GOLF | MASTERS DE AUGUSTA

El plan de entrenamiento de Jon Rahm para ganar en Augusta: levantar 150 kilos en peso muerto y ejercicios de explosividad

El golfista español se ha vestido su primera chaqueta verde tras seguir un exigente método de preparación basado en el fortalecimiento, la explosividad y el control.

El plan de entrenamiento de Jon Rahm para ganar en Augusta: levantar 150 kilos en peso muerto y ejercicios de explosividad
José M. Amorós

José M. Amorós

Jon Rahm entró este domingo en el Olimpo del deporte español después de ganar su primer Masters de Augusta, el sexto para España. El de Barrika, uno de los grandes exponentes del nuevo golf, consiguió vestirse con la chaqueta verde tras una apuesta por la innovación y la evolución de élite con el objetivo de mejorar la fortaleza, explosividad, estabilidad, control motorizado, movilidad y coordinación de los jugadores. Estas cualidades básicas se ven con facilidad en las estadísticas y se traduce en una mejora del rendimiento a corto, medio y largo plazo. Para ello Rahm recurrió a un plan especial de entrenamientos con su equipo de confianza que se incentivó desde la temporada 2020. Si eres de los que piensan que los jugadores de golf no entrenan duro o no tienen una minuciosa preparación física, este artículo (y sus vídeos) va a romper tus prejuicios.

Método de entrenamiento de Jon Rahm para potenciar su fuerza, explosividad y estabilidad. FERNANDO FRAILE ACHAQUES

El inicio de año ha sido inmejorable para Rahm con cuatro victorias con la guinda de Augusta. Un estado de forma que se traduce en resultados y que tiene su explicación en una preparación física exigente, apoyada en estudios personalizados y diseñada para sacar el mejor rendimiento del estilo del español. El equipo de médicos y preparadores físicos de la prestigiosa empresa estadounidense TPI lleva trabajando en el cuerpo del golfista durante la última década y, después de los datos acumulados ha realizado una hoja de ruta que se sigue al pie de la letra en los últimos años. Desde 2020 los resultados del método han crecido exponencialmente en las estadísticas. Lo que hace especial este trabajo es el estudio "del movimiento biomecánico del golf y desarrollar qué músculos son los más importantes en él", nos cuenta Eduardo Celles, entrenador y descubridor de Jon Rahm, en una conversación con Relevo.

"Los glúteos son los músculos rey en el golf"

Eduardo Celles Entrenador de Jon Rahm

Rompiendo, a lo bestia, los prejuicios que el desconocimiento hacen pensar de los golfistas, la exigencia y la dureza física son piezas clave del plan. Fortalecer el corpulento cuerpo de Jon (roza el 1,90 de altura y los 100 kilos de peso) ha sido uno de los principales objetivos en los últimos meses. Para ello, lo más llamativo para los que desconocen una rutina de deportista profesional es la capacidad de cargar un alto número de kilos en peso muerto.

Rahm es capaz de levantar un total de 150 kilos en varias repeticiones para trabajar los músculos del core (músculos abdominales, lumbares, de la pelvis, los glúteos y la musculatura profunda de la columna), sóleos, gemelos, glúteos y musculatura del muslo. "En el golf, aunque parezca mentira, los glúteos son, digamos, los músculos rey", nos revela Celles que explica: "Parece que pueden ser los brazos o la parte superior, pero cuando hacen el backswing (el momento con el palo en el punto más alto del golpe), se lanza primero con las caderas, de ahí al torso, a los brazos y al palo. La secuencia cinética más parecida al golf, aunque parezca mentira, es el lanzamiento de jabalina".

Un trabajo en zonas fuera de los brazos que son la base de la potencia de golpeo y que también se busca con sentadillas frontales de barra con pesos superiores a 80 kilos. Para este tipo de ejercicio de sentadilla, el español utiliza una cuña para elevar el talón y ayudar a compensar la movilidad limitada de su tobillo.

