ENTREVISTA

Siro López baja los brazos con la prensa por el 'caso Pedrerol': "Muchos compañeros han recibido llamadas"

El periodista gallego comparte sus vivencias en 47 años de profesión y el estado de sus relaciones con Florentino Pérez y Josep Pedrerol.

Siro López, en una charla./González Molero
Siro López, en una charla. González Molero
Cristina Bea

Cristina Bea

Siro López, periodista de sobra conocido, es últimamente reclamado por ser el azote de Ancelotti. Su carrera periodística habla por sí sola y su capacidad de reinventarse, también. Ahora la ejerce en Twitch, algo a lo que, aunque llama la atención por su experiencia, le quita mérito. "¿Cuál es? Si estoy haciendo lo mismo que he hecho durante casi 40 o 45 años, pero desde casa, que es ponerme delante de un micrófono y delante de una cámara y hablar y vender el pollino", asegura.

Dentro de su trayectoria, ha conocido a varios de los nombres de la esfera periodística-deportiva que más titulares han copado los últimos años. Florentino Pérez, José María García y Josep Pedrerol. En esta segunda parte de la entrevista nos cuenta, entre otras cosas, sus más y sus menos y en qué punto se encuentra su relación profesional-personal con ellos.

Dijiste, Siro, que te gustaría sentarte a comer o cenar con Ancelotti. ¿También con Florentino? Erais amigos, pero creo que la relación está algo distante, ¿no? O ¿en qué punto está?

(Sonríe) Un poquito más cercana. Hubo un momento que nos distanciamos mucho. Bueno, él se distanció de mí… Creo que voy a conseguir hablar con él de ese tema y ver qué es lo que yo hice mal, que seguramente algo hice mal para que él se distanciara, porque la realidad es que tampoco hemos hablado. Dejó de pronto de cogerme el teléfono y de contestarme a mensajes, intuyo por gente cercana a él y porque yo también me conozco a mis clásicos por dónde podían venir los tiros, pero la realidad es que estuvimos dos o tres años muy distantes, tanto que yo ya dejé de enviarle mensajes, incluso el día de su cumpleaños. Cuando no te contesta… Pero la verdad es que últimamente…

Coincide con la final de la Champions del año pasado, que yo le envío una felicitación y le agradezco un poco como madridista el haber conseguido lo que se ha conseguido, y al día siguiente o al cabo de dos días, porque eso Florentino sí que lo tiene, es una persona muy educada y que si tú le mandas un mensaje, si hay una relación normal, él te lo contesta al mismo momento o al día siguiente, o si le llamas y no te puede atender, te manda un mensaje, en eso siempre has sido muy atento. Entonces, con motivo de la final del año pasado, de Londres, le mandé un mensaje, después de medio año o un año que no teníamos un intercambio de mensajes, y me lo contestó.

Me lo contestó al cabo de, no sé, cuatro horas o de 48, es igual, cuando se puso a contestar mensajes, que imagino que recibió cientos o miles de mensajes ese día. Y a partir de ahí, después del verano, con algún motivo de alguna cosa, le envié otro, me contestó y últimamente, cuando le he mandado algún mensaje, pues ha habido un intercambio de mensajes y creo que estamos en el camino, no sé si de recuperar esa buenísima relación que habíamos tenido, pero por lo menos, oye. Porque me sabía mal.

Yo siempre he dicho lo mismo: no por que sea presidente del Real Madrid, yo le tengo aprecio y siempre he dicho que conmigo se ha portado muy bien. Que hemos tenido disparidad de opiniones y que no le ha gustado una opinión que yo tengo, pero que él la ha aceptado, y yo siempre he dicho que cuando lo he necesitado ha estado ahí y creo que eso lo tengo que valorar. Y me sabía mal por eso, no como presidente del Real Madrid y periodista, sino por una relación de amistad. Y me fastidiaba que por un malentendido, por algo que a lo mejor yo he hecho mal para él, pero que yo no he sido consciente, que se rompiera esa relación que tenemos desde hace más de 25 años.

¿Cómo se fraguó?

Yo lo había conocido en el 96, cuando se presentó (a presidente) la primera vez, o era el 95. Yo trabajaba todavía en Barcelona y vino a una presentación, al Hotel Calderón de Barcelona, y ahí me lo presentó Pepe Fuentes, que era un poco el representante del Madrid en Cataluña, la relación con las peñas y tal. Pero nada, no pasó de un esto que seguro ni Florentino se acuerda, yo sí me acuerdo. Pero entonces yo llego en el año 2000 a Telemadrid, dejo el Deportivo y vengo a Telemadrid de jefe de deportes. Yo llego un lunes y el Madrid jugaba el miércoles la final de París con el Valencia de la Champions, con Lorenzo Sanz, que acaba ganando el Madrid, y quince o veinte días después, o un mes, Lorenzo convoca las elecciones. Entonces, yo hago un debate. Lorenzo no quiere que haya un cara a cara, pero Telemadrid en aquel momento tenía mucha potencia, mucha audiencia. Entonces, les hago una entrevista individual a cada uno con las mismas preguntas a los dos. Ninguno sabe la respuesta del otro. Recuerdo que el primero fue Florentino, lo medio sorteé o algo así, y después fue Lorenzo Sanz, y ahí empezamos a hablar.

