MUNDIAL DE CATAR

La esencia de De Jong es mandar... y Xavi lo sabe

El neerlandés fue el más destacado de su selección en el debut mundialista ante Senegal.

Frenkie De Jong durante el debut /Getty
Frenkie De Jong durante el debut Getty
Albert Blaya

Albert Blaya

Hay pocos futbolistas más estimulantes para el análisis que Frenkie De Jong. Es un jugador que engloba toda la complejidad de este deporte y a la vez toda la sencillez: entender dónde y cómo puede rendir a su mejor nivel ha llevado muchas preguntas a distintos entrenadores, y a la vez la respuesta parece ser tan sencilla que es difícil. Solo necesita mandar. Ser el protagonista. De Jong debutó por todo lo grande (asistencia incluida) en este Mundial y parece que, poco a poco, Xavi le va dando otro rol.

Durante la fase clasificatoria para el Mundial, solo Kimmich (102) dio más pases por cada 90 minutos que él (91), una cifra que no ha alcanzado nunca con el FC Barcelona. De hecho, en el curso 21/22, De Jong solo dio 55, su peor cifra en toda su carrera. Un futbolista, que por naturaleza tiene el estar en contacto permanente con la pelota, alejado del cuero y eso radica en una indefinición. Con un equipo en problemas, De Jong sería todo aquello que el conjunto no tenía: profundidad, presencia en el área. Xavi le dio peso a los laterales (Alba y Alves) en la construcción y alejó a sus centrocampistas.

En una entrevista reciente, Van Gaal dijo que De Jong no lograría quitarle la posición a Busquets, pero que en cuanto este se marchase, sería su sucesor. "Sus grandes virtudes son el superar líneas en conducción y tener mucho la pelota". Durante mucho tiempo, en el Barça se le negó esta posibilidad por una incompatibilidad con lo demandado y porque, honestamente, cuando jugaba en esa posición, no terminaba de funcionar. Pero ya no. El De Jong de Países Bajos y el del Barça cada vez son más parecidos.

Una de las claves de Países Bajos es los aclarados constantes que realizan para darle todo el espacio en el carril central a De Jong, que de facto es el único centrocampista que juega en esa zona.  Albert Blaya
Una de las claves de Países Bajos es los aclarados constantes que realizan para darle todo el espacio en el carril central a De Jong, que de facto es el único centrocampista que juega en esa zona. Albert Blaya

Si en Países Bajos, Van Gaal le aclara los primeros pases para que De Jong se sitúe a su gusto (como central exterior, incrustado entre los defensas, lateralizado o por delante de la línea de balón), en el Barça está sucediendo algo parecido, aunque ahí hay una particularidad y es que Sergio Busquets es quien ocupa la posición de pivote. Como Xavi quiere que su equipo sea más vertical, está descubriendo en De Jong a un jugador más capaz de acelerar secuencias sin la necesidad de tener a muchos futbolistas cerca. Con esta decisión, De Jong le da mayor amenaza sin tener que sacrificar activos en la base, porque Frenkie es una salida de balón en sí mismo.

De Jong ejerciendo de pivote en su último partido con el Barça, con Busquets sensiblemente más adelantado, algo que se va dando cada vez más en los partidos en los que ambos coinciden.  Albert Blaya
De Jong ejerciendo de pivote en su último partido con el Barça, con Busquets sensiblemente más adelantado, algo que se va dando cada vez más en los partidos en los que ambos coinciden. Albert Blaya

El Mundial de Catar puede suponer un punto de inflexión para un jugador que llega en plena madurez a la cita. Tras un gran debut, queda todavía más claro que Frenkie es, en esencia, un mandón. En el Barça no tenía poder de decisión y eso era como tener a un niño sin juguetes que usar. Xavi ya ha descubierto al verdadero De Jong y ahora quedará la duda de cómo acoplarlo viendo que Busquets con Luis Enrique sigue siendo el ABC de su sistema. Gestionar dos mundos que parecen condenados a no entenderse y elegir en cuál de ambos debe construirse su proyecto.