Este vídeo es uno de los entrenamientos en la semana entre sus dos primeras victorias en el inicio de año. Cada semana liberada del calendario, es aprovechada por el equipo de preparación física para trabajar en la mejoría del cuerpo del vasco.

Entrenamiento de levantamiento de peso muerto y sentadilla frontal.

Trabajos para mejorar la explosividad

El fortalecimiento sin explosividad no sería útil en el golf. El objetivo es mejorar la fuerza, pero también generar una explosividad que logre el aumento de velocidad en el golpe. En los últimos meses, Rahm ha conseguido una notable progresión de la velocidad de su golpeo y de la punta de velocidad de la bola. Para hablar de datos: la bola de Jon alcanza hoy, de media, casi 10 kilómetros por hora más que en su primera temporada completa en el PGA en 2017. El secreto para esta transformación es el punto del plan de entrenamiento dirigido a desarrollar la explosividad.

Uno de los ejercicios elegidos es el lanzamiento del balón medicinal que, gracias a su peso, permite exigir una fuerza explosiva a la parte superior del cuerpo que se ve traducido en una mayor velocidad imprimida al palo. Un lanzamiento que se realiza utilizando la técnica de golpe del golf, haciendo un trabajo específico sin palo ni bola.

Estas imágenes son de los últimos días de pretemporada, en la primera semana de enero:

Entrenamiento de explosividad con balón medicinal.

Otro de los trabajos específicos se realiza gracias a las poleas. En primer lugar, con la utilización de un agarre similar al golf. Imprimiéndole exigencia al movimiento del golpeo gracias al peso, se consigue una importante mejoría en el fortalecimiento de los músculos específicos del swing desde el tee (primer golpeo de cada hoyo). Rahm tiene un movimiento mucho más corto y con una rotación mucho más reducida que el perfil más generalizado de los tenistas.

"Jon hace un movimiento más corto"

Eduardo Celles Entrenador de Jon Rahm

Según los estudios de TPI a los que ha podido acceder Relevo, mientras que la mayoría es capaz de imprimir una rotación de cintura de 45 grados y de 90 grados en los hombres, el español gira alrededor de 30 grados en la cintura y no llega a los 80 en la parte superior. Un movimiento mucho más corto en el retroceso del palo que convierte en más importante la fuerza explosiva a la hora de afrontar la bola. El responsable de ese movimiento 'diferente' es Eduardo Celles: "Me costó. Él pensaba, y mucha gente también que esa subida no era buena, y resultó ser lo más bueno que tenía. Ahora no quiere cambiarlo por la regularidad que le da en la calidad de su golpeo".

Entrenamiento específico de golf con poleas.

En la misma línea, el método de entrenamiento incluye también el trabajo de poleas para mejorar el fortalecimiento de brazos y espalda. Un incremento de la musculatura que buscar desarrollar una mayor estabilidad en el golpeo. En las últimas temporadas, Jon Rahm es uno de los golfistas que más ha mejorado en encontrar la calle en sus salidas, tras una evolución en la coordinación y el control del golpeo. Algo que le ha valido para mejorar el número de golpes 'robados' al campo gracias al primer golpe en cada hoyo.

El fortalecimiento y el control de la explosividad ha conseguido una mejora en la estabilidad, el control motorizado, la posibilidad de movilidad y la coordinación de su cuerpo en el juego.

Entrenamiento de poleas.

Un trabajo en la sombra que da sus frutos, un esfuerzo por encontrar la excelencia que le ha llevado a imponerse con maestría en el Masters de Augusta y que le está llevando a ser un jugador dominador en el circuito. Rahm es el segundo jugador con más porcentaje de victorias, TOP3, TOP5 y TOP10 sobre torneos jugados en toda la historia del PGA, solo por detrás de Tiger Woods. Una regularidad tan complicada en el mundo del golf que se traduce en una preparación física y mental de primer nivel. Pero, no todo es fuerza y explosividad, porque el privilegiado toque en el juego corto también se encuentra entre los mejores del mundo.