Modric está muy molesto por los rumores sobre su continuidad en el Real Madrid

Luka Modric (37 años) quiere seguir en el Real Madrid hasta 2024. Por eso el pasado 5 de mayo, tal y como adelantó Relevo, dejó cerrada su renovación por un año más. Nada ha cambiado desde entonces. Por eso, el croata está muy molesto por los rumores que durante las últimas semanas le sitúan fuera del club blanco, puesto que él en ningún momento se ha dejado querer por ningún club árabe. De hecho, la última oferta que recibió procedente de Arabia llegó hace bastantes meses y entonces ya fue rotundo: su prioridad era seguir en el Bernabéu. La oferta económica era irrechazable (unos 50 millones por temporada) y no quiso ni escucharla.

"Mi foco está en la selección nacional. En cuanto al Real Madrid, ya lo he dicho todo muchas veces y no me gustaría repetirlo", aseguró Modric en la previa del encuentro ante Países Bajos, en el que Croacia se clasificó para la final de la Nations League. Contestó con rostro serio y de manera breve, remitiéndose a lo que tantas veces ha respondido: desea seguir en el Real Madrid siempre que el club blanco quiera que siga.

No es la primera vez que Luka responde molesto a cuestiones sobre su futuro, aunque siempre lo ha aceptado con naturalidad porque sabe que el Real Madrid, a su edad, le aplica la regla por la cual negocia sus renovaciones año a año y a partir del mes de abril. En 2022 esta circunstancia, la de esperar hasta el final de curso, le generó malestar, pero esta temporada ha acatado los plazos de buen grado. Estaba convencido de que daría el nivel necesario para continuar otra temporada más y así ha sido.

Su buen rendimiento provocó que el Real Madrid se sentase con él a tratar la ampliación en unas negociaciones que duraron muy poco: Modric dio el 'sí' incluso antes de que le llegase por escrito la oferta formal. El dinero no es una prioridad para él y en el pasado no tuvo problema alguno en rebajarse el sueldo, cuando el club se lo pidió por los problemas económicos que generó la pandemia. Esta vez se le mantuvo el salario actual y el croata aceptó de inmediato.

Es por esto precisamente por lo que Modric está enfadado: su acuerdo con el Real Madrid está cerrado. En su cabeza sólo existe la opción de incorporarse el próximo 20 de julio a la pretemporada a las órdenes de Ancelotti y cada rumor que sale sobre su posible marcha a Arabia le molesta, porque no quiere que ningún aficionado o dirigente madridista piense que se está dejando querer.

La mentalidad de Luka Modric sigue siendo la misma: va a seguir en el Real Madrid siempre que quieran que siga. Ahora mismo, con su renovación cerrada, da por hecho que eso es así. Sólo existe un escenario en el que se plantearía cambiar de aires: que el club o Ancelotti le digan que no va a ser una pieza importante la próxima temporada o que no hay sitio para él. Eso está lejos de producirse, porque Carletto ha realizado la planificación de la próxima temporada contando con él, los dirigentes están encantados con él y a día de hoy nada hace pensar que eso pueda cambiar.