OPINIÓN

'Postureo TAD' o la forma para quitarse de encima la inhabilitación de Pedro Rocha que usa el CSD

El secretario de Estado para el Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes./EP
El secretario de Estado para el Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes. EP

De nuevo una denuncia (otra) de Miguel Galán ha puesto a bailar a las instituciones deportivas del país. Nunca había tenido tanta repercusión. Esta vez, porque parece que en algún momento de esta semana el Consejo Superior de Deportes (CSD) volverá a elevar al Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) una de sus denuncias contra Pedro Rocha, pidiendo, en última instancia, su inhabilitación. El movimiento de ayer generó más preguntas que respuestas, aunque aquí intentamos resolverlas casi todas.

El caso es que el marrón de las denuncias de Miguel Galán le va a volver a llegar al TAD, que pasa por ser el máximo tribunal para el Deporte en España. Reciben muchas suyas, últimamente. Él lo explica sin pudor aunque quizá con cierta contradicción en la entrevista que concedió a Relevo: "No quiero que resulte que quiero coaccionar a alguien. No es mi intención. Cuando se solucione lo de licencia [su reivindicación histórica contra la RFEF, en la que, por cierto, no le falta razón] pararé", aseguró. "Quien quiera ser presidente de la Española lo primero que tiene que hacer es sentarse con Miguel Galán, que es el que le mete en problemas. Si no, le voy a hacer la vida imposible. Punto", añadió después. Saquen ustedes sus propias conclusiones.

Pero más allá de las motivaciones y volviendo al tema: antes el CSD solía hacerse el sueco con este tipo de denuncias, que quedaban olvidadas en un cajón (casi siempre de Franco y Francos, anteriores secretarios de Estado), hasta que Galán, mediante un burofax, les avisaba de que iba a tomar medidas legales de verdad (de tribunales, no de justicia deportivo-administrativa), contra ellos si no elevaban sus escritos al TAD.

Así que empezaron a hacerlo. ¿Y cómo? Pues anda que no es rico el vocabulario jurídico para curarse en salud. Hay una fórmula secreta, un "truco" para enviar las cosas al TAD, esquivar las posibles denuncias de Galán y que no pase nada. ¿Quieren saberlo? Está en un matiz muy sencillo: no mojarse.

“Por si observan”

Lo que ha hecho el CSD últimamente es elevar al Tribunal Jurídico Administrativo las cosas de Galán, siempre con el comentario (más o menos) "por si observan que los hechos son merecedores de la apertura de un expediente". Es decir: "aquí te mando esto, porque si no me la lían, y si ves algo tú, pues genial. Con tu pan te lo comas". Algo así.

¿Qué hace el TAD? Pues... ¿qué va a hacer? Defenderse. Lo devuelven, piden más información, lo retrasan todo lo que pueden... El CSD vuelve a reenviárselo, como quien se pasa un globo con agua a punto de estallar y, al final, el TAD como no tiene más datos, pues lo archiva. A todos los efectos... culpa del TAD. Todos tranquilos (menos Galán, claro).

Por contextualizar: los magistrados del TAD son expertos en derecho deportivo que se reúnen, a razón de unos 80 euros la sesión, y que deciden en un 95% de los casos sobre temas menores y disputas de federaciones mucho menos influyentes que la de fútbol. Cuando llegan los "problemas" con las grandes, se sienten desamparados. Muchas veces, bajo amenaza de querellas penales por parte de gente con muchos más recursos que ellos, como ya hizo Villar, o Rubiales. El que tienen a los abogados del Estado de su parte es el Consejo Superior de Deportes, no el TAD, que se limita a una reunión semanal para decidir lo mejor que pueden sobre temas puntuales.

Así que no es así. Los expedientes que han salido adelante y desembocado en una inhabilitación siempre han sido cuando el CSD los ha elevado pronunciándose. Es decir: "Señores del TAD, aquí hemos observado que esto, esto y esto está mal. Consideramos que merece una apertura de expediente, pero ya es cosa suya hacerlo, o no". Que parece lo mismo, pero no lo es. Ni mucho menos. Es más valiente, más ejecutivo, más práctico y más responsable hacerlos así, si crees de verdad que hay un problema merecedor de un expediente. Si no, pues directamente es que no te crees lo que estás haciendo y sólo te estás cubriendo las espaldas hasta que te llegue la siguiente denuncia de Miguel Galán.

"Le corresponde al TAD dar certidumbre a este proceso", es la frase que utilizar el CSD siempre que el Tribunal Administrativo del Deporte archiva una querella. Lo que no dejan tan claro es que, para dar esa certidumbre, tienen que darles las herramientas adecuadas, en vez de pasarles el marrón, y que se las apañen. Porque, así, no se regenera ningún ecosistema federativo. Así lo único que queda es esperar a ver si, otra vez, FIFA decide intervenir y sacarle los colores al Gobierno por resolver, de un plumazo, una situación que ellos por incapacidad jurídica o cobardía han sido incapaces de afrontar.