Así se fue agrietando la relación Simeone - Burgos: el Mono ya no tiene ni el teléfono del Cholo
La crítica del 'Mono' al planteamiento rojiblanco en la Supercopa viene de atrás: en 2017, comenzó a romperse el vínculo de dos amigos inseparables.
![El Mono Burgos y Simeone./AFP](http://s1.sportstatics.com/relevo/www/multimedia/202401/11/media/cortadas/mono-burgos-simeone-RJdyjS8XX4XYr4hP6iKP7IL-1200x648@Relevo.jpg)
Hay relaciones que no terminan con una discusión o una pelea, sino que pueden hacerlo con un abrazo, aunque después no se vuelvan a hablar nunca más. Ese podría ser el resumen de lo ocurrido entre Diego Pablo Simeone y el 'Mono' Burgos, puesta en entredicho una vez más en las últimas horas por el comentario de Burgos tras la derrota atlética en la Supercopa. Lo suyo es un amor roto de tanto usarlo...
Vayamos a 2017 para comprender mejor qué pasó entre ellos. Por entonces, llevaban trabajando juntos desde hacía cinco años, cuando Simeone se lo llevó de segundo a Racing de Avellaneda, una vez que el 'Mono' ya había emprendido su carrera como primer entrenador en el Carabanchel. A partir de entonces, el 'Cholo' no volvió a tomar una decisión sin el visto bueno del 'Mono', encargado además de las jugadas de estrategia y otras facetas en las que el primero delegaba con los ojos abiertos, pero con una fe ciega en él.
Ambos compartían su vida profesional y personal, siendo casi de la familia. Cenaban juntos varias veces a la semana, con sus parejas e hijos de por medio, asados, cumpleaños, viajes a Buenos Aires, celebraciones… Por entonces era difícil imaginarse al 'Cholo' sin su amigo al lado, y viceversa. Todos aspiraban a formar un tándem así, compartiendo además representante, ni más ni menos que Natalia Simeone, la hermana de Diego Pablo.
😡 Germán 'Mono' Burgos: "Estoy muy caliente. Un equipo va buscando dos pasos más adelante y el otro que busca dos y tres pasos para atrás".#SuperSupercopa #LaCasaDelFútbol pic.twitter.com/QEXY7kTa0j
— Fútbol en Movistar Plus+ (@MovistarFutbol) January 10, 2024
Simeone no realizaba un fichaje sin el beneplácito del 'Mono', e incluso como recordó este en una entrevista a Relevo, valoraban el signo del zodíaco de los jugadores para confeccionar la plantilla, tratando de que los distintos egos y caracteres pudiesen estar, a priori, equilibrados. Destacaba la pasión del escorpio para liderar un equipo, precisamente el de Simeone. Y el 'Mono', como ya conocemos y a pesar de haber sabido manejar su rol de segundo durante años, no se caracteriza por un temperamento sutil y que pase desapercibido.
Pero durante el mencionado 2017, Germán empezó a sentir la necesidad de dar un paso al costado, o más bien al frente, salir del nido de Simeone y empezar a volar como primer entrenador. Cuando se lo comunicó, no le sorprendió, se lo veía venir, aunque no por ello dejó de sentirse decepcionado por su mejor amigo, mano y brazo derecho. Creía que, si estaban bien así, para qué cambiar. Le respetó, pero no le entendió.
Ya en 2018, cuando Simeone firmaba la renovación, posaba en la foto junto a su cuerpo técnico y no aparecía Burgos, sino Nelson Vivas, al que ya había tenido como ayudante de campo en Racing, Estudiantes, River y San Lorenzo, de 2006 a 2010. Es decir, hasta justo antes de que Burgos le reemplazara en funciones. Fue algo así como un 'calienta que sales', si bien por entonces Vivas todavía no podía ejercer como segundo entrenador en España. Por ello vimos que, durante una temporada, acompañaba a Germán y a Diego en el banquillo rojiblanco, hasta que el 'Mono' voló, primero a Newells, donde no le fue demasiado bien. En aquellos meses convulsos e incómodos para todos, al 'Cholo' tampoco le gustó que Germán mantuviera amistad con periodistas que se mostraban especialmente críticos con su trabajo.
Ya no volvimos a ver una foto de ellos juntos, y a pesar de que Burgos reside en Madrid, muy cerca de Simeone, no cuenta para los encuentros asiduos entre argentinos que realizan en Majadahonda o en casa de los Leo Rodríguez, Gustavo López, Pablo Vercellone o del propio Diego Pablo. Tampoco aparece el 'Profe' Ortega, el único del cuerpo técnico que no comparte representante con Diego y que tiene otras condiciones contractuales a la hora de negociar el staff los distintos acuerdos con el club. Se prevé, además, que sea el próximo en salir. Además, ya ha habido ciertas discrepancias entre ellos, la última cuando el preparador físico recibió la llamada de su selección uruguaya, coincidiendo con varios parones ligueros, y poder ayudarles en la última fase de clasificación al Mundial de Qatar y para el mismo, aunque a Simeone no le gustó la idea.
La salida de Germán coincidió también con la de Pepe Pasqués, jefe de prensa de Simeone y soldado de confianza del 'team Cholo', y quien tampoco ha querido contar la verdad de lo ocurrido entre ellos.
Tampoco el 'Mono' apareció en el documental de Simeone, llamando demasiado la atención la ausencia del que fue pieza clave en los últimos éxitos del Atlético de Madrid. La excusa de que no pudo porque estaba dirigiendo a Newells fue eso: una excusa. Nadie le llamó. Hace años que nadie con apellido Simeone le llama o contesta los mensajes que de vez en cuando le envía a Diego, sobre todo cuando las cosas no han ido bien. Desistió y ahora ni siquiera tiene su número de teléfono. Precisamente en la entrevista concedida a Relevo alegaba que hay amistades que no necesitan verse, que son amigos desde hace veinte años, y que les vale con mirarse y saber lo que piensa el uno y el otro. Sin embargo, todos sabemos que la amistad puede prescindir de la frecuencia, pero no de ciertos requisitos como el entendimiento y la confianza. Aquello se perdió. Uno por sentirse traicionado. El otro, incomprendido.