FEDERACIÓN

Pedro Rocha pide una segunda cautelar con el objetivo de presentarse a las elecciones de la RFEF

El que fuera presidente electo de la Federación, inhabilitado por una sanción del Tribunal Administrativo del Deporte, insiste en la cautelar para poder presentarse como candidato a las elecciones.

Pedro Rocha, expresidente de la RFEF. /EFE
Pedro Rocha, expresidente de la RFEF. EFE
Natalia Torrente

Natalia Torrente

Pedro Rocha lo volverá a intentar. Según ha podido confirmar Relevo, el que fuera presidente electo de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y posteriormente inhabilitado por una sanción del Tribunal Administrativo del Deporte (TAD), ha pedido ya al Juzgado Central de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional una segunda medida cautelar que suspenda provisionalmente su inhabilitación para poder presentarse a las elecciones a presidente de la Federación.

El pasado 3 de septiembre el mismo juzgado ya le denegó una primera medida cautelar que Pedro Rocha había solicitado días después de conocer su sanción de 33.000 euros y dos años de inhabilitación para ejercer cualquier cargo en federaciones deportivas, allá por el mes de julio. Tras la sentencia firme del TAD, tan sólo le quedaba recurrir por la vía contencioso-administrativa y así lo hizo. Según el extremeño, la aplicación inmediata de la sanción antes de que prosperara el recurso presentado ocasionaría un daño irreparable en caso de que finalmente el tribunal contencioso-administrativo se pronunciara a su favor.

Para conseguir la medida cautelar alegó que la medida le obligaba a dejar inmediatamente de ser presidente de la RFEF durante dos años, y que no podría presentar su candidatura en el próximo proceso electoral que se iba a desarrollar a partir de septiembre de 2024, tal y como había anunciado la RFEF en abril. Pero el juez consideró que una de las circunstancias que argumentaba Pedro Rocha a través de su defensa no se había producido aún —la convocatoria de las elecciones de la RFEF— y, por tanto, no le quedó otra opción que denegársela.

En cuanto al primer argumento, el magistrado indicó que "en relación con las sanciones disciplinarias que implican inhabilitación o suspensión de funciones, es importante destacar que el Tribunal Supremo no suele conceder la suspensión cautelar". Sobre el segundo alegato, el juez encerraba en su propia explicación la posibilidad de pedir una segunda medida cautelar cuando se convocaran las elecciones: "No hay prueba sobre la realidad de los perjuicios invocados; máxime cuando las elecciones a la Asamblea General de la RFEF aún no se han convocado. Lo anterior implica que no puedan tenerse por ciertos los perjuicios invocados (que son meramente hipotéticos o potenciales) y determina que ni siquiera proceda entrar a valorar su irreparabilidad". De esta manera, el titular del juzgado consideró que el documento presentado por Rocha y firmado por Álvaro de Miguel, que acreditaba en el mes de julio que se celebrarían elecciones en la RFEF en septiembre, no era suficiente.

Relevo ya adelantó que la intención de Pedro Rocha era solicitar esta segunda medida cautelar al juzgado una vez se convocaran las elecciones. Después de varios días desde que la RFEF hiciera público el nuevo proceso electoral y con la prudencia de superar el plazo establecido para posibles recursos e impugnaciones de la convocatoria, el expresidente de la RFEF ha dado el paso definitivo y el pasado viernes solicitó esta segunda medida cautelar, con la confianza de que prospere ahora que las elecciones federativas ya están convocadas.

Por su parte, Miguel Ángel Galán, que ya ha anunciado que no presentará ningún recurso por el momento, considera que el hecho de que Pedro Rocha fuera nombrado en 2024 presidente electo —aunque sólo pudo ejercer durante tres meses porque fue inhabilitado—, le impide presentarse en el mismo ciclo olímpico a unas nuevas elecciones, según los estatutos de la RFEF. Rocha, en cambio, considera que el ciclo olímpico corresponde al cargo presidencial que fuera a ejercer y no al momento de celebración de los comicios.

Álvaro de Miguel y dos precandidatos, en el horizonte

Según adelantó Relevo, si finalmente el juzgado le denegara a Pedro Rocha la segunda petición de medida cautelar, uno de los precandidatos en la carrera presidencial de la RFEF será Gerardo González, que ofrecía su experiencia y su perfil como figura de consenso.

También anunció el pasado jueves sus intenciones Juanma Morales, quien apoyado por David Silva, Luis Milla (padre), Virginia Torrecilla o Amanda Sampedro ponía su capacidad de gestión y experiencia institucional tras más de 25 años como primer ejecutivo en grandes empresas como Coca-Cola y Grupo IFA, al servicio del fútbol.

Para oficializar sus candidaturas, cada uno de ellos tendría que reunir y presentar el 15% de los avales, es decir, el apoyo de 21 de los 142 asambleístas, en cuya distribución será clave la figura de los barones territoriales que influyen en sus votos directos (20) y en el de clubes (50) y árbitros (11).

Sin embargo, Álvaro de Miguel, actualmente secretario general de la RFEF y con años de experiencia en la institución, ha cobrado fuerza en las últimas semanas como posible candidato. La estrategia federativa que lideró junto a UEFA y FIFA para desbloquear la institución, surtió efecto. Desde hace unas semanas, justo después de que Emilio García Silvero, jefe legal de FIFA, y representantes de UEFA vinieran a Madrid para reunirse con Fernando Molinero, director de Deportes, el acercamiento entre el Consejo Superior de Deportes (CSD) y la Federación es evidente. Presionaron así a un CSD al que habían consultado, pero sin respuesta, sobre el proceder de la institución para evitar posibles recursos de Miguel Ángel Galán, presidente de la Asociación Democracia y Transparencia en el Deporte, que alargaran la ya prolongada inestabilidad de la institución.

Según apuntan varias fuentes a Relevo, la figura de Álvaro de Miguel se postula lentamente a la presidencia federativa, más allá de la posibilidad de que a Pedro Rocha le concediera el juzgado la cautelar solicitada por segunda vez. Consideran que aportaría estabilidad a la institución, sabedores de que dentro de unos meses el recurso presentado por el extremeño podría no prosperar y la RFEF se vería de nuevo en la casilla de salida. Por ello, sin hacer demasiado ruido, va colocándose como el representante de la Federación en los eventos institucionales y deportivos, y como la figura de consenso real entre los presidentes territoriales, a pesar de que siguen contando con los dedos las posibilidades de algunos para sustituir a Rocha. De Miguel también cuenta con el visto bueno de José Manuel Rodríguez Uribes, quien le hizo un guiño en los Desayunos Deportivos de Europa Press en los que participó el pasado miércoles, al poner en valor la gestión y presencia del secretario general de la RFEF.

Toca esperar a que se pronuncie el Juzgado Central de lo Contencioso-Administrativo para conocer si Pedro Rocha contaría con el permiso para poder presentarse como candidato oficial y dilucidar si finalmente tendrá un rival procedente de las raíces de la propia RFEF y si los precandidatos consiguen reunir los apoyos suficientes para competir en la carrera presidencial de una Federación que lleva más de un año en plena marejada.