Maignan carga duramente contra aficionados, instituciones y el Udinese: "Son cómplices"

Mike Maignan sufrió un lamentable episodio racista desde la grada del Udinese que le llevó a retirarse del campo. Cinco minutos más tarde, sus compañeros le convencieron de regresar y el partido continuó con total normalidad. Sin embargo, el nuevo incidente ha conmocionado a Italia y el guardameta ha querido mandar un contundente mensaje: "Oí los ruidos del mono y no dije nada. (...) Son ignorantes, deben quedarse en casa".

El guardameta habló en los micrófonos de Sky Sports tras la conclusión del duelo: "En el primer tiempo, cuando iba a meter el balón detrás de la portería, oí los ruidos del mono y no dije nada. Luego lo hicieron otra vez. Llamé al cuarto árbitro y le expliqué lo que había sucedido. No es la primera vez, tenemos que enviar un mensaje importante, una señal".

Y pide una mayor intervención: "En este momento no quiero hablar con la gente que hizo esto, no sirve de nada. Para ayudar a todos los jugadores que sufren lo que yo he sufrido necesitamos un castigo. Son ignorantes, deben quedarse en casa. Los verdaderos aficionados vienen al estadio a animar. Estas cosas no pueden pasar en el fútbol".

Maignan se marchó del césped y fueron los compañeros los que le hicieron regresar: "No quería volver, el nuestro es un gran club y tenemos un gran grupo. Todos vinieron a por mí y luego salimos al campo a ganar el partido. La respuesta correcta fue conseguir los tres puntos. Ahora mismo no miro la clasificación, avanzamos partido a partido".

Hoy, tan solo unas horas después de este desagradable incidente, el portero quiso compartir un contundente mensaje en sus redes sociales en el que que no solo carga contra los autores de los insultos, sino también contra el resto de aficionados presentes en las gradas o el Udinese. El comunicado íntegro, a continuación:

No fue al jugador a quien se atacó, sino al hombre. Al padre de familia. No es la primera vez que me pasa y no soy la primera persona a la que le ocurre. Emitimos comunicados de prensa, campañas publicitarias, protocolos y nada ha cambiado.

Hoy, todo un sistema debe asumir la responsabilidad:

- Los autores de estos actos, porque es fácil actuar en grupo en el anonimato de una grada.

- Los espectadores que estaban en la tribuna, vieron todo, oyeron todo y optaron por permanecer en silencio. Ellos son cómplices.

- El Udinese, que solo habló de interrumpir el partido como si no hubiera pasado nada, es cómplice.

- Si las autoridades y el fiscal no hacen nada con todo lo que está pasando TAMBIÉN SERÁN CÓMPLICES.

Ya lo he dicho y vale la pena repetirlo: no soy una VÍCTIMA. Quiero dar las gracias a mi club el AC Milan, a mis compañeros, al árbitro, a los jugadores de la Udinese y a todos los que me enviaron mensajes, me llamaron, me apoyaron en privado y también en público. No puedo responder a todos pero os veo y estamos JUNTOS.

Es una lucha difícil que requerirá tiempo y coraje. Pero es una pelea que ganaremos.

Gravina, Udinese, Milan o Inter se han sumado a las enérgicas condenas que todo el mundo del fútbol vierte sobre lo ocurrido en Italia. Sin embargo, queda mucho por mejorar. Cuando a Balotelli le sucedió en Verona, el partido continuó como si nada hubiera ocurrido. También a Kessié, repitiendo exactamente el mismo procedimiento. Queda una respuesta tajante, ya sea de un equipo, del árbitro o de las autoridades para poner fin a esta lacra. Este sábado, le tocó sufrirlo a Maignan. Lamentablemente, apunta a que no será la última vez.