Él me agradeció que no me decantara por ninguno de los dos, porque es verdad que en aquel momento Lorenzo tenía muchos amigos en los medios de comunicación, porque como era Don Lorenzo, que todo el mundo lo quería, se hacía querer, pero yo quise tener una postura como muy equilibrada. Y eso siempre me lo agradeció, y a partir de ahí quedabas dos o tres veces al año para comer, me recuerdo también de comer con Jorge Valdano, con Emilio Butragueño. Bueno, también era por mi cargo, era jefe de deportes de Telemadrid, e igual que quedaba para comer con Miguel Ángel Gil o con Enrique Cerezo, con quien también tengo una muy buena amistad; Ángel Torres, también comíamos. Son amistades que vas fraguando a lo largo de tu carrera de periodista.

Siro López cuenta cómo Florentino Pérez le ayudó con unos problema6371869916112s de Hacienda. Relevo

Has dicho «Florentino siempre he estado ahí cuando le he necesitado». ¿En qué momentos le has necesitado? ¿Para qué?

Pues, mira, para temas personales. Yo, por ejemplo, tuve un problema con el tema de Hacienda y llegó un momento que se me cerraron todas las puertas y (sonríe) no es que Florentino me dejara dinero ni que yo le pidiera dinero, nada de esto, pero sí me ayudó e hizo gestiones para poder yo asumir el pago de esa deuda, porque se me había cerrado la posibilidad de que me dieran préstamos. A mí me gusta contar las cosas, como no tengo nada que esconder… Entonces, por ejemplo, yo para solucionar el tema de la deuda y poder pagarla, yo estaba trabajando en Real Madrid Televisión, porque yo les ofrecí hacer un programa semanal sobre el trabajo que hace la fundación, cuando dejé Punto Pelota, y ya habían empezado a hacerlo en Mediapro y tal y me dijeron: 'Oye, ¿pero por qué no nos narras el baloncesto? Que tú vienes de hacer el Mundial de baloncesto con Telecinco y el europeo, y nos haces un favor si narras el baloncesto de Real Madrid Televisión'.

Y entonces ahí empezamos la relación, y yo estuve y estoy trabajando todavía con Real Madrid Televisión en el tema del baloncesto. Y la solución al final que se encontró, y ahí intervino Florentino, -no sé si se me ocurrió a mí esa posibilidad, no me acuerdo cómo fue-, como yo cobraba de Mediapro, pues habló con Mediapro y lo que hicieron es adelantarme ese dinero y mes a mes, durante me parece que dos o tres años, me lo estuvieron descontando.

Eso es lo que yo digo, la relación de amistad con la gente y que en los momentos difíciles estén a tu lado, y por eso yo sólo puedo hablar bien del presi, porque cuando más lo he necesitado, yo eso no lo voy a olvidar. Y por eso me dolía, me fastidiaba que se sintiera traicionado por mí y que sintiera traicionada su amistad por algo que yo no hice conscientemente, porque yo siempre intento ser muy amigo de mis amigos, y a veces eso me ha llevado por caminos que no son los más adecuados…

¿Nos cuentas, Siro, qué es lo que os separó, lo que os distanció?

(Levanta los hombros). De pronto deja de coger el teléfono y a no responderme a mensajes. Yo al principio no le doy mucha importancia, pero como lo conozco y sé que si algo es, es muy atento y muy educado contestando a todo el mundo, pues al cabo de dos o tres meses o de dos o tres mensajes que no me contesta dije 'oye, aquí está pasando algo'. Haces tus indagaciones, piensas en algo que tú has hecho y desde cuándo cuando se produce, y creo que todo viene por una entrevista que le hago a José María García. En mi canal de Twitch empiezo a hacer una serie de entrevistas a periodistas y a gente de todo tipo, que se llama 'Gracias por venir', a Ibai Llanos…

Entrevisto a José María García y es la semana en la que se ha presentado la Superliga, que se genera mucha polémica, porque hay mucha gente, entre ellos yo, que consideran que no es el sitio adecuado para presentarla, que no estaba bien estructurada todavía la Superliga. Bueno, lo que pasó. Entonces, yo entrevisto a José María García, no para hablar de la Superliga, sino para hablar de su trayectoria en el mundo del periodismo, pero al final yo siempre soy periodista y me parecía que no era de buen periodista tener a José María García y no preguntarle qué le parece lo de las Superliga. Le pregunto por ello y le atiza a Florentino como si no hubiera un mañana.

"José María García, con sus fobias, es también un personaje que es muy amigo de sus amigos, pero muy enemigo de sus enemigos"

José María, con sus fobias, es también un personaje que es muy amigo de sus amigos, pero muy enemigo de sus enemigos. Entonces, sin razón de ser, como hace casi siempre que habla de Florentino, pues le da hasta en el carnet de identidad, y yo lo defiendo, porque además lo creo, no por amistad, porque yo puedo estar en desacuerdo con cosas que pueden hacer mis amigos y a lo mejor mirar para otro lado, pero sobre todo no miro para otro lado si creo que con un amigo mío se está cometiendo una injusticia, y yo le rebato a José María, que no tiene razón ninguna, que no puede decir esas cosas de Florentino Pérez porque no tiene razón. Pero, claro, yo creo que el mensaje que le llega es una frase que sacan en Marca, en AS, en todos los sitios. De la entrevista, lo único que sacan y lo entiendo es que dijo algo así como que Florentino es el mayor cáncer no del fútbol, dijo del deporte español de los últimos 40 años. Una barbaridad, que yo le digo 'estamos locos. ¿Dónde vas, José María?', pero salió esa frase.

