Una tarde con Julen Jon Guerrero en la Roma: su padre en la grada y Mourinho "encantado de hacerle debutar"
Relevo asiste al choque sub-19 entre la Roma y el Milan. Allí estuvieron Jose Mourinho y Julen Guerrero, que no perdió detalle de su hijo.
La ciudad deportiva de Trigoria amaneció este fin de semana mojada por la lluvia. No fue óbice para la importante afluencia de gente que acudió a ver a la escuadra Primavera de la Roma, que recibía al líder: el imbatible Milan, dirigido por el exrossonero Ignazio Abate. El 0-0 definitivo supo mucho mejor a los chicos de Federico Guidi, el técnico de la Roma B que relevó hace poco más de un año a Alberto De Rossi, padre del excapitán giallorosso.
En las gradas estaban Bernardo Corradi (ex del Valencia, actual seleccionador sub-19) y Julen Guerrero, quien atendió en exclusiva a Relevo para departir sobre las primeras sensaciones de su hijo en la Ciudad Eterna. "Le veo bien. Lleva unos días entrenándose con el primer equipo. El otro día me dijo que Mourinho ha estado hablando con él, y que le confesó estar contento con su evolución. Dice que está trabajando bien. Lo cierto es que mi hijo se encuentra a gusto, poco a poco integrándose. Lo de debutar con el primer equipo dependerá también de las bajas que pueda haber en su posición. Eso creo, porque yo con Mourinho no he hablado", explica el excapitán del Athletic de Bilbao.
Arribado en verano cedido por el Real Madrid (el último año jugó en el Amorebieta), la Roma se guarda una opción de compra por el joven talento vasco, una zurda prodigiosa que percute bien por la línea de tres cuartos y soporta -a la perfección- los casi 190 centímetros de altura que posee. "Es muy pronto para hablar de Julen Jon. Llegó hace dos meses… Y sí, es cierto que se ha entrenado algunos días con nosotros en el primer equipo, pero no sistemáticamente", aclaró Jose Mourinho en la rueda de prensa previa al partido de la Roma contra el Monza, donde no estará convocado el bilbaíno, quien jugó apenas los últimos diez minutos contra el Milan Primavera. Al parecer, por un golpe que sufrió en el tobillo durante el entrenamiento del viernes.
Sí estarán en el Olímpico algunos compañeros de Julen Jon Guerrero, como Niccoló Pisilli y Riccardo Pagano. Son dos de los últimos canteranos que el técnico de Setúbal ha escogido para apuntalar una plantilla mermada sensiblemente por las bajas (Dybala, Renato Sanches, Smalling…). "Soy un asiduo a los partidos que disputan nuestros canteranos. Me importan estos chicos, y también el hijo de Julen, por supuesto. Si se lo gana, será un placer hacerle debutar en la Roma. La puerta está abierta para todos, pero en su caso es pronto aún", afirma el padre de un vergel giallorosso que comenzó hace algo más de dos años, cuando aterrizó por vez primera en la capital.
Desde entonces, Volpato, Felix, Filippo Missori, Keramitsis, Faticanti, Tahirovic, Jordan Majchrzak o Francesco D'Alessio han sido algunos de los niños que han debutado en Serie A o incluso en Europa League. "Muchos de ellos ya no juegan con nosotros, desgraciadamente", concluye su gran mentor. El artífice de que hoy muchos sean la espina dorsal de escuadras punteras, como lo es Bove (vivero Roma) de la suya.
Ajustarse a la táctica
La importancia que otorga la Roma al talento virgen se ha visto en el partido de campeonato giovanile contra el Milan, donde han partido de inicio Lovro Golic, Renato Marin, Matteo Giuseppe Plaia y Mattia Mannini (ya convocado por Mou). Todos chavales nacidos en 2006, dos años más jóvenes que el capitán Luigi Cherubini -otro baby di JM- o el propio Julen. "Me gustan los jugadores refinados, con técnica cristalina. Y él lo es, pero necesita adaptarse a nuestro fútbol táctico y físico. Julen Jon puede jugar de ala diestra, pero también de mediapunta o de centrocampista con llegada que sabe conectar y sostener a la delantera. No es Dybala; es más Pellegrini, por poner un ejemplo". Las palabras son de Alessandro Paoli, miembro de comunicación de la Federación Italiana de Fútbol. Presente también en Trigoria, Paoli ve precisamente ahí el principal problema que podría tener el esteta de Bilbao en la capital italiana. "La Roma no juega con enganche. Apuesta por el 4-3-3 o incluso con dos delanteros. Son partidos, algunos, muy matemáticos. Mira el de hoy".
Está precisamente ahí la clave de todo. En la capacidad que tenga Julen júnior para readaptar su seda a las cadenas italianas. En mecanizar movimientos despojándoles de una cierta anarquía. En no ser Dybala y hacer caso omiso a las posibles comparaciones con su antecesor, a caballo entre España e Italia. Porque a Jon Guerrero le avala su humildad, una gran madurez y la destreza de su padre para alejarle de los focos. También un magnetismo con el gol y un importante bagaje con España Sub-18.
Cuando acabó el partido contra los de Abate, se quedó haciendo ejercicios físicos con otros compañeros. Parecía visiblemente dolorido. De hecho, en el esprint ralentizaba. Le costaba seguir el ritmo de los demás. "Dai, dai, dai", decía el cuerpo técnico.
- Julen, ¿qué tal de la lesión?
- Muy bien, tío.