ELECCIONES RFEF

El 'Rochismo' se divide en dos en la RFEF: la secretaría general aprieta al CSD y Louzán se une a la carrera presidencial

Los tiempos de la convocatoria de elecciones serán clave para los candidatos a la carrera presidencial.

Rafael Louzán, presidente de la federación gallega de fútbol y vicepresidente de la RFEF. /FUTGAL
Rafael Louzán, presidente de la federación gallega de fútbol y vicepresidente de la RFEF. FUTGAL
Natalia Torrente

Natalia Torrente

La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) está inmersa en un largo período de inestabilidad tras la dimisión de Luis Rubiales hace algo más de un año. Después de meses de dilatación de unas elecciones que debieron convocarse en el último trimestre de 2023, una resolución del entonces presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), Víctor Francos, y la correspondiente redacción de la Orden Ministerial firmada por Pilar Alegría en enero de 2024, aplazaron para el año actual los comicios que decidirían un nuevo presidente.

Finalmente la RFEF convocó lo que debía haber hecho seis meses atrás: elecciones para escoger únicamente presidente para el tiempo que quedaba del actual ciclo olímpico -tal y como señalaban los estatutos federativos y el texto ministerial-, con la intención de convocar los comicios completos después de los Juegos de París para renovar todos los órganos de representación: Comisión Delegada, Asamblea General y un nuevo presidente para los próximos cuatro años. Pero a Pedro Rocha, presidente electo en abril, le duró poco el cargo al ser inhabilitado tres meses después precisamente por las decisiones tomadas al frente de la Comisión Gestora, que no tenía otro cometido que la convocatoria de unas elecciones que aplazó hasta abril de 2024.

Tras un intento fallido de convocar, de nuevo, dobles elecciones, impugnadas por Miguel Ángel Galán, presidente de la Asociación Transparencia y Democracia en el Deporte y anuladas finalmente por el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD), la RFEF actualmente está liderada de forma interina por María Ángeles García Chaves, conocida como 'Yaye', sigue sin presidente electo, y la incertidumbre institucional es cada vez mayor.

Ante esta situación, el equipo de confianza de Pedro Rocha, que se encuentra en Extremadura al frente de sus negocios mientras se deshace el entuerto, se ha dividido en dos estrategias absolutamente diferentes para las que los tiempos del proceso son determinantes. La secretaría general, con Álvaro de Miguel al frente, aspira a convocar las elecciones lo antes posible para que Pedro Rocha pueda pedir una nueva cautelar y haya presidente electo pronto. Por otro lado, uno de los principales valedores del extremeño, Rafael Louzán, pieza clave en el acercamiento con Javier Tebas, presidente de LaLiga, se plantea sumarse a la carrera presidencial en caso de que Rocha no obtuviera una nueva cautelar, aunque para ello necesitaría más tiempo. Vayamos paso a paso.

Pedro Rocha, pendiente de la convocatoria de elecciones para solicitar una nueva cautelar

Tras su inhabilitación, Rocha solicitó la medida cautelar al juzgado central de lo contencioso-administrativo de Madrid, que se la denegó a inicios del pasado mes de septiembre. Pero el juez le daba la clave en el propio escrito: como las elecciones a la RFEF aún no se han convocado, el perjuicio que podría ocasionar su inhabilitación en ese caso no se podía valorar y, por tanto, se rechazaba la medida cautelar. Pero, ¿qué ocurriría si se convocaran las elecciones? Que las circunstancias cambian y por tanto Rocha podría solicitar de nuevo una nueva medida cautelar al Juzgado Central de lo contencioso-administrativo.

Pedro Rocha.  RFEF
Pedro Rocha. RFEF

Ahora, el extremeño espera la convocatoria de las elecciones para poder dar el primer paso: pedir esa segunda medida cautelar dado que las circunstancias que alegó han cambiado. Con las elecciones en marcha, el juez podría concederle, ahora sí, la cautelar al considerar un perjuicio irreparable si el litigio finalizara con una sentencia a su favor, es decir, si dictaminara una resolución contraria a la del TAD.

