As Celtas y un plan para cambiar las normas que ya tiene frutos... en el Celta masculino: "No queremos ser la hermana pequeña"
Tras el nuevo equipo, de Tercera Federación, hay un llamativo proyecto con independencia: "Ellas tiran solas".

"As Celtas son las mujeres gallegas, fuertes, que hace muchos años salían a mariscar para tirar para adelante porque el marido se iba. Es ese sentimiento de no voy a rendirme...". Xisela Aranda vuelve al origen de todo para darle sentido a lo que puede resultar impactante: un equipo autosuficiente, con seguridad e independencia financiera del masculino. "Ellas se pagan a sí mismas", proclama la exfutbolista.
Antes de continuar, un dato importante que marca también la importancia de lo que han logrado: juegan en Tercera Federación, que corresponde a la cuarta categoría del fútbol femenino español. Querían empezar desde cero. Desde abajo. Y eso no fue un impedimento para que el equipo tenga su propio músculo económico, con patrocinadores propios, un staff propio de un club en la élite, con hasta 7/8 personas, remuneración para las jugadoras y un rumbo claro en el que todos quieren estar. Incluso ha provocado que varias marcas pujen en los despachos para estar junto a ellas. "Había que hacer las cosas despacio y bien hechas", apunta
En la primera parte de este serial, desveló cómo surgió y cómo se dio luz verde al equipo, a contracorriente de algunas voces con las que se encontró Marián Mouriño, presidenta del club celeste, por los palcos de LaLiga. Y, en esta segunda entrega, la consejera del Celta y clave en el proyecto femenino en el club gallego profundiza en el plan con el que pretenden -y ya han conseguido- cambiar muchos de los tópicos que se arrastran, dentro y fuera de los despachos, en el fútbol femenino.
Empezando por el "no generan". El "es complicado". O por el "no es rentable". Seguramente, Marián Mourino se acordaría de aquellos comentarios cuando, tras descubrir la otra realidad en el fútbol femenino, se topó con varias propuestas que llamaron a su puerta... por "culpa de ellas".
Entre varias anécdotas hay una que llama verdaderamente la atención, como la "puja positiva" que surgió entre algunos patrocinadores. Incluso salpicó de manera positiva al masculino, renegociando acuerdos. "Todo por culpa de ellas. Me encanta ese 'por culpa de' porque ellas fueron las que incitaron todo", cuenta Xisela.
Fue el primer golpe sobre la mesa de un proyecto que puede presumir de independencia económica del masculino. "No queríamos depender de ellos. No queremos ser la hermanita pequeña del masculino ni queremos que ellos tengan que cubrir lo que no nos llega. Ahora, podemos decir que As Celtas, económicamente hablando, tiran solas. No necesitan a nadie para subsistir. Tenemos patrocinadores propios, organismos públicos que quieren estar públicos…", apunta.
Y continúa: "Son libres financieramente porque tienen independencia económica, que creo que es algo también muy importante, y queremos que tengan su propia gestión. Estamos trabajando en ello. Todas las jugadoras cobran, menos las del filial, hemos ayudado a las de fuera a buscarse un piso y fomentamos que puedan formarse", asegura la consejera del Celta, que solo muestra por una rendija todo lo que hay tras el gran proyecto de As Celtas. Un equipo que se hizo esperar y en el que tiene claro sus virtudes y debilidades.
"Recuerdo las primeras reuniones en el club. Daros cuenta de que el Celta tiene 100 años de historia y As Celtas nace en el 101. Nunca antes se había trabajado con el fútbol femenino. No quisimos imponerla nada a nadie. Creíamos en el proyecto y lo transmitimos así. Les dijimos: 'Oye, si nos ayudáis, podemos hacer cosas muy chulas'. Ahora, todos están queriendo trabajar con As Celtas. Se han encontrado con un mercado completamente nuevo en el que puedes hacer cosas diferentes porque no te lo marca nadie. En el fútbol masculino es diferente", indica.
Un convencimiento y éxito que se extrapola a las redes sociales y a las gradas, con una gran acogida. Sin ir más lejos, al estreno en el estadio de Balaídos se saldó con 6.534 espectadores. Para un partido de Tercera Federación. Ganaron. Aunque nada de esto es casualidad. En As Celtas creyeron desde el principio en el proyecto y trazaron una estrategia en la que hay varios hitos que conseguir con los ascensos del equipo, que mira a estar en Primera en menos de diez años.
Conscientes del potencial de su entorno: "El 30% de los socios del club son mujeres, tenemos un público femenino muy importante. Además, el número de licencias de jugadoras en Galicia está por encima de la media nacional... Somos una sociedad en la que la mujer tiene un papel muy fuerte". Sin duda, el espíritu de As Celtas sigue muy vivo.