La irrupción de Tere Abelleira: de ser suplente a la revelación del Mundial
La del Real Madrid está siendo la mejor centrocampista del Mundial.
El fútbol siempre guarda sorpresas para quienes las merecen. El caso de Tere Abelleira (2000) es uno de esos que merece ser analizado, porque la jugadora del Real Madrid se planta en la final del Mundial siendo la mejor centrocampista del torneo en un campeonato que ha aglutinado a la posible futura balón de oro (Aitana Bonmatí), a la actual mejor jugadora del mundo (Alexia Putellas) y a centrocampistas del nivel y experiencia de Keira Walsh. Está siendo su Mundial. Y probablemente la mejor jugadora del mismo.
Mientras que en el Real Madrid Abelleira ha actuado como interior, en este Mundial lo está haciendo como la mediocentro en un 4-3-3, por lo que la responsabilidad es altísima... y su nota también. La centrocampista gallega viene siendo el motor principal de la selección de Jorge Vilda, asumiendo muchísimas responsabilidades independientemente de la altura a la que se encuentre el ataque. Abelleira ha sido la primera jugadora en recoger los primeros pases y, sobre todo, la que más ha verticalizado las posesiones. Sin renunciar a su naturaleza más ofensiva, ha sabido trasladarla a otro rol.
Jorge Vilda viene cambiando algunos nombres a lo largo del torneo. Mientras Aitana es la interior que nunca varía, hemos visto a jugadoras como Alexia, Mariona o Jenni en la posición de interior zurdo, algo que ha cambiado la forma de atacar de la selección a lo largo del torneo dependiendo de qué nombre la ocpuase. Pero la naturaleza de Abelleira siempre se mantiene intacta, jugando con una confianza extraña en alguien que durante este curso no la ha gozado en su club, demostrando que su fútbol siempre ah estado latente. Y más cuando el vacío es el que deja Patri Guijarro, la mejor mediocentro del mundo.
Durante este Mundial, Abelleira es la terecera centrocampista que más ocasiones viene creando por cada 90 minutos (4), además de ser la quinta que más pases filtra hacia el último tercio (14,9), dos cifras que señalan la importancia de la jugadora de la Selección a la hora de acelerar las jugadas. Si miramos el total, nadie ha generado mñas ocasiones que ella (23), 11 más que Aitana Bonmatí. El rol de Tere es muy parecido al de una interior cuando España tiene la pelota, ya que las dos centrocampistas que la acompañan tienden a ser más atacantes que centrocampistas en muchas ocasiones.
Como se aprecia en el mapa, Abelleira tiene influencia en todo el centro del campo, basculando hacia ambos perfiles para ser un punto de apoyo tanto para las laterales cuando construyen como para las extremos una vez reciben y buscan filtrar dentro. El acercamiento de Tere permite que las interiores vivan muy lejos del área rival y España tenga siempre opciones de profundizar por el carril central.
Es una futbolista con facilidad para filtrar dentro y dar continuidad a la jugada, por lo que la etiqueta de "mediocentro posicional" no se adecua a la jugadora del Real Madrid. Su fútbol es expansivo y siempre está en constante relación con otras zonas del campo, algo que beneficia mucho a la selección española a la hora de poder generar sus ataques.
No es de extrañar que Tere sea la jugadora de más influencia en el centro del campo de la finalista de la Copa del Mundo. Nadie da más pases ni genera más ocasiones que ella, a la vez que hace lo que se le supone a una mediocentro: defender y evitar situaciones comprometidas para sus compañeras. Es la tercera futbolista con más balones recuperados, y su actividad defensiva durante este Mundial está permitiendo que España esté pudiendo controlar (salvo el día de Japón) las transiciones rivales con mayor facilidad.
Nadie la esperaba, y no solo ha llegado, sino que su nivel es sencillamente espectacular. En un equipo que cuenta con dos de las mejores futbolistas de la historia de España, y ante la ausencia de una de las grandes mediocentros de los últimos años, Tere Abelleira ha sabido rellenar el silencio con palabras concisas, casi siempre adecuadas. La final la espera.