No sé si fue por la frase, no sé si fue porque además de la frase le calentaron la cabeza, que creo que también. Entiendo que se sintiera traicionado por tal como le llegó, que se sintiera traicionado por mí, porque a él no le llega si yo lo defendí o no lo defendí, si yo di la cara por él en esa entrevista o no. La realidad es ésa, que salió lo que salió, que yo lo entiendo y que lo único que a lo mejor eché en falta es que me lo recriminara para poder tener la oportunidad de defenderme. Pero que lo entendí, entiendo que si a mí me hubiera pasado al revés, pues seguramente también me hubiera calentado la cabeza, también hubiera reaccionado y decir 'me ha fallado Siro'.

Y yo creo que eso también en aquel momento era difícil de solucionar, pero yo creo que contrariamente a lo que mucha gente piensa, Florentino no es un tipo rencoroso y creo que, una vez que podamos hablar, yo creo que aclararemos esta situación. De hecho, no ha hecho ni falta mi explicación, porque llevamos eso, un año de intercambio epistolar, que para mí ya es mucho. Insisto, yo estuve 40 años sin ser amigo de Florentino y puedo estar lo que me queda de vida sin esto, pero como amigo sí me fastidiaba y, sobre todo, que ese amigo tenga la sensación de que soy un desagradecido o no he sabido valorar esa amistad.

Yo puedo tener muchos defectos, que los tengo, pero creo que uno de ellos no es dejar a mis amigos tirados y no ser agradecido con mis amigos. O aunque no haga falta agradecimiento, fallarle a un amigo a mí. Que le he podido fallar a amigos míos, pero que ha sido, si lo he hecho, inconscientemente, no conscientemente.

¿Te viene a la cabeza algún comentario o algún momento que digas 'de éste en concreto me arrepiento, esto no lo tenía que haber dicho'?

No lo sé, es que son tantas… A lo mejor alguno que he hecho de Ancelotti. Si es que en mi vida y en mi trayectoria ha habido muchos momentos que después de decirlo dices 'jo, igual no tendría que haberlo (dicho), porque a lo mejor a esa persona le estás generando una imagen…'. A ver, de un comentario que yo me arrepiento, pero porque yo pensé que no me estaban grabando, equivocación mía, que no estoy acusando a nadie de que me grabaran o que no me hubieran dicho y tal, yo creo que es un malentendido, pero en un programa de Ibai Llanos el año pasado, en vísperas del partido de City, pues yo he tenido no un rifirrafe… Bueno, me presentó una demanda Pedrerol porque decía que había habido competencia desleal por mi parte.

No hubo competencia desleal por mi parte, lo que él buscaba era silenciarme, que no siguiera hablando de él, y en esa previa de ese partido con Ibai yo comenté algo que no tenía que haber comentado, porque hay gente que piensa que yo eso lo hice adrede y no lo hice, porque, además, no me beneficiaba, porque era descubrir una de las cartas que yo tenía en ese juicio que había pendiente, que después él lo ha retirado, que es la mayor constatación de que yo tenía razón. Era descubrir un arma, un testigo que yo tenía y que conocer eso, lo que yo dije, es lo que le llevó a la larga a retirar la demanda, porque sabía que lo que yo había comentado tenía muchas posibilidades de que eso el juez lo tuviera muy en cuenta.

Siro López y el silencio en los medios sobre el caso Pedrerol: «Hay mucha gente que sabe lo que pasó y sigue pasando». Relevo

Lo que se te escuchó fue que Nacho Tellado iba a declarar ante un juez por un supuesto acoso sexual por parte de Pedrerol. ¿Cómo sigue esa cruzada? Porque igual que se te refiere como azote de Ancelotti, también lo has sido o eres en gran medida de Josep Pedrerol.

A ver, porque no quiero que eso quede tapado, como ha hecho mucha gente, pero al final te das cuenta de que soy como un náufrago en medio de una isla, es pelear contra molinos de viento. Hay mucha gente que sabe lo que ha pasado ahí y lo que está pasando, el problema es que sigue pasando. No es algo que digas 'bueno, esto se ha parado'. En algún momento sí, porque ante la presión, ante todo lo que iba saliendo la cosa cambió algo, pero por lo que yo sé y por la gente que hay ahí dentro, que hay gente que te cuenta cosas, pues siguen pasando. Sigue habiendo situaciones que no son las mejores para la convivencia y para el trato que tiene que recibir el trabajador, pero, claro, cuando miras y dices '¿pero eso lo saben en Atresmedia?' ¿Cómo no lo van a saber, si lo sé yo? Si no saben, que pregunten. ¿Alguien se preocupó de preguntarle a la gente de dentro y de fuera, que ya no está, si lo que contó un testigo, Pablo Espinosa, delante de un juez es verdad o es mentira? ¿Alguien le ha preguntado a este señor por qué retira la demanda?

