El Celta, agitado por el caso Gabri Veiga, se da 48 horas para cerrar su venta
En Vigo quieren saber pronto si podrán contar con el dinero de su traspaso.

Gabri Veiga es el gran culebrón del verano en Vigo y cuando parecía que ya todo iba a quedar zanjado entre el domingo y el lunes, la situación se torció ayer y su fichaje por el Nápoles ahora mismo está en el aire. Ahora mismo, los representantes del jugador y el conjunto italiano están retomando las conversaciones para tratar de llegar a un acuerdo definitivo y el jugador pueda viajar a Italia. Mientras tanto, el Celta espera, aunque se le está empezando a agotar la paciencia.
En las oficinas del club olívico todavía tienen mucho trabajo por delante. En los diez días que quedan de mercado tienen intención de cerrar al menos tres fichajes, que podrían ser más si salen Renato Tapia y/o Gonzalo Paciencia. Y para llevar a cabo esas operaciones necesitan saber si tendrán en caja parte de los 36 millones de euros que iba a terminar pagando el Nápoles.
En el Celta reconocen cierta inquietud respecto a lo vivido en las últimas 24 horas. El pasado sábado el propio Rafa Benítez comentó que no había dado minutos a Veiga en San Sebastián porque su salida estaba a punto de cristalizarse. El jugador tenía previsto viajar a Italia entre el domingo y el lunes para pasar reconocimiento médico y firmar su nuevo contrato. La realidad es que hoy martes se ha entrenado en Vigo.
Fuentes consultadas por Relevo insisten en que las discrepancias que han frenado la operación son entre Veiga y el Nápoles. Ambas partes tenían un acuerdo muy perfilado en cuanto a duración y salario, pero quedaban términos sin cerrar y es ahí donde están surgiendo los problemas que han detenido la operación.
El Celta no va a esperar eternamente a los italianos. Quiere que todo se resuelva, para un lado u otro, en las próximas 48 horas, es decir, antes del duelo frente al Real Madrid del próximo viernes. Luis Campos quiere saber si contará o no con el jugador porque su continuidad frenaría la llegada de un centrocampista. Además, el dinero a invertir en el portero y el delantero, dos demarcaciones que Benítez considera esenciales, no será el mismo si Veiga sigue en el equipo.
Su venta o no al Nápoles, con el que el Celta ya tiene un acuerdo desde hace días, se conocerá pronto. En el club existe cierto agotamiento por lo vivido en este mercado de fichajes. En sus planes estaba la venta del canterano, pero a comienzos de verano, lo que les habría permitido realizar unos fichajes que no han llegado. Ahora, con el contador de días a punto de llegar a cero, tienen muchos frentes abiertos y no los van a cerrar hasta que se sepa qué pasará con Veiga.