Las modalidades de juego en el golf: qué es el match play, el medal play y stableford
En el deporte hay diferentes modalidades de juego pensadas para elevar su atractivo. Y estas tres son las más destacadas.

El golf tiene su origen en Escocia y ha cautivado a millones de personas en todo el mundo desde su creación, que los investigadores datan en la Alta Edad Media. Como toda disciplina competitiva, ha ido evolucionando hasta convertirse en el popular deporte que es hoy. El objetivo de los golfistas es introducir la bola en un hoyo con la menor cantidad de golpes posibles, en un campo de juego con diferentes zonas que se establece siempre en grandes extensiones de hierba.
Si bien la esencia del deporte se mantiene desde sus inicios, el golf actual ha incorporado diferentes modalidades de juego para potenciar su atractivo. Y dentro de un abanico amplio de posibilidades que ofrece la competencia, son tres las modalidades que se destacan: match Play, medal Play y stableford.
El Medal Play o Stroke Play
Medal Play o Stroke Play es la competición clásica del golf que más reconoces y que se juega en la mayoría de torneos del mundo (el Masters de Augusta, por ejemplo), incluido el PGA Tour, el European Tour o el LIV Golf: una competición por golpes en la que juegas contra ti mismo y a la vez contra el resultado de los demás, y donde se van sumando todos los golpes que un golfista va pegando durante cada vuelta de 18 hoyos. Al final del torneo, gana quien menos golpes haya dado en total. Es la puntuación que sueles ver en televisión: se comparan los golpes que haces con el llamado Par del campo, que suele oscilar entre los 70 y los 72. De esta manera, si en una vuelta un golfista hace 73 golpes en un campo de par 72, su resultado al final del día sería +1. Si hace 70 golpes, su resultado sería -2. Si hace 72, estará al par del campo, para lo que se suele utilizar el símbolo 'E'.
La mayoría de torneos del PGA Tour y el European Tour se juegan a cuatro rondas, por lo que se suman los resultados propios de cada una de las rondas y en el acumulado se ve quién gana. Utilizando ese mismo ejemplo, si un campo tiene un par 72 y haces 71, 70, 69 y 70 golpes, respectivamente, tu resultado final será de -8. Si otro jugador ha hecho un total de -10 golpes, su resultado es mejor que el tuyo, es decir, que cuando más alto sea ese negativo, mejor.
El medal play premia, por tanto, la regularidad, y a veces un hoyo desastroso (hacer 10 golpes en un hoyo de par 3) puede arruinarte la competición.
En algunos torneos, sobre todo los amateur, esta modalidad también tiene como alternativa la incorporación del hándicap del jugador (la valoración del nivel del golfista). En esta otra pieza enlazada explicamos mejor qué es el hándicap de un jugador de golf y cómo se calcula, pero básicamente cuando más bajo es el un hándicap del jugador, mejor es su nivel, y en este tipo de torneos, para igualar a todos los jugadores, todos restan su número de hándicap al resultado final tras 18 hoyos.
Qué es un partido de Match Play y cómo funciona
Match Play es la otra modalidad más conocida dentro del mundo del golf, y se suele utilizar en competiciones por equipos, como la Ryder Cup , donde cada dos años se enfrentan Europa y EE.UU., o la President's Cup. También se puede jugar de manera individual en un torneo, como ocurre cada año, allá por el mes de marzo, en el Mundial Match Play, donde los golfistas se emparejan por grupos y finalmente se enfrentan en eliminatorias hasta llegar a una final.
En el Match Play el formato es completamente distinto: aquí no entregas una tarjeta de golpes, sino que, hoyo a hoyo, un golfista se enfrenta a otro con golpes consecutivos y, al final de los 18 hoyos, gana el jugador que más hoyos le haya ganado al rival, es decir, gana quien en más hoyos haya conseguido hacer menos golpes que el contrincante. Este sistema tiene varias peculiaridades: aquí no se premia siempre la regularidad, porque un jugador puede hacer un hoyo desastroso en el que pega 20 golpes, pero al final del mismo solo habrá perdido un hoyo que puede recuperar en el siguiente haciendo solo un golpe menos que el rival, por lo que uno se encuentra casos en los que un golfista gana un partido de Match Play habiendo hecho más golpes que el rival.