Siro López y Josep Pedrerol, en una charla.  Miguel Angel Santos
Siro López y Josep Pedrerol, en una charla. Miguel Angel Santos

Retirar una demanda, a mí me decían mis abogados, 'es que eso es inaudito'. Cuando tú retiras la demanda, no tiene oportunidad ya ni el juez ni el fiscal ni el demandado de decir que quieres llegar hasta el final. Entonces, la mayor prueba de que yo tenía razón en todo es que ha retirado la demanda. La han retirado. No nos ha dado la oportunidad de llegar hasta el final. ¿Alguien le ha preguntado por qué ha retirado la demanda, alguien de la empresa? No sólo no ha pasado eso, no sólo no se ha investigado todo lo que yo he denunciado, sino que incluso me contaban que lo habían hecho consejero de Atresmedia o algo así, que forma parte del consejo. Entonces, cuando tú ves que, además, el presidente de la Asociación de Periodistas Deportivos de Madrid está asalariado con él, lo pasean por ahí por facultades para que dé lecciones de periodismo, cuando tú ves que el presidente de los periodistas deportivos de España, después de salir todo lo que ha salido, fue a su programa allí a estar en su tertulia, y ves que nadie mueve nada y nadie se preocupa de todo esto pues dices: 'chico, tampoco vas a ser Don Quijote contra los molinos de viento. Si ya les va bien, pues a mí también, que se lo coman como ellos quieran'.

Yo creo que al final pasará algo gordo y saldrá, pero ha habido presiones de todo tipo, porque yo tengo muchos compañeros en medios que han recibido llamadas. Cuando surge lo de Pablo Espinosa y cuando se empieza a investigar según qué cosas, cosas más graves que lo de Pablo Espinosa, resulta que hay llamada a 'El Mundo', porque saben que están investigando, por parte del departamento de comunicación y por parte del consejero delegado de Atresmedia, que es el que en su momento lo ficha, para que se vayan tapando y se eche tierra encima. En 'El País' habían empezado una investigación y de pronto se paró. En tu medio, en 'Relevo', se empezó una investigación y se paró. En 'ABC' empezaron una investigación y hubo llamada y le hicieron un lavado de imagen en el que incluso me invitaron a mí, que yo les dije: 'Oye, no me llaméis para lavarle la imagen a este tipo'. 'No, no, de verdad que no. Estamos haciendo un informe en el que sale malparado'. (Sonríe). Con un lavado de imagen, vamos, de arriba a abajo.

[Nota del editor: Efectivamente, Relevo comenzó una investigación sobre las acusaciones de exempleados sobre Josep Pedrerol. En nuestro caso, no recibimos presiones pero no encontramos ninguna prueba ni ningún otro testimonio que clarificara más esas denuncias laborales].

Entonces, cuando ves todo esto pues dices 'vale, si os vale esto, no hay problema'. A mí lo que me parece es que hay medios en esa empresa que denuncian cosas que dices 'no sé cómo no se os cae la cara de vergüenza'. Que está bien, que hay que denunciar todos los actos que atenten contra la sociedad, pero cuando en tu casa se están viviendo situaciones que no son las mejores para la profesión y para las relaciones humanas, hombre, por lo menos lava la ropa de tu casa antes de intentar tender la de fuera. En esto estoy un poco decepcionado con la profesión y con todo lo que se mueve en torno a esto, porque todos sabemos lo que ha pasado, lo que sigue pasando, no es nada nuevo, pero, bueno, hay esa Omertà, esa ley del silencio, y ya está. A Pablo Espinosa, después de declarar lo que declaró, no hubo nadie de las asociaciones de prensa, de los medios de comunicación, que lo llamara para decirle 'oye, que no sabíamos que lo habías pasado tan mal, danos más datos que queremos investigar'. Nadie. A Nacho Tellado lo llamaron, empezaron una investigación y ahí se ha quedado, pero no un medio, sino varios, y se ha tapado.

Lo más importante para mí es que se demostró cuando retira la demanda y cuando hubo las declaraciones que éste no era un problema de una guerra de Siro contra Pedrerol o de Pedrerol contra Siro. Esto era una denuncia porque yo dije basta, basta hacia una persona que hace o utiliza prácticas que para mí no son las mejores, ya no sólo para los medios de comunicación, sino para las relaciones en la sociedad. Alguien me dice: 'Oye, ¿y por qué no lo hiciste antes, cuando trabajabas con él?'. Bueno, pues quizás uno de los motivos para irme fue ése, que había cosas que no me gustaban. ¿Y por qué no lo denuncié? Pues seguramente por decir '¿para qué me voy a meter en líos?'. Y llega un momento que te metes en el lío porque hay gotas ya que rebasan el vaso y entonces digo: 'Pues, mira, hasta aquí hemos llegado'. Y lo hice y a lo mejor es verdad, y lo reconozco, que lo tenía que haber hecho antes, no cuando me afectara tan de cerca, pero también es verdad que hay cosas que durante mi etapa yo no vi.

A mí lo que cuenta Pablo Espinosa en esa declaración me puso la piel de gallina. Yo eso no lo llegué a vivir, igual que lo de Nacho Tellado yo no lo sabía. Yo no lo sabía. Es más, yo me entero de lo de Nacho Tellado no porque él me diga que va a decir esto delante de un juez, no, yo me entero de lo de Nacho Tellado porque, hablando con una periodista de El País, él se lo dice, y yo es cuando se lo pregunto, digo: 'Pero ¿a ti te ha pasado esto?' Y me dice: 'Sí, sí, a mí me ha pasado esto'. Porque él iba a ir a declarar por tema un poco de relación laboral, de relación de trabajo. Eso ha quedado ahí, ha quedado tapado y ya está.

