MUNDIAL DE CATAR

Cara y cruz de hacer un reportaje sobre fútbol femenino en Catar

El fútbol se ha convertido en una vía de esperanza para muchas mujeres en Oriente Medio: "No somos perfectos".

Cara y cruz de hacer un reportaje sobre fútbol femenino en Catar
Salvador Fenoll
Mayca Jiménez

Salvador Fenoll y Mayca Jiménez

Son las 11:00 am. La primera entrevista está a punto de empezar. El objetivo es descubrir a fondo la fundación Generation Amazing, una iniciativa social creada en torno al Mundial de Catar. Primero, nos atiende su presidente y, después, una de las mujeres y jugadoras cataríes que se benefician de sus programas. Dos charlas con sabor agridulce. De la ilusión de ellas a la falta de más autocrítica cuando se habla de derechos humanos y, sobre todo, de desigualdad de género, pasando por la intención de alguno de ellos, en este caso él, de empujar y ayudar a las mujeres.

Volvemos a la entrevista. Una alarma en el Host Country Media Centre de Doha sorprende a todos. No hay que preocuparse. Es un simulacro de incendios. Tras desalojar el edificio, todo el mundo se reubica en su lugar de trabajo en el edificio del Comité Supremo para la Organización y el Legado del Mundial de Catar y ese instante queda como una anécdota curiosa. Periodistas, cámaras, voluntarios... El centro tiene mucha actividad, con la Copa del Mundo llegando a la final de su fase de grupos.

Ahora sí, todo se organiza para que podamos empezar la charla con Nasser Al Khori (Doha, 33 años). Nos situamos en una de las salas de encuentros en la primera planta. Al Khori nos saluda y se presenta. Cercano, tranquilo y sonriente. La charla comienza con el foco en su fundación: "Nacimos en 2010 para usar el fútbol como un catalizador del cambio y el progreso social. Promovemos la inclusión y la igualdad de género en un programa de fútbol para el desarrollo".

Al Khori habla con orgullo de los logros de su organización: sus programas se han expandido de los campos de refugiados de Jordania, Líbano o Siria a los rincones de hasta 35 países en el mundo (Catar, India, Omán, Myanmar, Nepal, Filipinas, Ruanda, Uganda, India...), han construido más de 40 estadios para iniciativas sociales... Su labor de ayuda a las mujeres y personas más desfavorecidas es encomiable. Hasta ese punto todo bien. Llega el momento de mirar hacia fuera y tocar el asunto de mayor polémica entorno a este Mundial de Catar: los derechos humanos.

Las mujeres, los homosexuales y... la entrevista es interrumpida. Al Khori ha respondido a estos asuntos e incluso se le vio cómodo haciéndolo, pero nos piden centrarnos en Generation Amazing. Sin una razón que conozcamos de peso. Sobre la mesa, preguntas como: ¿Está siendo difícil ayudar a las mujeres a que puedan participar en vuestros programas de fútbol? ¿Por qué las mujeres no tienen los mismos derechos que los hombres? ¿Por qué yo, como mujer, tengo unas libertades en mi país que las cataríes no tienen? ¿Cómo están trabajando para ayudar también a las personas del colectivo LGTBIQA+? El debate arrancó tan rápido como terminó.

"¿Qué puedes hacer tú en tu país que no pueda hacer una mujer en Catar?", pregunta Nasser. La respuesta es clara: "Muchas cosas. Me puedo casar con quien yo quiera, puedo estudiar lo que quiera o trabajar donde quiera...". "Aquí también", añade. Y seguidamente recurre a los argumentos que justifican la realidad actual (religión, tradición, cultura...) y al 'hay países peores', 'hemos mejorado' o al ejemplo de un familiar, su hermana, que ha podido casarse con quien ella quería pese a que sus padres no estaban de acuerdo. "Somos los más progresistas de la región de Oriente Medio. En términos de derechos de las mujeres estamos muy por delante de todos los demás", afirma. Y nadie se lo pone en duda.

