Iñigo Córdoba descubre el milagro de Noppert, el portero estrella de Van Gaal
El ex del Athletic, ahora en el Fortuna Sittard, coincidió con el guardameta en el Go Ahead Eagles, de la Eredivisie: "Compartimos charlas en la camilla".

"¿Jugará? 'No creo, va como tercer portero. Tiene por delante a Pasveer y a Bijlow'". Esa fue la respuesta que le dieron al español Íñigo Córdoba (25 años), cuando preguntó si Andries Noppert (28 años, Heerenveen), hoy indiscutible para Van Gaal en el Mundial (360 minutos), tendría alguna opción de ser el guardameta titular de Países Bajos en Catar. El ex del Athletic, que actualmente milita en el Fortuna Sittard de la Eredivisie, coincidió con la gran revelación de la Oranje la pasada temporada en el Go Ahead Eagles.
"Pasamos mucho tiempo juntos porque los dos teníamos problemas en la rodilla y nos quedábamos hablando en la camilla. Es una buena persona, bromista y un tipo con un humor muy peculiar. Siempre me acordaré de una de las quedadas que organizábamos fuera del vestuario en la que me dijo 'prueba el Moscow Mule que está rico'. Es un cóctel que estaba bastante bueno", recuerda entre risas el extremo español a Relevo. Este viernes el guardameta, que no hizo caso al consejo de su mujer y que hace unas temporadas jugaba en la Serie C, defenderá la portería de Países Bajos ante Argentina (20:00) en cuartos de final del Mundial.
El portero que pudo ser policía
"Mi mujer pensó que la policía era algo para mí. Yo no y tuvimos discusiones sobre eso. Solo dije: 'continuaremos hasta el final' (...) Me alegro de haberme escuchado a mí mismo", confesó recientemente en una entrevista a de Trouw. Elegido por Van Gaal por delante de Jasper Cillessen, Noppert se enfundó por primera vez la camiseta de su selección en el partido inaugural que Países Bajos disputó ante Senegal. Relegado a la suplencia en todos los clubes por los que había pasado, a Andries el destino le cambió diez meses antes de la cita mundialista. "Fue titular en un partido de Copa y lo hizo bastante bien. Le dieron otra oportunidad en Liga y volvió a responder", recuerda Córdoba. Warner Hahn, quien era el portero titular, pasó a un segundo plano y el holandés acabaría abandonando el equipo tras un enfrentamiento con el club.

"Aunque al principio no jugaba nada, Andries nunca bajó los brazos. Era un muy buen suplente. Siempre entrena bien y daba lo mejor de sí. Era una persona muy inteligente y sabía que en aquel momento su papel en el club era ese", cuenta. "Recuerdo que cuando por fin le llegó su momento, él lo disfrutaba muchísimo porque sabía por todo lo que había pasado". Una lesión de rodilla apunto estuvo de apartarle del fútbol en 2020. Tras un año sin equipo, el runrún empezó a sonar en su cabeza pero entonces el Go Ahead Eagles se cruzó en su camino. "Llegué de los últimos pero los dos congeniamos muy bien. Como yo me había operado hace poco, pasábamos mucho tiempo en la camilla juntos. A él le dolían las rodillas y sufría mucho entrenando. Recuerdo que tomaba pastillas para aliviar el dolor", recuerda. "Cuando lo veo en Catar me alegro de todo lo que está consiguiendo. Ahora está rodeado de estrellas pero estoy seguro que sigue siendo el mismo de siempre. Nunca ha vivido eso de ser el foco de las cámaras pero seguro que se lo ha tomado de una manera muy natural".
Muchas bromas y un truco para marcar goles
Con un humor bastante peculiar, "al principio no sabía si se estaba riendo de mí o si estaba serio", español y holandés se compinchaban para gastarle bromas a sus compañeros. "Es una persona muy graciosa. Siempre nos buscábamos el uno al otro para hacer bromas en el vestuario. Escondíamos cosas, echábamos un poco de sal en el agua, etc". Pero al margen de las risas, Noppert tuvo mucho que ver en algunos de los 12 goles que el extremo logró aquella temporada. "No soy una persona muy grande. No me caracterizo por ese poderío pero me acuerdo que cuando entrenábamos los córners, me ponía con él para trabajar la estrategia. Me posicionaba y me decía 'quédate aquí que molestas al portero. No le dejas que se mueva. Luego da dos pasos para atrás'. Si ves alguno de los goles que hice de córner la temporada pasada eran así".
Sus 2,03 metros de altura y su 48 de pie lo convierten en el jugador más alto de la Copa del Mundo. "Sabe cuáles son sus virtudes y sus puntos débiles. No corre más riesgos de los debidos. Sabe que no tiene el pie que tiene Ter Stegen y por eso no se complica mucho la vida". Desde la distancia Íñigo Córdoba animará esta noche a su amigo. Le mandará un mensaje para desearle suerte y si todo va bien quizás Noppert tenga que invitarle a otro Moscow Mule.