Si les va bien, si a la gente de Atresmedia ya les va bien, si a Antonio Ferreras, que es el adalid de... Que, además, yo lo sigo mucho y me parece que hace un programa extraordinario, pues ya les va bien, pues no pasa nada. Si ellos aceptan esa relación laboral que él tiene con sus trabajadores… Porque sé que también, por ejemplo, en La Sexta, en su momento, el sindicato se preocupó, pero al final se lavaron las manos diciendo 'no, es que son trabajadores de él'. Ya, son trabajadores de él pero que trabajan y utilizan los medios y utilizan las instalaciones de vuestra empresa para hacer prácticas que no son las mejores en una relación laboral entre un jefe y un trabajador. Allá ellos.

Vosotros tuvisteis una relación laboral en un momento importante, Siro. Hablamos hace unos meses del nacimiento de 'Punto Pelota' y después 'El Chiringuito', que se ha convertido en el fenómeno que se ha convertido no sólo aquí, sino a nivel internacional, sobre todo en Latinoamérica. El de Josep Pedrerol es un gran nombre en el mundo de la comunicación. El primero de ellos con el que trabajaste fue José María García.

Sí. En aquel momento, José María era el número uno, con el que cualquier chaval que empezaba soñaba bajar. Yo tuve la suerte en el año 1983 de que me ficharan para Antena 3 de Radio, en una empresa nueva y que fue maravillosa. Y es verdad, empezamos esa aventura entre todos, el 'Punto Pelota' aquel incipiente, lo que pasa es que no tiene nada que ver aquel con lo que se hace ahora. No digo que sea ni mejor ni peor, yo creo que aquel era más periodístico, era más de investigación también, se hacían entrevistas, se daban muchas noticias. Había una parte también de espectáculo, pero yo creo que la pirámide se ha invertido, ahora es muy poquito de periodismo y mucho de espectáculo. Bueno, que está bien, ya le va bien, y como yo digo: 'Si logras engañar a la gente, pues maravilloso'.

Por ejemplo, siempre se decía 'no, es que es un programa muy madridista', y yo digo 'no os equivoquéis, en este programa es donde más se ataca al Madrid'. En este programa se ha llegado a insultar y se ha llegado a vejar a jugadores del Real Madrid. Se han reído de jugadores del Real Madrid. Hay una denuncia de por medio, incluso. Hay amenazas hacia un jugador del Real Madrid. Por tanto, no sé el madridismo por dónde sale. Lo que pasa es que hacen el tema de policía bueno, policía malo. Con el Barça pasa igual, lo que pasa es que la gente del Barça se ha dado cuenta hace mucho tiempo que ese programa es absolutamente antibarcelonista y han dejado de verlo, sólo lo ven en momentos puntuales, cuando pierde el Madrid o cuando el Barça gana algún título importante, más que nada para ver la cara de los madridistas que están ahí.

Y en lo del Madrid lo han ido manteniendo, pero yo creo que cada vez se les ha ido viendo más el plumero y es el programa que rezuma más antimadridismo. A mí no me cabe ninguna duda. Por nombrarte una última, recuerdo que el día después del partido con el Leganés, al cabo de tres días, que se habló mucho de que si el árbitro había beneficiado al Madrid o no había beneficiado, el martes sale una entrevista con un jugador del Leganés hablando de un penalti que no había visto nadie, no se había hablado de esa posibilidad, entonces, ¿por qué lo sacan? Mira, yo que me conozco mis clásicos sé por qué sacaron esa entrevista.

¿Por qué?

Porque el señor que dirige el programa debía estar moscatel con Florentino Pérez, le quiso mandar un mensaje, porque él funciona mucho así, porque Mbappé o el Madrid había concedido la primera entrevista a un medio de comunicación a La Sexta, es verdad, pero no a él, sino a Ana Pastor. Yo, como me conozco a mis clásicos, sé por dónde venían los tiros, no tenía ninguna duda (sonríe). Pero sí, no me arrepiento de mi etapa en 'Punto Pelota', creo que fue una experiencia en algunos momentos mejores y otros peores. Sí es verdad que siempre he dicho que ese programa sacaba lo peor de mí, porque a veces me descontrolaba y yo no soy así. Yo no soy nada discutidor, siempre digo lo mismo: 'Yo discuto de fútbol o de política por dinero. Si voy a un programa de fútbol, pues voy y discuto porque me pagan', pero yo después soy muy tranquilo.

"Yo no soy nada discutidor. Si voy a un programa, discuto de fútbol o de política porque me pagan, pero yo después soy muy tranquilo"

Cuéntame alguna anécdota de José María, que creo que te echaba también unas broncas… Tú ahí no eras el beligerante, ahí era él, ¿no?

Mira, por ejemplo, en ese artículo que te decía de blanqueo de Pedrerol, a uno de los que entrevistan es a Pipi, y lo quiso comparar hablando un poco de que 'hombre, no, es que Pedredol es muy exigente y a veces pierde un poco los papeles'. No, no, no, no insultemos a García en el trato con los trabajadores, no lo insultemos. Le dije a Pipi, le llamé: 'Pipi, no insultes a García, tío, que no tiene nada que ver, tú puedes ser muy exigente, pero eso no te da derecho a insultar, a no sé qué, a montar los números que monta el personaje al que tú estás defendiendo'.

