El Nàstic enloquece tras un gol anulado a su portero: "Putos sinvergüenzas"

El portero del Nàstic de Tarragona Manu García no daba crédito ante lo que acababa de suceder sobre el césped del Estadio Balear. "Me ha dado en la puta cara. No puede ser. Es que ha sido en la puta cara", gritó descontrolado el futbolista al árbitro del Atlético Baleares - Nàstic de Tarragona de Primera RFEF. Su enfado venía motivado por la decisión del colegiado que, en el minuto 96, le había anulado el gol que suponía el tanto del empate por una presunta mano. Las imágenes, que no son del todo claras, dejan la sensación de que, efectivamente, el balón impacta en el rostro del guardameta y no en su extremidad. El lío estaba servido y más aún cuando Monter Solans expulsó al jugador con una roja directa.

Manu García subió a rematar a la desesperada en busca del empate. Varios centros desde tres cuartos no llegaron a conectar con ningún futbolista visitante. Pero sobre la bocina, un rebote en el interior del área acabó impactando en el cuerpo del portero y llegó al fondo de la red. Para él y sus compañeros, el esférico golpeó únicamente en la cara. Para el colegiado, también en el brazo. Una jugada rápida que, sin VAR, costó al Nàstic un punto valioso en persecución de sus objetivos.

Tras entrar la pelota, el protagonista corrió a festejar el tanto a la banda y, al ver que el colegiado lo había anulado, se señaló la cara en varias ocasiones y sus compañeros se llevaron las manos a la cabeza por la que consideraron una decisión injusta. Entonces, el guardameta enfureció y se dirigió esprintando hacia la posición de Monter Solans para discutirlo. Se echó al suelo, desesperado y gritó a escasos centímetros del árbitro su postura.

Los jugadores del Baleares se enfrentaron al portero, que tuvo que ser sujetado por sus compañeros para evitar males mayores. Al ver la roja, de nuevo, fue acompañado por miembros del banquillo rumbo a los vestuarios, entre aspavientos y quejas.

Tras el final del partido que acabaría llevándose el Atlético Baleares por dos goles a uno, los jugadores del Nàstic no encontraban explicación ante lo que acaba de suceder en el césped. "El vestuario está rabioso y destrozado. Nos han sacado unos puntos valiosos que se han ganado sobre el verde", señaló el entrenador del cuadro catalán, Dani Vidal quien, minutos antes, tuvo que actuar para evitar un enfado mayor sobre el terreno de juego. "Me sentía igual que los jugadores, pero nos tenemos que sobreponer a la situación para evitar perjudicar más al equipo. El club se juega muchísimo y es normal que reaccionen así ante las injusticias", cuenta.

"No voy a hablar de dos acciones que han sido totalmente determinantes, ya lo hemos visto todos", apuntó, en la misma línea que su técnico el defensa Alex Quintanilla.

Además de las declaraciones del portero del Nàstic, el árbitro del encuentro añadió dos incidencias más en el acta del choque. Una dirigida a uno de los ayudantes de Dani Vidal y otra al Delegado Audiovisual del cuadro catalán.

"Técnico (Manuel Oliva García). Una vez finalizado el encuentro, ya en el túnel de vestuarios se dirigió a mi Asistente nº2 en tono en amenazante y agresivo en los siguientes términos: 'Sois unos putos sinvergüenzas, no tenéis ningún tipo de vergüenza, os habéis cargado el partido, nos estamos jugando mucho". 

Otras incidencias: "Una vez finalizado el encuentro, ya en el túnel de vestuarios, D. Adrián Batiste Cuartero, identificado como Delegado Audiovisual del Gimnàstic de Tarragona SAD, se dirigió hacia nosotros pegando puñetazos en la pared en los siguientes términos: 'Sois unos sinvergüenzas, todo el puto año igual, nos estamos jugando mucho, sinvergüenzas".

Con esta derrota el Nàstic es 11º clasificado, a cinco puntos de los puestos de descenso que marca La Nucía. Dani Vidal cierra una tarde para olvidar: "El vestuario está triste y jodido. Los chicos desde hace ya hace muchas semanas se lo están dejando todo y más. Al final cuando hay cosas que no dependen de ti y te vas con las manos vacías pues te duele. Ahora tenemos que transformar esa energía en rabia".