El mercado en España: "Vamos a tener los mejores estadios, pero van a estar vacíos"
Diferentes actores del fútbol español analizan en Relevo la ventana invernal. Las sensaciones son mayoritariamente negativas.
Se cierra la ventana de fichajes de invierno y las sensaciones en el ambiente nacional son bastante más amargas que dulces. Nunca llueve a gusto de todos, pero lo cierto es que el mercado ha vivido en sus propias carnes el poderío incontrolable de la Premier League y la complicada situación económica de los clubes de LaLiga. "Esto está muerto", "no se mueve nada" o "no tengo mercado" son algunas de las frases que más se han escuchado en los teléfonos de los redactores de este medio en el último mes. Un representante, consultado por el análisis del mercado en España, respondía irónico: "¿ha habido?".
El balance es lapidario: mientras en Inglaterra se han gastado 829 millones de euros, en España no llegan a los 32. Nada menos que 25 veces más. Pero no es la única lectura negativa que deja este periodo. En Relevo hablamos con diferentes actores para que no den su punto de vista: el Fair Play Financiero, la pandemia, el deadline day…
Primero, la 'versión oficial'. Javier Gómez, director general de LaLiga y padre de la criatura (con él nació el Control Económico que sacó a muchos clubes españoles de la ruina entre 2014 y 2019) mantiene el mismo argumento que en la anterior ventana de fichajes: "Queremos que los clubes gasten lo que pueden pagar. Y generar. Los accionistas pueden apoyar (con ciertos límites) para que puedan gastar algo más. Pero en la Premier ocurre todo lo contrario: junto con la Championship habían perdido 3.000 millones de euros. LaLiga, con la pandemia, perdió 250 millones de euros. ¿Qué ocurre? Que en ese mismo periodo de tiempo los accionistas en Inglaterra han puesto 3.500 millones de euros. En ese mismo periodo, los accionistas españoles han puesto 450 millones. ¿Qué hay detrás? Pues que están dopando a sus clubes. Inyectando que no generan, para poder gastar. Y eso pone en riesgo la viabilidad de ese club cuando el accionista se marcha. Y, en segundo lugar, a nosotros nos parece que eso es hacer trampas". Esta es la versión de la patronal los clubes españoles. Pero, ¿cuál es la opinión del resto de actores que participan?
La competición que menos ingresa en fichajes
"Ha sido un mercado precario", afirma Álvaro Torres, director de fútbol mundial de la agencia You First Sport. Se apoya en la cantidad de fichajes gratis (libres o cedidos) que se han realizado este enero, aunque añade que es una situación muy similar a la del año pasado. Si bien es cierto que la cantidad de movimientos sumando entradas y salidas es similar, el gasto ha sido el más bajo de los últimos cinco años (31,88), solo superado por el invierno de la pandemia (21,3).
LOS ÚLTIMOS MERCADOS DE INVIERNO DE LALIGA
La cifra más preocupante puede ser la del dinero ingresado. La española es la última de las cinco grandes ligas en dinero generado por ventas: 45,1. Son 20,9 millones menos que la siguiente en la lista, la Serie A (66) y 154,3 que la Ligue 1, líder en la estadística (199,4). Algunos miembros del panorama afirman que uno de los motivos de que esto suceda es el poco intercambio de futbolistas entre equipos nacionales. "En España no se genera nada de mercado interno, cosa que Italia por ejemplo, sí. Algo que nació como buena idea para evitar las deudas (el control financiero) está haciendo que la Liga cada vez se debilite más y sea muy difícil traer jugadores de nivel porque siempre somos la segunda opción", opina un ojeador de un equipo de primera.
No se puede pasar por alto la pandemia como principal causante de la crisis económica que vive el fútbol español. "Aún nos estamos recuperando del efecto COVID y es muy difícil hablar de operaciones de traspaso en el mercado interior que tengan consecuencias económicas más allá de la asunción de un salario", expresa Manuel Vizcaíno, presidente del Cádiz.
