El Real Valladolid pierde a Víctor Fernández, joya de su cantera, que apunta al Levante

Fin a uno de los culebrones del año en Valladolid. Víctor Fernández, una de las principales estrellas de la cantera, ha decidido que abandonará la entidad a final de temporada. Tras numerosas ofertas de renovación y mucho meditarlo, el futbolista de 16 años ha comunicado a los responsables su intención de continuar su carrera lejos de Zorrilla.

El mediocampista ofensivo esperó durante meses una oferta que se adecuase a lo que pedía, pero el Valladolid, que lo intentó en varias ocasiones, nunca llegó a cumplir las expectativas. Por el contrario, numerosos equipos de España y de Europa se pusieron en contacto con su entorno desde hace más de un año para transmitirle no sólo interés, sino ofertas formales muy por encima de lo que estaban dispuestos a dar en Pucela. Aún así, Víctor aguantó hasta el final.

Su futuro no se ha cerrado, pero todo apunta a Levante. El conjunto valenciano lleva meses suspirando por él, con un proyecto deportivo a medida y un contrato con el que demostrarle su importancia en el proyecto. De larga duración y sin siquiera pisar el filial. Desde su llegada, Víctor formaría parte del primer equipo. El resto de clubes interesados apuran sus opciones, pero la propuesta levantinista parece difícilmente mejorable.

Cabe destacar que el Valladolid no sacará ni un euro del movimiento. Víctor todavía no ha firmado su primer contrato profesional, por lo que saldrá gratis una vez acabe la temporada. Una gestión muy criticada por parte de la afición teniendo en cuenta que, además de uno de sus mejores canteranos, se trata del hijo de una de las mayores leyendas del club. Un futbolista de la casa.

Víctor ya ha debutado con el Valladolid Promesas en Segunda Federación y no es raro verle entrenar a las órdenes de Pezzolano en el primer equipo. Todo ello siendo todavía juvenil de primer año (2007). Además, ha jugado cinco partidos con España Sub-17, siendo uno de los grandes futbolistas de su generación.

Si se confirma su llegada al Levante, le tocará acelerar su proceso para adaptarse lo más rápido posible al fútbol profesional. Allí lo esperan con los brazos abiertos, aunque siguen temiendo la intromisión de un gran club que pueda interponerse. Por el contrario, en Valladolid se lamentan: se escapa una joya.