Rafa Márquez vuelve a meter al Barça Atlètic en el playoff, pero su futuro no está claro tras esclarecerse el de Xavi

El Barça Atlètic ya es equipo de playoff. Por segunda temporada consecutiva, Rafa Márquez ha logrado llevar al filial blaugrana al penúltimo escalón antes del ascenso a la Segunda División. Y todavía tienen opciones de lograr un billete directo a la categoría de plata. Todo pasa porque el próximo sábado, los de Márquez logren asaltar Riazor, aun con todo el relato a favor de la promoción del Deportivo, ahora mismo cuatro puntos por encima con tres partidos por jugarse.

Con el sueño del ascenso intacto, en Can Barça no pueden asegurar que Márquez vaya a continuar como entrenador del filial el próximo curso. El mexicano termina contrato el 30 de junio y, como ya contamos en Relevo, contemplaba varias opciones. El que fue central del primer equipo empezaba a sentir que la Primera Federación se le quedaba pequeña, que estaba listo para dar el salto. Una hipotética promoción cambiaría el escenario. También el de muchas de sus piezas.

Márquez siempre ha tenido un ojo puesto en la situación del banquillo del primer equipo. Se precipitó y no escondió sus ganas de ponerse al frente en caso de que Xavi no continuara, declaraciones que molestaron en la planta noble del club. Luego sucedió el incómodo capítulo de la promoción de casas de apuestas. El entrenador catalán seguirá el próximo curso, algo en lo que en todo momento confió Laporta y miembros de la junta como Rafa Yuste. La renovación de Márquez, de un hombre que conoce el club, va cultivándose y logra buenos resultados, se augura clave para seguir manteniéndole como comodín.

La lógica apunta a que Laporta intentará retener a Márquez, aparte de los buenos resultados del filial, por conservarlo como comodín en caso de que el proyecto de Xavi naufrague. Un cambio de categoría, todavía con el primer puesto abierto, y, si no, con un feroz playoff por delante, sería una variante distinta. Ascender una categoría, a nivel formativo y competitivo, supondría un plus para Márquez. También para los jugadores. Para unos, como Marc Casadó -que tiene pendiente valorar opciones de futuro- o Aleix Garrido, porque les queda pequeña la Primera Federación. Para otros, como Marc Bernal o Noah Darvich, porque a nivel formativo darían un salto.

El Barça Atlètic encara el tramo final de curso en un momento espectacular: ha perdido un partido de los últimos 15. Y eso que no ha sido fácil. Ha ido dependiendo de las listas del primer equipo para confeccionar sus convocatorias (con muchos futbolistas doblando los fines de semana), ha tenido un problema crónico en el lateral derecho (con Casadó y Moha reubicados) y los fichajes -que fueron bastantes, con el pichichi Pau Víctor a la cabeza- han rendido a la perfección. Además, muy cerca está el regreso de Ángel Alarcón, que apuntaba a ser una pieza importante esta campaña.