Un Fair Play «asfixiante»
El análisis en los equipos es una mezcla entre la resignación, porque el margen de maniobra es "asfixiante" debido al Fair Play Financiero, y la aceptación de que estas reglas son las que los propios equipos han votado. "Los clubes están absolutamente atados de pies y manos en el tema financiero por las estrictas normas de LaLiga. Eso es bueno, pero también muy, muy peligroso. Porque la competición se va devaluando poco a poco en cuanto a la llegada de jugadores que mejoren la competición", comenta uno de los directores deportivos del campeonato.
Los representantes también se quejan de esto, denunciando que es "demasiado apretado" y que, si bien ha funcionado para subsanar la deuda de los clubes, dar algo de margen podría potenciar el mercado. Otros son más drásticos y no entienden por qué no dejan a los dueños de los equipos "invertir con libertad" como sucede en otras competiciones. "Vamos a tener los mejores estadios del mundo, pero van a estar vacíos porque no dejan gastar en fichajes", dice un representante en un golpe directo a CVC.
También hay quien prefiere verlo con positivismo. Federico Marco, de Wasserman, cree que el control financiero da "seriedad" al funcionamiento del mercado. "Esta situación nos ha obligado a adaptarnos. A buscar opciones en nuevos mercados o a trabajar anticipándonos a posibles movimientos de cara al verano", añade.
Gelu Rodríguez, el representante que ha conseguido cerrar cinco operaciones en Italia (Diego Llorente a la Roma), Grecia (Sergi Canós a Olympiacos) y España (Meré al Cádiz, César Montes y Gragera al Espanyol) ha sufrido menos esta crisis aunque tiene claro cómo está el mercado: "La rigidez que tiene el Fair Play financiero está reflejada en lo que hemos visto. Todavía hay secuelas económicas de la pandemia y otras ligas han tenido una mayor capacidad de recuperación con este tema. Sólo toca mejorar en los mercados".
Sin embargo, sí rescatan un punto positivo dentro del mal ambiente que se respira: la revalorización de los jóvenes. "Dentro de poco habrá mucho más movimiento de talento nacional a otras ligas y eso se va a notar. Deberíamos ver una revitalización ya en el próximo mercado y, a partir de ahí, ya despegar. La gente joven que está entrando va a crecer porque tienen mucho nivel y, cuando entra dinero, entran los flujos y se nota. Además de que los grandes mueven el mercado y las operaciones de estos están saliendo hacia fuera", anticipan.
Cansados del 'deadline day'
Si hay un momento que contribuye a que el mercado sea más mediático incluso que el propio fútbol ese es el deadline day. Para el aficionado es una montaña rusa de emociones que lo mantiene en tensión constante, algo que también le sucede a directivos y agentes, aunque ellos los sufren más que disfrutarlo. "Se ha convertido en un mercadillo en el que en cualquier operación se quieren racanear unos céntimos", expresa un representante, descontento con la forma de actuar de algunos en el último día del mercado.
"Muchos equipos manejan los tiempos para intentar sacar las mejores condiciones y eso te aboca a la hora límite. Forma parte del formato, más que del show. La peor parte de esto es el sufrimiento que tiene el jugador por desconocer cuál será su futuro a 24 horas del cierre. No saben y entiendo que eso desestabiliza emocionalmente mucho", dice Gelu Rodríguez, defendiendo que la posición del jugador es la más complicada.
Y, ¿cuáles son las vistas a futuro? La sensación general es que la mejoría se empezará a notar a partir del próximo verano, pero desde la resignación: "es difícil que la cosa vaya a peor". Antonio Barrera, histórico agente sevillano, prevé que la recuperación real dure varios años ya que las secuelas de la pandemia han sido demasiado profundas. Álvaro Torres aboga por estudiar qué está sucediendo y encontrar soluciones lo antes posible. Por último, Marc Menchén, periodista especializado en la industria del deporte, deja una reflexión: "Tras el cierre de mercado, se confirma. A todos os gusta más el juego de la Premier League, os gusta más que puedan fichar a mansalva, pero no os gustan los Peter Lim. Y sin los Peter Lim de la vida y la gasolina que meten, no habría Premier a ese nivel". En verano se verá si hay mejora...