Otra peculiaridad es que no todos los partidos de Match Play llegan al último hoyo, como ocurre sí o sí en el formato clásico de un Medal Play, donde la historia no se acaba hasta que metes la bola en el último hoyo. De esta manera, si vas ganando por 3 hoyos y solo quedan dos por jugar, el 17 y el 18, el partido se acaba, y el marcador reflejaría que has ganado por 3&2 (3 de ventaja con 2 por jugar). Sobre el marcador, también, te habrás fijado que a veces en televisión aparece en el rótulo un A/S. Si ves eso, significa que el partido va empatado (Las siglas vienen de la expresión 'All Square', que significa 'empate' en inglés). Hay, además, situaciones en las que un partido puede ir con una ventaja de 3 hoyos para un golfista a falta de 3 hoyos por jugar. Si ocurre esto, el partido entra en una situación que se llama 'Dormie'. Eso refleja que, al golfista que va por delante, le vale con empatar uno de los hoyos que quedan para ganar el partido.
Relacionado con esto, hay que reseñar que un partido Match Play puede acabar en empate. Ocurre en torneos como la Ryder Cup, donde el torneo es una sucesión continua de hasta 28 partidos con un valor de 1 punto por partido; en estos casos, si un partido de Match Play termina en empate, cada equipo suma 0.5 puntos y no hay desempate.
Otra de las peculiaridades del Match Play es que no hace falta que la bola de los dos golfistas acabe dentro del hoyo para que se acabe el mismo. ¿Por qué? Porque un jugador puede conceder el hoyo (reconocer que lo ha ganado) antes de terminarlo. Esto es un gesto de cortesía que ocurre, por ejemplo, cuando un jugador va en una situación muy favorable en un hoyo en comparación al otro, es consciente de que lo va a perder pase lo que pase y se lo da por ganado. También se puede dar que, de manera parecida, un jugador haya metido la bola en el hoyo en su tercer golpe y el contrincante aún no haya llegado a green o ya haya dado también su tercer golpe y no la haya metido. En estos casos el hoyo se termina automáticamente y los dos jugadores van al siguiente porque es físicamente imposible que se altere el resultado.
Ya para terminar este apartado: el formato de Match Play se puede jugar entre dos jugadores individuales (uno contra otro) pero también se puede jugar entre cuatro jugadores, con equipos de dos contra dos. Esto es lo que ocurre los viernes y los sábados de la Ryder Cup. En esta modalidad por equipos hay dos formatos famosos: el fourball y el foursome. En el primero, cada uno de los cuatro golfistas juegan en cada hoyo su propia bola, y el hoyo lo gana el equipo que tenga al golfista que haya hecho menos golpes; en el foursome, por el contrario, cada equipo juega una sola bola, de manera que los jugadores del mismo equipo alternan sus golpes. Si te quedan dudas, tenemos una historia en la que explicamos de manera mucho más extensa las diferencias entre fourball y foursome y las consecuencias que tiene en el juego.
Qué es el stableford
Stableford es una modalidad más utilizada en el golf amateur, ya que tiene la gran ventaja de poder levantar la bola y no terminar el hoyo cuando se supera el máximo de golpes establecidos para puntuar, algo que agiliza notablemente el juego.
En la modalidad stableford se puntúa con relación al par: 1 punto por el bogey, 2 por el par, 3 por el birdie y 4 por el eagle. Es la única fórmula que gana quien suma más alto.
España, uno de los destinos más elegidos para jugar al golf
Los campos de golf están montados en grandes extensiones de hierba al aire libre. Tener buenas condiciones climatológicas, entonces, es clave para ofrecer a los fanáticos de este deporte escenarios inmejorables.
España ha aprovechado ciertas condiciones naturales y otras estratégicas para convertirse en uno de los países líderes de Europa en cuanto a la oferta de campos de juego. Es posible jugar todo el año sin padecer frío o precipitaciones que puedan complicar el terreno.
Diferentes regiones del país garantizan que su temporada de golf sea muy amplia. Marbella emerge como la capital europea del golf y se destaca por el prestigio de sus campos de juego. La temperatura media anual de las Islas Canarias supera los 20 grados. Y en el sur de Andalucía hay unas 3.000 horas de sol cada año, algo soñado para un apasionado de este deporte.
De manera estratégica, los principales campos de golf en España están cercanos a importantes aeropuertos: Málaga, Alicante, Barcelona, Girona y Madrid ofrecen una escapada desde cualquier ciudad de Europa para disfrutar unos días de golf a pleno sol.