PREMIER LEAGUE

La tradición de las burbujas del West Ham proviene de un cuadro

El club adoptó la costumbre de lanzar pompas de jabón al campo por el parecido de un joven jugador al niño que figuraba en la pintura 'Bubbles'.

El ambiente de burbujas creado en la previa de un partido del West Ham./GETTY
El ambiente de burbujas creado en la previa de un partido del West Ham. GETTY
Jonás Pérez

Jonás Pérez

La Premier League es una competición de tradiciones y una de las más llamativas es la de las burbujas en el Olímpico de Londres, cada vez que el West Ham compite como local. Este domingo, el líder Arsenal visitaba su estadio y, una vez más, fueron recibidos entre un océano de pompas de jabón. Su explicación, como toda explicación, tiene dos caminos. La búsqueda rápida no engaña, pero tampoco llena. A finales de la década de 1920, los aficionados 'hammers' se apropiaron de la canción 'I'm Forever Blowing Bubbles' ('yo siempre estoy soplando burbujas'), prácticamente un himno en las butacas. Todo por el parecido de un joven jugador... con el niño que figuraba en un cuadro.

El tema salió a la luz unos años antes, en 1918. Se hizo popular en un musical de Broadway y no tenía relación aparente con el fútbol. ¿Entonces?, ¿qué pasó para que una década después la afición del West Ham comenzara a cantarlo a pleno pulmón? En aquel momento, la difusión musical no era como en la actualidad, donde es habitual ver la transformación de grandes canciones en cánticos en los estadios. Que se lo digan a Bizarrap y Quevedo.

Un niño sopla burbujas en la previa de un partido del West Ham. GETTY
Un niño sopla burbujas en la previa de un partido del West Ham. GETTY

En la época, la canción debía reservar una relación estrecha con el equipo para que se convirtiera en tradición en el campo. En este caso 'I'm Forever Blowing Bubbles', como tal, no guardaba ningún vínculo con el club. Más bien, era la palabra 'Bubbles' la que escondía el origen de esta historia.

Jhon Everett Millais pintó 'Bubbles', un cuadro en el que aparecía un niño con un popero observando una burbuja que acaba él mismo de crear. Esa obra de arte era utilizada por una popular compañía de jabones, lo que favorecía su difusión entre el público inglés.

La tradición de las burbujas del estadio del West Ham. GETTY
La tradición de las burbujas del estadio del West Ham. GETTY

Bill 'Bubbles' Murray

El caso es que Bill Murray, jugador que militaba en los equipos juveniles de la ciudad en la década de los 20, guardaba un parecido más que razonable con el niño que aparecía en el cuadro. La canción fue presentada por el entrenador Charlie Paynter y su amigo Cornelius Beal la entonaba cuando el equipo era capaz de enlazar jugadas de nivel.

Este último apenas guardaba relación con los jugadores del West Ham y conocía a algún futbolista a través de las categorías inferiores, como era el caso de Bill Murray. Fruto de la coincidencia, simplemente, aquel apodo, poco a poco fue calando entre la hinchada para crear una gran historia a su alrededor.

Haaland, rodeado de burbujas. GETTY
Haaland, rodeado de burbujas. GETTY

Con el paso del tiempo, la tradición fue difundida entre los seguidores del club, que comenzaron a considerarla su himno ya en la década de los 40. Y de la mano de la canción, se popularizó el hecho de formar burbujas en el cielo para recibir a sus jugadores.

El cuadro Bubbles.
El cuadro Bubbles.

Tanto es así que en 1999, el West Ham planificó batir el récord mundial de personas formando burbujas al mismo tiempo. Y lo logró, con cerca de 24.000 aficionados participando de la historia. Concretamente, 23.680 en Boleyn Ground, antiguo estadio de la entidad. Con o sin registros, crear una atmósfera plagada de burbujas de jabón es una de las grandes tradiciones del fútbol inglés, un oasis de nostalgia que mantiene al fútbol como el deporte que a tanta gente ha hermanado ha unido a lo largo de los años.