MUNDIAL DE CATAR

Queiroz se revuelve: "¿Por qué no le preguntas a Southgate sobre Afganistán?"

"No me gusta hablar de política, pero no estamos bajo presión", añadió el delantero del Oporto, Taremi.

Carlos Queiroz, en la conferencia de Prensa previa al partido de Gales. /REUTERS
Carlos Queiroz, en la conferencia de Prensa previa al partido de Gales. REUTERS
José Luis Guerrero

José Luis Guerrero

Las conferencia de Prensa de Irán levantan una gran expectación internacional, y no precisamente por el significado deportivo del Gales-Irán de este viernes. Los futbolistas iraníes no cantaron el himno ante Inglaterra (6-2) como rechazo a la represión del régimen, que comenzó con las protestas que desencadenaron la muerte de Mahsa Amnini el pasado 16 de septiembre (a la que la policía moral había detenido por llevar mal puesto el hiyab). "Yo sabía que se iban a hacer este tipo de preguntas pero diga lo que diga no va a tener ningún impacto ya que algunos van a escribir lo que quieren escribir. Así que prefiero hablar solo de este tipo de temas políticos en privado o en mis propias redes sociales. Estamos para jugar al fútbol y no nos encontramos bajo presión", respondía el máximo goleador del equipo y delantero del Oporto, Medhi Taremi a la pregunta de una periodista de la BBC, Shaimaa Khalil.

Esa pregunta, una de las muchas que lanzaron tanto al futbolista como al seleccionador, Carlos Queiroz, provocó la reacción airada del técnico portugués. Al acabar la conferencia de Prensa, se dirigió a la periodista para recriminarle la pregunta. "Se dirigió a mí para preguntarme si era justo que hiciera una pregunta política a un jugador. ¿Por qué no hacía esa pregunta a otros entrenadores? "Por qué no le preguntas a Southgate sobre Estados Unidos y Gran Bretaña sobre la retirada de Afganistán", me dijo Queiroz", escribió la periodista en su cuenta de Twitter.

"No es justo que los iraníes sean los únicos a los que se les hace preguntas relacionadas con los derechos humanos"

CARLOS QUEIROZ

"No es justo que los iraníes sean los únicos a los que se les hacen preguntas relacionadas con los derechos humanos", insistió Queiroz, en ese corrillo que él mismo formó tras la conferencia de Prensa oficial de la FIFA. "¿Es justo seguir haciendo preguntas políticas? Es la libertad de prensa y es nuestro derecho no responder y respetar y entender nuestra posición. Los demás deberían respetar 3.000 años de historia (iraní), cultura, historia y ciencia. Los iraníes son educados y humildes y les gusta lo que a otros ciudadanos del mundo", subrayó.

Justo antes del primer partido ante Inglaterra, el capitán, Ehsan Hajsafi, sorprendió al mundo y alzó la voz de la rebelión: "La situación no es buena y el pueblo no está contento". La selección de Irán se reunió con el presidente del país, Ebrahim Raisi, antes de partir a Catar, lo que muchos interpretaron como una forma de apoyar al régimen. Pero la represión del régimen iraní no entiende de clases sociales: hasta una leyenda futbolística como Ali Daei, segundo máximo goleador de selecciones del mundo (108), fue castigado por los dirigentes del país. Le retiraron el pasaporte por defender los derechos de las mujeres. Contra Inglaterra, todos los ojos estaban puestos en los once elegidos por Queiroz. En esta ocasión, mientras sonó el himno de su país, los jugadores iraníes sí cantaron el himno.

¿Qué es lo que sucede en Irán?

Irán tiene un régimen teocrático desde 1979, cuando triunfó la Revolución Islámica y que se ha caracterizado en este tiempo por atacar sistemáticamente muchos de los derechos más básicos de las mujeres. Anteriormente, este país de Oriente Medio vivió tiempos diferentes y más occidentales al ser uno de los aliados de Estados Unidos, pero el país vive bajo una amalgama de grupos étnicos: azeríes, kurdos, turcomanos, baluchíes, árabes...

Un ejemplo deportivo para ilustrar la situación: el equipo más seguido de Asia es el Tractor Sazi, ubicado en el Noroeste de Irán, en la ciduad de Tabriz. Es un equipo que sirve como altavoz para las reivindicaciones independistas porque son azeríes, un territorio originalmente dividido por un pacto entre Rusia, que se quedó con Azerbaiyán, y Gran Bretaña, provincia de Azerbaiyán Oriental (de Irán); como consecuencia, Azerbaiyán quedó como un país moderno y secular (la estatua más representativa del país es una mujer quitándose el velo), mientras que el lado azerí, en Irán, se quedó la tendencia religiosa.

Luego se encuentran los kurdos (que reciben apoyo militar desde Irak y Siria a través de Estados Unidos) y los baluchíes, una región donde hay mucho gas y petróleo y que fue dividida en tres por culpa de los británicos: una parte en Irán, otra en Afganistán y otra en Pakistán. La parte iraní vive en la más absoluta pobreza y no aprovechan sus reservas de petróleo, controlado por Teherán. Y aquí emerge el papel de China, que ha determinado que la parte baluchí de Pakistán, Gwadar City, se constituirá un gran puerto marítimo para conectar China con Oriente Medio y África; por lo que los intereses chinos se unen con los de Irán y Pakistán para reducir las protestas nacionalistas baluchíes, un conflicto que ha dejado miles de víctimas mortales de ambos bandos...

Bajo este complicado contexto geopolítico, la represión a las mujeres pone de manifiesto la difícil situación del país, ya que las autoridades de Irán impusieron un código de vestimenta obligatorio que exige que todas las mujeres usen un pañuelo en la cabeza y ropa holgada que disimule su figura en público desde 1979. Los agentes tienen el poder de detener a las mujeres y valorar si están enseñando demasiado cabello, si sus pantalones y abrigos son demasiado cortos o ajustados, o si usan maquillaje en exceso. La participación de Irán en el Mundial de Catar ha puesto al país en el punto de mira internacional...