La secretaría general: unas elecciones inmediatas

Según señalan fuentes del máximo organismo del fútbol español a Relevo, abrumados por los recursos e impugnaciones del mencionado Galán, con la correspondiente demora del tiempo que ello supone, desde la RFEF ya no saben cuál es el camino correcto a seguir. Por ello, la secretaría general, con Álvaro de Miguel al frente, ha consultado en varias ocasiones al CSD para conocer, ya en esta tesitura, qué decisiones deben tomar.

Pero como era de esperar, no han tenido respuesta. Las tensiones con el Gobierno durante el pasado verano por la representación en los palcos de la Eurocopa, el ninguneo a la incompetente 'Comisión' de Del Bosque y una posible prevaricación si el CSD se excediera de sus funciones han dejado a la institución sin el asesoramiento que, ahora sí, reclamaba para evitar el embrollo administrativo y una nueva denuncia de Galán.

Álvaro de Miguel, secretario general de la RFEF, durante un partido de los pasados Juegos Olímpicos.  RFEF
Álvaro de Miguel, secretario general de la RFEF, durante un partido de los pasados Juegos Olímpicos. RFEF

Aquello desembocó en una decisión sin precedentes: acudieron a FIFA, a través de su responsable legal Emilio García Silvero, para que junto a UEFA, convocaran una reunión en el CSD para pedir explicaciones y exigir un nuevo presidente, sea quien sea y como sea, antes de 2025. Varios emisarios llegaron a Madrid e intercambiaron su preocupación con el Director General de Deportes, Fernando Molinero, el pasado 2 de octubre. Como siempre, de fondo la alargada sombra de que los equipos españoles puedan ser expulsados de las competiciones europeas y el riesgo de no celebrar en España el Mundial 2030, aunque todo el mundo sabe que ninguna de las dos cosas ocurrirán.

El movimiento en el tablero de ajedrez había sido efectivo. El propio García Silvero dio la cara al salir de la reunión para desbloquear la situación federativa y el CSD tomó nota. Sin embargo, un posible conflicto de intereses está de nuevo sobre la mesa. El actual jefe legal de FIFA es hermano de Miguel Ángel García Silvero, uno de los imputados en la 'Operación Brodie'. El movimiento de su hermano para desbloquear con tanto ímpetu la situación federativa, después de que la Comisión Gestora con Pedro Rocha al frente no convocara debidamente los comicios en septiembre de 2023, resulta para muchos cuanto menos sospechoso. Más cuando desde el entorno federativo siempre han defendido el buen hacer de Miguel Ángel a pesar de estar investigado por la justicia.

Más allá de la estrategia, desde la secretaría general son conscientes de que van a contrarreloj para cumplir el mandato de la Orden Ministerial. Por ello, han convocado este viernes con carácter de urgencia a la Comisión Delegada para poder modificar el calendario electoral, poder celebrarlas en 2025, y no incumplir su propio reglamento. Después de la aprobación de los 10 vocales de la comisión, la RFEF enviaría el nuevo reglamento al CSD, que pediría el correspondiente informe al TAD para proceder a aprobarlo o no en su Comisión Directiva. De lo contrario, según apuntan en la propuesta, mantener la actual redacción que obliga a la convocatoria de elecciones en 2024, conllevaría el incumplimiento de otras disposiciones del Reglamento para poder ajustar el calendario electoral, reduciendo plazos de recurso.

Por su parte, Miguel Ángel Galán considera que el intento de ampliar el calendario sólo responde a intereses particulares de Pedro Rocha. Según su interpretación jurídica, al haber sido nombrado en 2024 presidente electo -aunque sólo pudo ejercer durante tres meses porque fue inhabilitado-, le impide presentarse en el mismo ciclo olímpico a unas nuevas elecciones, según los estatutos de la RFEF. Otros, en cambio, consideran que el ciclo olímpico corresponde al cargo presidencial que fuera a ejercer y no al momento de celebración de los comicios.

