UEFA pasa factura al Gobierno: no perdona su silencio contra la Superliga
Ceferin no olvida que España fue el único miembro de la Unión Europea que no firmó oponiéndose al proyecto de Florentino Pérez.

Durante estos días, desde que el Gobierno anunció la creación de esa "Comisión de Normalización, Representación y Supervisión de la RFEF", ha estado más presente que nunca un argumento muy recurrente durante los últimos 30 años: que ni UEFA ni FIFA toleraban injerencias del Gobierno en los asuntos de sus Federaciones, incluida, por supuesto, la RFEF.
De hecho pocos minutos después de aparecer el comunicado del Consejo Superior de Deportes informando sobre esta Comisión, que hoy hemos sabido que presidirá Vicente del Bosque, aparecían ya en varios medios noticias más o menos apocalípticas sobre la posibilidad de que España se quedase fuera de la Eurocopa, los Juegos Olímpicos o incluso sin el Mundial 2030 por culpa de esta presunta "injerencia" del Gobierno en la Federación.
No era así. Desde luego no tan exagerado. Al preguntar a ambas instituciones, la respuesta era siempre mucho más mesurada que las noticias. Había, es verdad, preocupación, o interés, pero nunca una amenaza. "Es muy temprano. Tenemos que ver primero qué es lo que el Gobierno querría decidir. Si hubiera una injerencia directa sí podría ser un problema, porque hay límites, pero no estamos en ese punto ahora mismo porque hay que entender bien qué va a ocurrir. Después, podremos ver cómo evoluciona y si hace falta hacer algo", explicaron a Relevo fuentes del máximo organismo del fútbol europeo.
En cuanto a FIFA y las injerencias, es todavía más complicado de entender: uno de los países candidatos junto a España, Marruecos, tiene como presidente de su federación a un ministro de su propio Gobierno. Es complicado mayor nivel de injerencia... pero se puede conseguir: Qatar tuvo el Mundial de 2022 siendo toda la organización 100% gubernamental. Pero todavía hay más injerencia en otro país organizador, en 2034: Arabia Saudí. Y ninguno de ellos ha tenido nunca el más mínimo problema por este evidente control de sus Ejecutivos en las federaciones.
Otras razones que tiene 'guardadas' UEFA
Entonces... ¿a qué viene la carta con las cinco preguntas al secretario de Estado para el Deporte español del pasado sábado? UEFA y FIFA, con bastante firmeza, preguntaban a José Manuel Rodríguez Uribes hasta dónde podían llegar en su Comisión de la Federación, dejando claro que se debía respetar la independencia de la RFEF, que ya tenía a esas alturas un presidente oficialmente nombrado, Pedro Rocha.
La respuesta de Uribes no fue menos firme: "Lo irresponsable sería no hacer nada"... que es, en realidad, lo que ha hecho después. Nada. Suspender la comisión directiva que iba a tratar la suspensión a Pedro Rocha y esperar al TAD, por si le ahorra tener que tomar esta decisión. Mientras, eso sí, fuegos artificiales nombrando para presidir esta comisión a Vicente del Bosque, una figura de nuestro fútbol masivamente respetada y querida.
En realidad, parece que hay mucha más firmeza en la posición de UEFA que de FIFA, respecto a este tema y al Gobierno español. Y es normal, tratándose de una de las federaciones más importante en Europa, siendo tradicional el celo para protegerse entre ellos. Aleksander Ceferin y Luis Rubiales tenían una relación excelente, no en vano era uno de sus vicepresidentes más representativos. UEFA tardó en pronunciarse mucho más que FIFA después del beso no consentido a Jenni Hermoso y tuvo que ser la organización presidida por Gianni Infantino la que suspendiera al expresidente de la RFEF, ante una posición mucho más prudente e incluso distante de UEFA.