José María García te metía una bronca, pero primero te la metía normalmente en antena. A lo mejor te liabas a esto y te cortaba, pero normalmente casi siempre tenía razón. Por ejemplo, los carruseles de fútbol. Estabas en distintos partidos, se jugaban los partidos casi todos a la vez, entonces por línea interna te decía el técnico, estabas a lo mejor en el Camp Nou: 'Oye, Siro, que vamos con rueda de tiempo y resultado'. Eso quería decir que te tenías que limitar a decir 'minuto 25, Barcelona 1-Espanyol 2. Ya está, no podías moverte de ahí, y siempre había el típico que, y eso es una anécdota que ha pasado, que empezaba 'bueno, pues el tiempo aquí en Coruña, está nublado' (dice con acento gallego) y García se subía por las paredes: '¡Vamos! Si vamos a un concurso de tontos, quedas el segundo. Pero si te he dicho tiempo y resultado, lo llevas haciendo durante toda la vida y me empiezas a hablar de que si el tiempo. Tiempo y resultado es minuto 15, Barça 1-Espanyol 2'.

García se subía por las paredes. Eso sí lo tenía. Pero después era, yo siempre he dicho lo mismo de él, perro ladrador, poco mordedor. Yo no recuerdo a García que echara a nadie. ¿Que amenazara con echar? A mí, 40.000 veces. A mí me echó… Yo llegué tarde a un partido, cuidado, que llegar tarde a un partido en directo, que eres tú el narrador del partido, échale bemoles. Bueno, pues yo he llegado tarde y no me ha echado.

El día que el Metro de Moscú le jugó una mala pasada a SIro López y provocó el cabreo de José María García. Relevo

¿Y eso por qué? ¿Por qué llegaste tarde?

(Se recoloca en la silla). He llegado un par de veces, o tres, igual tres. Una fue en Moscú, que se estropeó el metro, me quedé en medio, y cuando llegué llevábamos 15 minutos de partido, CSKA de Moscú-Barcelona de baloncesto, y los gritos de García se oían en Moscú, en la Plaza Roja. Desde el despacho que estaba en el quinto pino, estaba Andrés Montes narrando y yo oía de fondo 'lo echo, ésta no se la paso' (dice simulando los gritos de García). Bueno, después acabó el partido, a lo mejor yo había hecho una buena narración, él siempre decía que yo era el mejor narrador de baloncesto que había en este país, entonces, me lo perdonaba todo. Él siempre lo dice, ahora que alguna vez nos vemos y comemos, siempre me dice: 'Es que me lo has hecho de todos los colores', y le digo: 'Y algunas que no te has enterado y las sabes ahora'. (Se ríe). Se muere de risa, pero como jefe te lo pasabas bien, era muy exigente, pero después te valoraba mucho. Cuando hacías las cosas como había que hacerlas, investigabas, conseguías noticias, las contrastabas, y siempre digo que para mí García es el que cambió un poco la imagen que teníamos del periodista deportivo.

"José María García siempre me dice: 'Es que me lo has hecho de todos los colores', y le digo: 'Y algunas que no te has enterado y las sabes ahora. Y se muere de la risa"

¿Cómo estás viviendo esta etapa? Porque tú hablas de todos tus años de profesión, desde que empiezas en la radio, en Barcelona, luego en Madrid, pasas a televisión, jefe de prensa, y has vivido facetas absolutamente diferentes hasta llegar al mundo streamer.

Sí. A mí cuando la gente me felicita, ahora ya menos porque están acostumbrados a verme por Twitch, ya soy más un influencer, un YouTuber, que un periodista deportivo, pero cuando al principio me felicitaban por haberme reconvertido, redescubierto, reinventado, yo decía: 'Escúcharme, que no tiene mucho mérito lo mío, el único mérito es que haya podido solucionar los problemas técnicos que para un señor de mi edad se me pueden presentar'. Para eso tengo que dar las gracias a mi hijo el pequeño, de 24 años, que es el que vive en casa, que tiene las nociones típicas de que ahora los chavales en Bachillerato o en la ESO han dado un curso o dos cursos de informática, y me ha solucionado los problemas, porque por los demás, ¿cuál es el mérito?

Si estoy haciendo lo mismo que he hecho durante casi 40 o 45 años, pero desde casa, que es ponerme delante de un micrófono y delante de una cámara y hablar y vender el pollino. Como diría Andrés Montes, vender el muñeco. No tiene mucho mucho mérito. ¿Qué es lo que me permite Twitch? Primero, divertirme, hacer lo que yo quiero. Empecé haciéndolo cuando yo quiero, pero ahí me di cuenta de que no puedo hacerlo cuando yo quiero. Si quiero ganar adeptos y seguidores, me di cuenta que me tenía que marcar unos horarios, porque la gente somos animales de costumbres y la gente tiene que saber a qué hora estás.