Aunque quedan muchos interrogantes cuando se ponen sobre la mesa temas como el de la selección femenina de Catar, que lleva sin disputar un partido oficial desde 2014. "Se abordará en los próximos meses para tener un equipo completamente funcional con un entrenador y crear ese ecosistema bueno para el equipo nacional. Respondiendo a tu pregunta, la intención es ver a un equipo nacional femenino. Es solo cuestión de tiempo", sentenció Al Khori.

Y entre líneas, deja un atisbo de autocrítica. "No somos perfectos. Las cosas mejorarán y las cosas están mejorando. Las mujeres tienen muchos derechos aquí en Qatar y eso es algo que ha cambiado en los últimos 20 años", confiesa Al Khori, al que hay que reconocer un gran trabajo en la lucha por el progreso de colectivos como las mujeres. El presidente de Generation Amazing admite que ha sido "difícil" trabajar en ello. "Las cosas están cambiando, sobre todo desde hace diez años por la Copa del Mundo. En los deportes femeninos en general, no solo en el fútbol", confirma. Y lo cierto es que el Mundial o iniciativas como la que lidera Al Khori han traído un aire fresco y de cambio a Catar. Y lo comprobamos en la siguiente entrevista.

En la sala aparece una chica joven, sonriente y un poco nerviosa. Ponerse frente a la cámara impone y nos han dicho que se sentirá muy incómoda si tratamos temas que generan mucha controversia. Sin duda, hay un miedo generalizado en meterse en problemas. "Encantada", saluda amablemente. Su nombre es Al Jazi Al Marri y tiene 23 años. Se sienta y nos damos cuenta de que lleva la camiseta de España debajo de la túnica negra. "¿Eres aficionada de la Selección española?". "Sí. Me encanta. Mi ídolo siempre fue Iniesta. Ahora, me gusta mucho Alexia Putellas. Es la mejor. Gavi y Pedri lo están haciendo de maravilla", dice con entusiasmo. Se rompe el hielo.

"El fútbol lo es todo para mí"

Al Jazi Al Marri

¿Qué es el fútbol para ti? La siguiente pregunta hace que su cara se ilumine. "Llevo jugando desde niña. El fútbol lo es todo para mí y, en él, quiero contribuir a crear una comunidad inclusiva", confiesa, con ese brillo en los ojos de quien habla de las más grande de sus pasiones. Aficionada del Barça, recuerda cuando España ganó el Mundial en 2010: "Yo estaba justo en Holanda y era la única que llevaba la camiseta [risas]. He seguido a España desde niña".

Al Marri señala a Generation Amazing como un lugar "seguro" donde puede expresar su amor por el fútbol y donde siente que le valoran "como mujer y persona". Y continúa: "El fútbol tiene una enorme influencia para cambiar la vida de muchas personas. Y crea muchas oportunidades. Es muy importante que ahora haya más mujeres de Catar trabajando en la federación o en la FIFA. Creo que se está demostrando a la gente que las mujeres pueden hacer esto y que pueden asumir responsabilidades o aportar cosas muy, muy buenas".

Ella estudia Diplomacia Internacional en el Deporte y lo que más claro tiene en la vida es querer seguir jugando al fútbol. Su familia le anima a ello y su apoyo es clave para que se sienta con fuerza en una desigualdad que ella apunta como "global". "Las mujeres tienen dificultades para dedicarse a los deportes, pero no es sólo un problema de Doha, sino que es a nivel mundial. Es injusto que se señale a Catar porque las mujeres se están involucrando más. Es necesario que se mejore el deporte para las mujeres, pero creo que vamos por el buen camino", apunta. Su voz es la de otras muchas jóvenes que ven el fútbol como un vehículo de esperanza hacia un futuro más igualitario.

Ella es la cara amable de una lucha silenciosa y muy pacífica en una sociedad en la que resulta casi imposible que alguien admita que, ya sea por cultura, religión o tradición, la mujer se halla en una gran desigualdad con respecto al hombre. Hay miedo y, sobre todo, hay un mensaje social que ha logrado convencerles de una normalidad que no lo es.