Quién es María Tato, la directora de la candidatura del Mundial 2030 a la que ahoga la polémica por las sedes en España
Licenciada en Derecho, trabajó en el Athletic y Luis Rubiales la nombró directora de fútbol femenino de la RFEF.

La polémica vuelve a llamar a las puertas de la Real Federación Española de Fútbol, que abrió un paréntesis de tranquilidad tras la elección de Rafael Louzán el pasado mes de diciembre como nuevo presidente pero que, este lunes, una información de El Mundo ha vuelto a girar las cámaras y los titulares a Las Rozas a cuenta del reparto de las sedes para el Mundial 2030. Según publicó el periódico, se manipularon las puntuaciones para dejar fuera a Vigo y meter a Anoeta.
Horas después de este artículo, 'El Mundo' publicó un audio de esa esperpéntica reunión, celebrada el 25 de junio de 2024, donde se puede escuchar entre otros, como Fernando Sanz (ex responsable del equipo organizador) a María Tato, directora de la candidatura. "Vamos allá. Vamos a meter valores en el Excel a ver qué nos queda. La primera prueba de las 800 que haremos hasta que nos cuadre con el resultado", llegó a decir en ese cónclave que ha hecho estallar al alcalde de Vigo, Abel Caballero, que exige explicaciones.
#Exclusiva La esperpéntica reunión en la que se eligieron las sedes del Mundial 2030: "Vamos a meter valores hasta que nos cuadre el resultado"
— EL MUNDO (@elmundoes) March 24, 2025
✍️ Esteban Urreiztieta pic.twitter.com/rlXVCI4crd
De ese encuentro salió la primera clasificación que incluía el estadio de Balaídos entre los 11 elegidos, pero 48 horas después esa puntuación cambió y el coliseo vigués se cayó en favor del campo de la Real Sociedad. El foco principal apunta a la figura de María Tato, cabeza de esa candidatura para el Mundial a la que siempre le ha acompañado la controversia. Desde su salida del Athletic de Bilbao para aterrizar en la RFEF de la mano de Rubiales y hasta hoy.
Licenciada en Derecho, fue presidenta de la Asociación de Mujeres Directivas y Ejecutivas de Euskadi, de la Confederación de Empresas de Formación del País Vasco (CECAP), el Tribunal de Arbitraje Deportivo del País Vasco y vicesecretaria de la junta directiva del Athletic Club, club del que dimitió de su cargo en septiembre de 2020 para ser la nueva directora de fútbol femenino de la RFEF. Su salida de Bilbao generó cierto ruido, ya que se había comprometido a estar cuatro años en el equipo de Aitor Elizegi y se fue antes de cumplir el segundo. "La única razón de mi marcha es pelear en primera línea por el fútbol femenino", apuntó Tato en sus redes sociales y aclaró que fue Luis Rubiales, recién reelegido presidente de la Federación, quien la propuso para el cargo.
Pero pronto su nombre se vinculó a la formación de la candidatura de España, Marruecos y Portugal para el Mundial 2030. Formó parte del comité que integraron nueve personas: tres portugueses, tres marroquíes y tres españoles. Sin duda, Tato fue una de las integrantes de más criticadas del proceso. Responsable, entre otras, de la terrible imagen que dejó la RFEF cuando en el 22 de mayo de 2024, el día del examen FIFA para agentes, tuvieron que suspender la jornada porque no les funcionaba el wifi (el examen se canceló y se celebró más adelante), su nombre fue señalado en el 'caso Riazor'.
El estadio del Deportivo de la Coruña fue una de las sedes que siempre estuvo claro que iba a formar parte de las 11 elegidas. Pero en el club gallego hubo enfado porque se quedó fuera de prácticamente todo el proceso, que la RFEF coordinó con el ayuntamiento de la ciudad, dando por supuesto que todo le iba a parecer bien al club (Riazor es el estadio del Dépor... pero sólo de nombre; la titularidad es del consistorio). El comité para la candidatura lo formaron tres personas: María Tato, Fernando Sanz y Jorge Mowinckel. Con la sede de A Coruña, concretamente, trató la directora de la candidatura, que fue una de las que se libró de la ola de despidos que inició Rafael Louzán al llegar a la presidencia de la RFEF (sí se descabezó a Jorge Mowinckel y Fernando Sanz).
Ahora, con la revelación del audio de El Mundo, el nombre de María Tato vuelve a estar en el centro de una polémica que la envuelve con demasiada frecuencia.