Louzán se suma a la carrera presidencial a la espera de su sentencia del Tribunal Supremo

Según las mencionadas fuentes, el presidente de la federación gallega de fútbol, Rafa Louzán, ya piensa en presentarse a las elecciones en caso de que Rocha salga definitivamente de la partida de ajedrez si el juez denegara su segunda cautelar. A pesar de que, de momento, no ha levantado la mano para liderar la RFEF. No lo hizo tampoco cuando dimitió 'Yaye' para presentarse a las elecciones frustradas que dejó finalmente a Joan Soteras al frente de la Gestora, ante la mirada recelosa de otros barones y el propio Álvaro de Miguel, que también se ofreció. Ni se postuló como candidato a presidente para unas semanas porque aquello le dejaría sin el trono del fútbol gallego.

Con la incertidumbre actual y ante la necesidad de elegir qué barón toma las riendas en caso de que Rocha no pueda presentarse, Louzán ya ve con otros ojos la posibilidad de postularse como candidato a las elecciones cuando finalmente la RFEF consiga convocarlas. Sin embargo, la premura no juega a su favor. Necesita tiempo para que prospere su recurso al Tribunal Supremo tras la sentencia de la Audiencia Provincial de Pontevedra que le inhabilitaría durante los próximos siete años para ejercer cualquier empleo y cargo púbico por un delito de prevaricación.

Rafael Louzán, presidente de la federación gallega de fútbol, en un acto con Luis de la Fuente.  Futgal
Rafael Louzán, presidente de la federación gallega de fútbol, en un acto con Luis de la Fuente. Futgal

Hay remontarse a 2011 cuando Louzán, al frente de la Diputación de Pontevedra, adjudicó a una empresa la subvención de 86.311 euros para la mejora del campo de fútbol de Moraña. En febrero de 2021, el Juzgado de lo Penal nº 3 de Pontevedra condenó a Louzán a dos años de cárcel y ocho de inhabilitación por los delitos de prevaricación y fraude. Sin embargo, un año después, la Audiencia Provincial de Pontevedra absolvió al expresidente de la Diputación de Pontevedra del delito de fraude por el que había sido condenado en febrero del 2021, pero confirmó la pena de siete años de inhabilitación para empleo o cargo público. Tras la ratificación del tribunal, a Louzán sólo le quedaba recurrir al Tribunal Supremo para no tener que abandonar la federación gallega.

Hasta ahora, era su único objetivo. Pero la incertidumbre de la RFEF y la confianza que tiene en que su recurso progrese, le han llevado a plantearse dejar la presidencia del fútbol gallego para liderar el fútbol español. De la posibilidad de ser condenado a siete años de inhabilitación y tener que abandonar la federación gallega a presidir el máximo organismo del fútbol nacional. Para ello, necesita que la convocatoria de las elecciones se dilate para que, en caso de que el Tribunal Supremo resolviera el recurso a su favor, llegara a tiempo de sumarse a la carrera presidencial.

Toca volver a esperar. Primero, que decida el próximo viernes la Comisión Delegada sobre el reglamento electoral con la ampliación del calendario. Después, que el CSD lo apruebe y se convoquen finalmente elecciones. Con los comicios en marcha, Rocha pedirá la cautelar y si no se la conceden, volverá el 'Juego de Tronos' a una Federación en la que todos aspiran a mantenerse y ampliar su poder, pero pocos miran por la estabilidad y prosperidad de una institución que liderará el Mundial de Fútbol 2030. Quizás el riesgo no está en si FIFA da un paso atrás, sino en que el máximo organismo del fútbol español pueda estar en las manos adecuadas y no en la de aquellos que no hacen más que manosearlo.