GOLF

Jon Rahm y el resto de españoles persiguen más millones de Arabia en otra temporada del LIV Golf

El circuito saudí arranca este viernes con cuatro jugadores nacionales.

Jon Rahm y Sergio García, el año pasado en Valderrama. /EFE
Jon Rahm y Sergio García, el año pasado en Valderrama. EFE
Óscar Méndez

Óscar Méndez

Este viernes arranca en Arabia Saudí la temporada del LIV Golf, la cuarta desde su creación y una de las más estimulantes para el golf español. Ahí estará Jon Rahm, flamante ganador la pasada campaña y doble ganador de un Major (Masters de Augusta y US Open). Pero no será el único, porque además del golfista de Barrika, compartirán equipo Sergio García, David Puig y un Luis Masaveu que estrenará su salto al profesionalismo en el circuito saudí.

Este curso, el LIV volverá a tener 14 citas por todo el mundo, incluyendo un torneo en España. Los saudíes llegarán a Valderrama el próximo mes de julio. Hay que recordar que cada torneo cuenta en la clasificación. Los jugadores acumulan puntos por sus actuaciones individuales y al final de año, el que más haya sumado se llevará el gran premio de 20 millones de dólares. A mayores, también sumarán puntos por equipos y esa clasificación se decidirá en una cita especial en Estados Unidos.

Rahm aparece como el principal favorito al título. El vasco llegó a finales de 2023 al circuito a cambio de 550 millones de dólares y en su primera temporada logró el triunfo global tras una espectacular remontada ante el chileno Joaquin Niemann. Sus principales rivales para el título serán el propio jugador sudamericano, Cameron Smith, Tyrrell Hatton, Brooks Koepka o Bryson DeChambeau.

Distintas son las aspiraciones del resto de la armada nacional pese al buen hacer de Sergio García en 2024 (triunfo parcial en Valderrama y cuarto en la general) y el gran inicio de año de David Puig en el DP World Tour. A priori, buscarán liderar a su equipo y buscar alguna victoria en uno de los 13 torneos individuales. Para Masaveu, la presión será menor en su debut.

A diferencia de lo que ocurrió en los dos pasados inviernos, en este el LIV Golf ha cerrado el grifo del dinero. Los diferentes equipos no han tirado de talonario para atraer a grandes estrellas del PGA Tour y un ejemplo es lo que ha ocurrido en el conjunto que capitanea Jon Rahm, el último en completar su cuarteto y que apostó por el norirlandés Tom McKibbin, que no está ni entre los 100 mejores jugadores del planeta.

Otro de los grandes cambios del circuito saudí está en los despachos. Greg Norman dejó de ser el CEO del LIV hace unas semanas, aunque seguirá ligado como asesor. Lo que no se ha modificado es el importe de los premios. Cada torneo repartirá 20 millones de dólares, de los cuales cuatro irán para el ganador. Unas cantidades que pueden hacer engordar las cuentas corrientes de los jugadores. Sin ir más lejos, el año pasado Jon Rahm ganó más de 36 'kilos' en premios. Por eso, este curso, el de Barrika y el resto de jugadores españoles quieren sacarle más dinero a Arabia.