Reformar los estadios públicos para el Mundial cuesta más de 600 millones... y la factura va a subir
Además del Bernabéu y el Camp Nou, ya terminados o en marcha y financiados con dinero privado, otros estadios públicos necesitarán reformas para acoger el torneo.

La elección directa de la candidatura de España, Portugal y Marruecos para el Mundial 2030 acabó con casi toda la incertidumbre que suelen tener estos procesos, pero aún quedan varias incógnitas. Y la más importante y cercana en el tiempo es la decisión de dónde se jugarán los partidos. La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) debe realizar una criba y quedarse con 11 sedes, que serán las que tenga España durante el torneo.
Todo se conocerá antes del 31 de julio, que es la fecha límite para finiquitar el Bid Book. Ese documento es la biblia de la candidatura, y entre otros muchas cuestiones recoge cuáles son las sedes de los partidos y sus características.
España tiene 15 estadios que aspiran a acoger encuentros: Santiago Bernabéu, Metropolitano, Camp Nou, RCDE Stadium, La Cartuja, La Rosaleda, Nou Mestalla, San Mamés, Anoeta, Balaídos, Riazor, Gran Canaria, Enrique Roca, El Molinón y La Romareda.
De esos hay dos que están casi descartados. Uno es El Molinón, porque el Ayuntamiento de Gijón renunció a seguir adelante. El otro es el Nou Mestalla, cuya finalización sigue bloqueada (aquí puedes leer los detalles de su situación). De los 13 restantes, Balaídos y el Estadio de Gran Canaria son los que lo tienen más difícil, como informó Relevo.
De esos 15 estadios, cinco son privados (Santiago Bernabéu, Camp Nou, Metropolitano, RCDE Stadium y Nou Mestalla). Solo las reformas del Santiago Bernabéu y el Camp Nou suman unos 2.500 millones de euros que serán sufragados por ambos clubes. El estadio madridista ya está casi terminado y el azulgrana está previsto que se inaugure en 2026. El Metropolitano y el RCDE Stadium tampoco necesitarían grandes obras para cumplir con las exigencias del Mundial. Otro asunto es el Nou Mestalla, del que ahora solo está en pie el esqueleto del proyecto original abandonado desde 2009.
Los estadios públicos
Hay otros dos estadios de propiedad pública o semipública que no necesitan muchas reformas. Son San Mamés y Anoeta, infraestructuras recientes que cumplen con la mayoría de requisitos de FIFA.
El resto (La Cartuja, La Rosaleda, Gran Canaria, Balaídos, Riazor, Enrique Roca, La Romareda y El Molinón) sí que va a sufrir grandes renovaciones. En algunos casos lo harán independientemente de acoger o no el Mundial. Las inversiones previstas, entre dinero público y privado, superan los 600 millones de euros sin contar Riazor (preguntado por el proyecto de reforma, el Concello de A Coruña ha respondido que aún no puede dar detalles) y los dos estadios casi descartados (El Molinón y el Nou Mestalla).
La Junta de Andalucía presentó en marzo los proyectos para remodelar La Cartuja y La Rosaleda (tiene una participación mayoritaria en el primero y un tercera parte del segundo). El estadio sevillano será ampliado hasta los 71.000 espectadores, lo que permitiría acercar las gradas al terreno de juego. Para la primera fase de las obras ha comprometido 10 millones de euros.
La remodelación de La Rosaleda aumentará el aforo hasta los 45.000 espectadores, además de añadir otros servicios. El presupuesto es de 232,5 millones de euros, según datos de la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte. La idea de la Junta es que la financiación sea mixta, pero aún no está cerrada.
¡#Andalucía lo tiene todo para ser escenario de varios partidos del Mundial 2030! Presentamos una ambiciosa propuesta de remodelación de nuestros estadios aspirantes a ser elegidos como algunas de las sedes españolas.
— Juanma Moreno (@JuanMa_Moreno) March 14, 2024
📍Así será el nuevo Estadio de La Cartuja. pic.twitter.com/IxhGnZTSDb
El Estadio de Gran Canaria también será ampliado hasta los 45.000 espectadores. Y lo será elija o no la RFEF al Estadio de Gran Canaria como sede. El Cabildo, propietario de la instalación donde juega la UD Las Palmas, destinará 101,2 millones de euros a una obra que se prevé que esté terminada en 2027.
El caso de Balaídos es diferente. El estadio lleva años inmerso en unas obras que lo han cambiado por completo y que han costado 33,1 millones de dinero público. La última fase, la grada Gol, empezará pronto y costará otros 25 millones de euros. Más adelante, si es sede del Mundial, tendría que sufrir más reformas para alcanzar los 45.000 espectadores. Esas obras exigirían una inversión adicional de entre 60 y 75 millones de euros que el Concello de Vigo espera que sean aportados en parte por la Xunta y el Gobierno.

Otro plan que está más avanzado es el de Murcia. El Ayuntamiento reformará el Estadio Enrique Roca, sede del Real Murcia, para ampliarlo hasta los 42.000 espectadores. Según los detalles del proyecto publicado por La Verdad, el presupuesto es de 35 millones de euros.
También se encuentra en una fase bastante avanzada el proyecto de La Nueva Romareda. El estadio del Real Zaragoza será demolido y construido de nuevo. Su aforo será de 43.000 espectadores y estará terminado en 2029 (aunque es posible que las obras se adelanten y que el Zaragoza juegue alguna temporada en un estadio provisional), tras unas obras que costarán unos 180 millones de euros.
Ayuntamiento, Gobierno de Aragón y Real Zaragoza integran a partes iguales una sociedad para gestionar el proyecto. La idea inicial era que el club se hiciera cargo de la financiación a cambio de la explotación durante 75 años, pero aún no está cerrado.