ELDENSE 3 - RM CASTILLA 3 (4-4)

Un épico Eldense deja al Castilla sin ascenso a Segunda

El equipo de Raúl llegó a ir dos goles por delante y también rozó el ascenso en la prórroga. Ortuño devuelve a los suyos al fútbol profesional 60 años después.

El Eldense celebra el ascenso./Eldense
El Eldense celebra el ascenso. Eldense
Jorge C. Picón

Jorge C. Picón

Con épica y sufrimiento, como se deben conseguir estas cosas. Así ascendió el Eldense a la segunda categoría del fútbol español. Una remontada de puro corazón ante un combativo Real Madrid Castilla, que cuando mejor estaba, se vino abajo. El peso de la experiencia y de los goles no marcados. Elda vuelve a Segunda División 60 años después, mientras que el filial blanco deberá esperar, por lo menos, un año más, y ya van diez...

Momento del pitido final en el que el banquillo y la afición del Eldense celebra el ascenso a Segunda división.JORGE C. PICÓN

Al Madrid le esperaba un infierno. No tanto por la afición rival, animosa pero no asfixiante, sino por el calor. Se alcanzaron los 35º grados antes del comienzo del partido. Los cientos de eldenses que se dieron cita en la Plaza Ficia desde las 16:00 de la tarde se derritieron antes de llegar al estadio. Precisamente, delante del hotel donde se hospedaba el Castilla. Sobrevivieron a base de agua, refrescos, cerveza y algún cubata. Y de cánticos y pitos hacia cualquier miembro de la delegación blanca que se asomaba por una ventana o que se acercaba al autobús. Querían calentar aún más el ambiente.

El Eldense celebra su ascenso en sala de prensa.JORGE C. PICÓN

Por el calor o los nervios, los jugadores del Eldense salieron al campo anonadados. Uno de los equipos más fiables de la Primera Federación se deshacía ante un Castilla que era un bloque de acero en defensa y punzante en ataque. "Estos no se enteran", se escuchaba en la grada de sus propios jugadores. El primer golpe llegó en el ecuador de la primera parte, con un cabezazo de Rafa Marín. Curioso marcar en la final por el ascenso de la forma en la que más daño te han hecho esta temporada. El segundo, con un disparo de Dotor tras jugadón de Obrador y dejada de Álvaro. La celebración con la grada, al borde de la valla, tan emotiva como peligrosa. Esta vez, sí aguantó.

No había signo que presagiasen la remontada. Pero los entrenadores siempre avisan: atentos a los últimos minutos de la primera parte, que los goles valen doble. Uno de Manu Nieto hizo que, por primera vez, temblasen las piernas castillistas. Todo sumado a la lesión de Obrador, que estaba siendo de los mejores. Se metieron en el vestuario con 1-2 en el marcador, pero con esa sensación tan de jugador de no saber muy bien qué ha sucedido. No es lo mismo sufrir con uno que con dos goles de ventaja...

El Eldense celebra el ascenso.JORGE C. PICÓN

Comenzó la reacción de un Eldense que no necesitó creer demasiado en el ascenso para llevárselo. Los de Fernando Estévez volvieron a su ser y recuperaron el punch. Desde el primer momento del segundo acto desactivaron al Madrid. Desbordes por banda, balones interiores y una presión adelantada que no permitió salir a los visitantes de su campo hasta el segundo gol, el de Carlos Hernández, que ya valía para volver a Segunda.

Desde entonces, todo se reinició. Partido nuevo en el que el Castilla se dio cuenta que necesitaba un gol por lo civil o lo criminal que les pusiese por delante. Tenían tiempo, el empate forzaba la prórroga, pero las piernas después de 11 meses de temporada hubiesen agradecido que llegasen en los 90 reglamentarios. Y ese resultado al final de los 120 les condenaba a un año más en la misma división.

La tensión del momento llevó a las hostilidades: sonó algún insulto de más en la grada o incluso algunos quedaron para después (no parecía que fuese para tomar algo). Lo más suave, llamarle chaquetero a Iker Bravo, que calentaba en la banda: "¡Que tú eres del Barça!". La afición del Real Madrid (unos 300 de los 4.089 que acudieron al estadio), que veían el partido al lado de la improvisada tribuna de prensa, no cabían en su asiento de los nervios. El culo inquieto, hasta el punto de no querer mirar. Entre ellos, familiares y amigos de algunos jugadores. La afición alicantina también lo sufría, pero eran más y se notaba menos.

El Eldense celebra el ascenso.JORGE C. PICÓN

La prórroga, a la que se llegó gracias a una mano salvadora de Luis López en el último momento, se dirimió por impulsos. Los más peligrosos, los del Castilla, que con Aranda encontró un filón ofensivo. La tensión, en los 30 últimos minutos, se posó sobre los hombros del Eldense, que resistió como gato panza arriba en búsqueda de una contra con la que sentenciar.

De tanto esperar (y de tanto cruzarse con Luis López) llegó el penalti sobre Arribas. No podía ser otro. La estrella blanca volvía al once después de lesión y Raúl no quiso cambiarlo. Por algo sería. Gol al borde del final para soñar, una vez más, con el ascenso. Pero en mal endémico de este filial, cuando más cerca lo tienen, antes se caen. Ortuño, cuando más lo necesitaba su equipo, destrozó las ilusiones del Madrid y puso el 3-3 en el marcador.

El Eldense celebra el ascenso.JORGE C. PICÓN

Pitido final y comenzó la fiesta, invasión de campo incluida. Tampoco puede faltar en un ascenso a Segunda División. La Comunidad Valenciana recupera a un mítico para el fútbol profesional, mientras que el Castilla, digno aspirante, se ahogó en la orilla del playoff. Curioso que el único momento que flojeó en los cuatro partidos fue con el marcador favorable. Elda está de vuelta.