Después de eso, hubo otro motivo de distanciamiento evidente: el Gobierno español fue el único de toda la Unión Europea que se negó a firmar el manifiesto oponiéndose a la Superliga. La respuesta que fuentes del CSD ofrecieron en aquel momento fue la siguiente: "El Gobierno no quiere interferir en el procedimiento judicial que se está desarrollando en España y que concluirá el 14 de marzo con la vista oral en el Juzgado de lo Mercantil número 17 de Madrid. Además, tratando de respetar los plazos, propuso a Francia posponer esta firma, algo que no fue aceptado por el Gobierno de Macron. Una declaración conjunta que no recoge cuestiones como que la organización del deporte en Europa se base en el derecho fundamental de libertad de asociación. Pese a ello, España ha propuesto la celebración de una reunión de carácter formal de ministros de Deportes de la Unión Europea para debatir la posición común de los países miembro".
Siendo la Superliga el verdadero problema principal de UEFA y de Ceferin en aquel momento, esa respuesta de España sentó fatal en los despachos de Suiza. Desde entonces, más que un apoyo incondicional a Pedro Rocha, lo que hay detrás de esta firmeza (ahora sí) está en una 'cuenta pendiente' con aquellas reticencias a condenar el proyecto de Florentino Pérez y la agencia A22 para cambiar el orden establecido den el fútbol europeo.
Tendrían casi imposible dejar sin Eurocopa a España
Poniéndonos en un escenario extremo: ¿podrían estas presuntas injerencias gubernamentales del CSD hacer que UEFA sancionase a España sin poder competir en la Eurocopa? Sí. ¿Hay alguna posibilidad de que eso, de verdad, ocurra? Prácticamente ninguna. De hecho, por tiempos, ahora mismo sería inviable, o tendrían que darse unas velocidades inauditas en la tramitación de esta sanción y pillar al TAS (el máximo tribunal del deporte Mundial) fuera de juego o sin capacidad de reacción.
El camino sería el siguiente si UEFA quisiera sancionar a España así: convocar su Congreso Extraordinario y suspender a España (sacando adelante esa votación). Después, que el TAS lo permitiera y no lo parase preventivamente. A mes y medio de la Euro de Alemania, es muy complicado que así sea.
Pero es que después el TAS "no se casa con nadie". Es complicado pensar que UEFA pudiera salir indemne de una decisión así, que nunca jamás se ha llevado a cabo con un país de la Unión Europea, sin poner en riesgo el verdadero alcance de su poder ejecutivo en un proceso jurídico largo, en el que le costaría defender estar por encima de la capacidad ejecutiva de un Gobierno legítimo de un país.
Otros posibles motivos
Otras lecturas sobre esta situación se remiten a diferentes factores, mucho menos concretos y especulativos. Las escuchas hechas públicas en el sumario policial de la Operación Brodie, por ejemplo. En una conversación grabada a uno de los cerebros del Rubialismo, Tomás González Cueto, este explicaba cómo Rubiales pretendía que Ceferin le ayudase económicamente utilizándole a él en el proceso. Esto, que queda dentro del terreno de que fuera una posible fanfarronada o una mala interpretación, abre sin embargo la puerta a valorar hasta qué punto llegaba la buena relación de Ceferin con el expresidente Rubiales, ahora investigado en la Operación Brodie con varias ramificaciones que alcanzan a sedes de la última Eurocopa como La Cartuja, en Sevilla.
En cualquier caso, la posición de UEFA y de FIFA está en defender la independencia de la FederaciónEspañola de Fútbol, que ahora mismo tiene un presidente y una Junta Directiva legítimas. Y así lo han manifestado tanto por carta como en diversas reuniones, e incluso en comunicados de prensa. De ahí, a una decisión sancionadora (que después tendrían que defender con argumentos jurídicos) hay una distancia enorme. Que pueden recorrer, sí, pero que parece casi imposible que afronten en España. Nunca ha ocurrido con un país de la Unión Europea.