sergio González y su cuerpo técnico no van a estar la próxima temporada en el Cádiz Club de Fútbol. Informaremos pertinentemente más adelante. Espero que comprendan la decisión". Minutos después, el club publicó otro vídeo, en el que se tocaba insistentemente el timbre de la puerta de una casa y abría Sergio para confirmar su continuidad: "Tranquilos, que lo mejor está por llegar".

La decisión era sorprendente, claro, ya que, además de conseguir el objetivo de seguir en LaLiga Santander y de pronunciar un discurso público que indicaba que seguiría al mando, ya se había iniciado el baile de entrenadores. Este ha dado mucho que hablar en los últimos días, con Getafe, Almería o Celta de Vigo moviéndose y tentando a diferentes candidatos para que se hagan cargo del primer equipo.

Por eso, resultaba chocante que varias semanas después de la conclusión del campeonato, el Cádiz, de repente, se quedará sin banquillo. No era más que una broma que dejó perplejas a las redes sociales que, a posteriori, sí mostraron su alegría por la continuidad del técnico dos temporadas más.

Sergio González, junto a Rubi, se convirtió en uno de los pocos técnicos de la parte baja que sobrevivía desde el arranque de la temporada. La mayoría de clubes, en época de tempestad, optan por destituir a sus entrenadores y tratar de remontar la situación crítica desde la pizarra. Cádiz y Almería, por el contrario, dieron alas a sus técnicos de confianza y confiaron en ellos hasta el final. Casualidad o no, ambos lograron la permanencia en Primera División.

Rubi, sin embargo, decidió no continuar en el banquillo, tal y como confirmó en rueda de prensa tras la conclusión de la última jornada. Es más, lo anunció en ese momento porque consideraba que su ciclo en Almería estaba acabado y para ayudar a la directiva a que se pusiese rápido manos a la obra para sellar el fichaje de otro técnico.

Por ello, este presunto divorcio entre Manuel Vizcaíno y Sergio González, que siempre habían mantenido una fantástica relación, daba pie al asombro. El Cádiz debía ponerse rápidamente manos a la obra en busca de un técnico, cuando ya no había tantos dispuestos a aceptar una oferta de un club que se vuelve a marcar como objetivo una temporada más salvar la categoría.

"La continuidad está prácticamente hecha. Con los gestos y las miradas sobra, pero falta la oficialidad y la rúbrica", expuso Sergio González en Canal Sur hace apenas unos días. Algo que ya había confirmado previamente. Por ejemplo, tras el partido ante el Elche de la última jornada liguera: "Mi primera opción siempre ha sido seguir aquí. Hemos conseguido el objetivo y ahora sí podemos hablar".

Declaraciones que no hacían más que despertar la incertidumbre cuando Vizcaíno parecía confirmar, contra todo pronóstico, la marcha de Sergio González. Una renovación que hubiera caído en el olvido tuitero si no hubiera llegado con este 'vacile' de sábado por la mañana. Bromas aparte, lo importante es el anuncio: el banquillo cadista tiene dueño para las dos próximas temporadas.