El milagro de los 3,5M€ del Barça: cinco fichajes, el trabajo sucio de Alemany y la sociedad Deco-Mendes
El club logró que cuadraran las cuentas con un sinfín de operaciones para acabar con una plantilla que satisface más en las oficinas que en el banquillo.

Cinco fichajes, una cascada de salidas, entre traspasos, cesiones y liquidaciones, con una inversión de 3,5 millones y unos ingresos que, incluyendo las ventas acordadas previas de Griezmann y Trincao, rondan los 75 millones de euros. Una labor de ingeniería liderada por Alemany, cuya gestión permitió aligerar el Fair Play con un enorme ahorro de fichas, y culminada por Deco, que en las dos últimas semanas de mercado empujó para encajar todas las piezas, tres de ellas con Mendes de por medio: la salida de Ansu Fati y las llegadas de Cancelo y Joao Félix.
Sobre la bocina, con palancas y avales, ahogados por el límite de LaLiga, pero salvado, dando como resultado una plantilla que está por ver cómo valora Xavi. Al final de mercado le ha llegado el ansiado lateral, pero no el centrocampista pasador, de tres cuartos, por el que tanto ha insistido (de Bernardo a Lo Celso). A cambio, Joao Félix, un perfil que en su momento no le interesaba pero que ante las bajas de Dembélé y Ansu ya hasta casi le alivia. Por el camino ha perdido a Ansu, con el que no contaba, y a Eric y Abde, con los que sí contaba.
Lo cierto es que esos 3,5 millones de euros de inversión son especialmente relevantes, cuando al equipo han llegado libres Iñigo Martínez y Gündogan y los cedidos Cancelo y Joao Félix. No está claro si la plantilla ha mejorado o empeorado. La línea defensiva es top. El centro del campo, sin la brújula Busquets y con Oriol Romeu más Gündogan, ha ganado en variantes. Y arriba, la marcha de Dembélé hizo daño a Xavi, pero los más optimistas vieron en ese socavón una oportunidad para la explosión de Lamine, cuya detonación tiene alcances imprevisibles. No hay un '9' especialista suplente. Será Vitor Roque, que llegará en enero a cambio de 30 fijos y otros tantos en variables.
Explicar cómo encajó el plan del Barça en LaLiga requeriría más de un artículo. La clave empezó en otoño del año pasado, con la venta de Griezmann y la retirada de Piqué. El trabajo era aligerar la masa salarial. Luego llegaron las salidas, por distintos motivos, de Jordi Alba, Busquets, Ansu Fati, Dembelé, Collado, Kessié, Dest, Lenglet, Umtiti, Eric García, Abde…
También fueron necesarias palancas y avales. El Barça logró 20 millones iniciales de la "repalanca" a cargo de un inversor chipriota y, aunque se han quedado a falta de otros 40 para completar los 60 (que era el agujero que había por rellenar), el presidente Laporta con miembros de su Junta ha avalado por valor de 20 millones más, con lo que han conseguido salvar un nuevo match ball del control económico sobre la bocina.