"Yo estoy viviendo del cuento desde hace 47 años. Estoy haciendo lo que más me gusta y encima me han pagado por ello"

Y eso sí que lo he conseguido y no lo hago cuando quiero, sino cuando debo, pero lo más importante es eso, que hago lo que me gusta, monto el programa como a mí me gusta, y después lo que me va a dar es la posibilidad de jubilarme cuando yo quiera, que eso es impagable. Igual que es impagable dedicarme a lo que me dedico durante 47 años, a lo que es mi hobby y que encima me paguen… A mí cuando me dicen 'joer, qué trabajo'. 'Escúchame, que yo estoy viviendo del cuento desde hace 47 años. Estoy haciendo lo que más me gusta y encima me han pagado por ello'. Yo hubiera pagado. Si cuando yo tengo 19 años me dicen que voy a ser periodista deportivo durante 47 años, que voy a viajar a donde he viajado, que voy a vivir los eventos que he vivido, que voy a hacer todo lo que he hecho, hubiera dicho: '¿Dónde hay que pagar? ¿Cuánto cuesta eso? Vale, ya me buscaré otro trabajo, pero ¿esto cuánto cuesta para poder hacerlo?'.

Entonces, ¿cómo me voy a quejar? Yo cuando hay gente que se queja de nuestra profesión, de que no puede disponer de fin de semana, de que no puede estar con sus hijos o con sus nietos y tal digo 'chico, pues entonces dedícate a hacer otra cosa. No te dediques al periodismo. Es que eso es lo bonito de nuestra profesión. Algún sacrificio tendrás que hacer, pero no te quejes, que lo nuestro es un privilegio'. Me pasa con los futbolistas o con los deportistas de élite cuando se quejan, 'poder dedicarte a lo que sería tu hobby y que encima te paguen y, en su caso, que los hagan millonarios, si te quejas, es que eres bobo, eres de manual'. Esto no tiene otra explicación. Entonces, ya te digo, estoy encantado.

¿Cuál es el mejor momento de tu carrera? Ese día que dices 'madre mía, es que ni lo soñaba con esos 19 años'.

Si me tuviera que quedar con una fecha y con algo que dices 'jo, es que esto es la leche ya, es que está la culminación', es la primera vez que estuve en unos Juegos Olímpicos in situ, que fue Seúl. Antes lo había hecho en Los Ángeles, yo ya estaba en Antena 3, yo narré los partidos de España en esos Juegos Olímpicos, que fuimos medalla de plata, y eso para mí fue increíble, pero lo narré desde Barcelona para toda España, pero estar en persona dentro del estadio olímpico, que yo estaba allí dentro y pensaba: 'Joder, sólo hay 190 periodistas dentro del estadio de todo el mundo y uno de los periodistas que podrá decir dentro de 40 años 'yo estuve en la jornada inaugural dentro del estadio de Seúl eso, soy yo''.

Después, Barcelona, claro. Estar en los Juegos de tu ciudad, porque yo soy muy gallego y siempre lo digo, en Galicia yo creo que debo tener diez generaciones de gallegos o todas las generaciones de gallegos, pero soy barcelonés, mi ciudad es Barcelona, y tener la oportunidad de vivir unos Juegos, igual que los viví allí, en Barcelona, eso es la releche. Como el chiste de Eugenio, 'jugar al póker y perder es la leche, ganar ya es la rehostia', pues lo mismo.

¿Y el peor momento, Siro? Porque en esos 47 años de profesión es imposible no tener altibajos.

El peor momento yo creo que es cuando cierran Antena 3. Yo me voy medio año antes, porque empiezan a hacer limpieza, porque ya tienen decidido convertir lo que era Antena 3 de radio, una radio convencional, en una radio de música, y la convierten en Radio 5. Que la gente no se acordará, decidieron hacer como Cadena 100 o los 40 pero de música sinfónica con todas las emisoras de Antena 3 de radio. Entonces, en diciembre ya empezaron a hacer limpia, me acuerdo que llamaron a Pepe Gutiérrez, a Torrico y a Ernesto López-Feito, y cuando yo me enteré dije: 'Mira, yo aquí he venido con todo el grupo y me voy. Si empieza a haber gente que la echan, yo me apunto también', y me apunté, porque a mí no me podían meter, además, porque yo creo que estaba en el comité de empresa en aquel momento, y yo podía haber seguido, pero dije (levanta las hombros): 'Ya no está mi gente o una parte de mi gente, yo me largo'. Ahí fue quizás el peor momento porque a mí lo que más me gusta es la radio.

Afortunadamente, me echó una mano la gente de Don Balón, Rogelio Rengel y María Teresa. Empecé a trabajar en Don Balón durante un tiempo, hice algunas cosas de radio para Radio Voz. Lo que era Antena 3 de radio, pertenecía a la Voz de Galicia, entonces ellos generaron una cadena que se llamaba Radio Voz, y yo narraba partidos del Compostela, que estaba en primera ya, o del Deportivo de la Coruña cuando venían por la zona de Cataluña o del Mediterráneo, y al final me surgió la oportunidad de irme a Coruña a trabajar en Onda Cero Coruña y Santiago, y ahí me lié la manta a la cabeza y me fui para Coruña a empezar un poco de cero.

"Pasé un poco de depresión porque yo pasé de estar en los Juegos Olímpicos de Barcelona y de Seúl a tener que escuchar por la radio los Juegos Olímpicos de Atlanta. No quería escucharlo. Yo lloraba por decir '¿por qué me ha pasado a mí esto?'

Y ahí, si me tengo que quedar con la etapa más negativa y la que la vi más negro y la que pasé así un poco de depresión, porque yo pasé, por ejemplo, de estar en los Juegos Olímpicos de Barcelona y de Seúl a tener que escuchar por la radio los Juegos Olímpicos de Atlanta, y llegó un momento que no quería escuchar. Cuando surgió lo de Atlanta, no quería escucharlo. Yo lloraba por decir '¿por qué me ha pasado a mí esto? ¿Qué he hecho mal?'.

Y la última, ¿tú cómo te sientes en este momento de tu vida streamer, personal, profesionalmente, y cómo se mira al futuro en esa, te iba a decir, nueva faceta? Aunque ya no es nueva para ti, desde luego.

Yo siempre he sido, también lo digo en el libro, como muy Peter Pan. Yo, ¿cómo me sigo viendo? Hombre, ahora me veo más arrugas. Empiezo a decir (dice y se toca la cara): 'Joer, la cara. Me veo hace 10 o 15 años y me cago en la puta. Igual tendría que hacer lo que hace Julia un poco para ver si…' ¿Cómo se llama eso que os echáis?

¿Bótox?

No…

¿Ácido hialurónico?

El ácido hialurónico, para estirar un poquito, ¿no? (Y se estira). Pero que de cabeza sigo siendo un chaval de 24 o 25 años, sigo siendo muy loco también en mis decisiones, muy alocado en la forma de expresarme. A mí hay gente que me decía, cuando al principio empezaba en Twitch y no me conocía, 'claro, es que te has adaptado al lenguaje de los chavales', y yo digo 'que no, que no es verdad, que yo siempre he hablado igual'. Igual me ha ayudado que tengo hijas de 40, hijos de 30 y algo o 30 y pocos, e hijos de veintialgo. A lo mejor yo me he ido adaptando a su lenguaje y por eso mi forma de expresarme, pero que yo no soy nada impostado.

A mí también me gusta ser muy bromista y adapto muchas de sus expresiones: 'Está en su prime', antes podía utilizar 'estar en su mejor momento', o 'te voy a banear'. Voy utilizando alguna expresión pero que mi forma de comunicar con la gente, y quizás ésa sea mi pequeña gran virtud, es que soy muy natural, pero que no he tenido que cambiar para nada, porque si no, se me notaría. Me lo paso bien, no veo un final, no sé cuándo lo dejaré. Pues a lo mejor si un día me falla un poco la voz o la garganta, o me siento cansado. Es verdad que antes le dedicaba muchas más horas, más días. Ahora ya dije 'mira, chico, hay que vivir, hay que vivir'. Hace tres años igual estaría aquí y acabaría contigo y me pondría a hacer un directo. Ahora digo, 'mira, chico, me fumo el viernes, me fumo el sábado, me fumo el domingo y a ver el lunes si lo hago'.

Yo tengo una expresión que no la puedo decir aquí, no sé decir que no. Yo sería (hace una pausa y sonríe) otra cosa, una cosa que no puedo decir, pero que en broma mis amigos y mis amigas. ¿Sabes por qué? Yo sé que nuestra profesión es muy de altibajos y yo lo he vivido, que es como una noria y a veces te coge arriba y a veces, y dices 'mira, no digas que no, no vaya a ser que te falle esto y después no tengas lo otro'. Entonces, estoy en un montón de sitios, estoy en El desmarque, estoy en 'Fútbol es fútbol', estoy en la COPE, primero porque me gusta y, después, porque soy de esa mentalidad de no saber decir que no, pero no por egoísmo profesional ni económico, tampoco sé decir que no cuando alguien, como has venido tú: 'Oye, Siro, ¿por qué no esto?'.

Bueno, pues ¿por qué te voy a decir que no? ¿Me gustaría a mí que me hubieran dicho que no cuando estaba trabajando en un medio o ahora que hago entrevistas y que el otro día atraco, por ejemplo, a Cañizales y digo 'Cañete, que te quiero hacer una entrevista porque semanalmente tengo una entrevista y necesito hacerle una entrevista a alguien'. Bueno, pues Cañete ha levantado la mano y ha dicho 'pues el domingo la hacemos'. 'Vale, gracias, Cañete'.

Hay una frase de Kubala que yo la hice mía. Laszi Kubala, además de jugador del Barça, fue el seleccionador español, y un día le preguntaron: 'Oye, ¿por qué te quieren tanto los jugadores?', y dice: 'Porque yo trato a los jugadores como a mí me hubiera gustado que me hubieran tratado o como me han tratado'. Entonces, yo intento aplicarlo. No soy ni mejor ni peor que otro, pero que intento aplicar esa frase, tratar a la gente como a mí me gusta que me traten o como a mí me hubiera gustado que alguien me hubiera tratado. Y yo he tenido mucha suerte porque me han tratado todo el mundo muy bien. Ha habido excepciones, pero hago de eso mi filosofía de vida.

Yo también lo intento, y te agradezco este sí, que no dijeras que no.

Gracias a vosotros por acordaros de mí y mucho ánimo a toda la gente de Relevo, que cuando se cierra una puerta se abren un montón de ventanas, que yo he pasado por el trance y os aseguro que hay vida. (Se le entrecorta la voz y se le llenan los ojos de lágrimas).

Muchas gracias, Siro.