A Carolina Marín la daban por acabada, pero llegó un punto de inflexión: "Sé que a partir de ahí he marcado algo en ellas"
La medallista de oro en Río 2016 charló en 'El Vestuario' hace semanas sobre sus opciones de medalla y el miedo que ha metido a sus rivales tras recuperarse de sus lesiones.

Carolina Marín lleva con el objetivo de una nueva medalla en unos JJOO (a poder ser de oro) entre ceja y ceja desde que comenzó a recuperarse de su grave lesión previa a Tokio 2021. Nadie en la historia del bádminton ha conseguido lo que ella: volver a ser realmente competitivo tras romperse las dos rodillas. El milagro ha traído una consecuencia: Carolina, que ya de por sí era respetada en su deporte, no es la número 1 del mundo (concretamente es la 4), pero sí que es muy temida. Sus rivales la ven con otros ojos y todo eso puede suponer una ventaja mental en unos hipotéticos cuartos de final o semifinales, esos que marcan la lucha por un metal. De ello habló la propia Carolina con Quique Peinado en 'El Vestuario' hace un par de meses, una charla que tiene sentido recuperar ahora en la antesala de la competición más importante del ciclo. Carolina, por cierto, se estrena este domingo 28 a las 19:30 hora española en primera ronda frente a la suiza Jenjira Stadelmann.
Puedes ver aquí la entrevista completa de Quique Peinado a Carolina Marín en 'El Vestuario'
Vienes de Indonesia, has hecho semifinales, yo no sé mucho de bádminton. ¿Estaban ahí todas las buenas en ese torneo o no?
Sí, todas.
Y no estás a tope (entonces), ¿no?
Estaré a tope para París. He perdido contra la número 2 del mundo que ganó el torneo.
La perspectiva para París no sé si es el oro, pero desde luego sí que vas a por las medallas
La perspectiva es alta. Yo tengo muy claro que voy a tener dos grandes rivales. Y esas son la coreana An Seyoung (número 1 del ranking mundial) y la china, Chen Yufei (número 2 del mundo), que fue la que me ganó en Indonesia en semifinales, y también fue justamente también la que ganó en los Juegos Olímpicos de Tokio. Pero bueno, rivales van a ser desde el primer partido. O sea, el primer partido va a ser como si fuera una final olímpica, tengo que salir allí con las cosas muy claras, muy serias y muy concentradas. No tengo ninguna duda porque no se puede llegar a una final si no ganas el primer partido, pero partiendo de eso sí es cierto de que mis dos grandes rivales van a ser la coreana y la china.
¿Y tú las notas que te miran con mucho respeto?
No lo sé, pero lo que sí que he notado es que, por ejemplo, hace unos meses, cuando gané lo que para nosotros es como el Wimbledon en bádminton, de los torneos más prestigiosos que tenemos, sé que a partir de ahí yo he marcado algo en ellas de decir: "Eh, cuidadito que sigo estando aquí". Que a pesar de la lesión, que a pesar de todo lo que ha pasado, aquí sigo. Y que a los Juegos Olímpicos voy queriendo conseguir este objetivo.
Pero a ti te habrán dado por muerta alguna vez, digo yo.
Seguramente, seguramente. Una vez no, yo creo que muchas.
Claro, es que no te te han visto entrenar, yo de verdad te lo juro, además creo que te escribí: cuando vi el documental que hiciste, que es un documental de una honestidad muy grande... en esa última imagen en la que estás ahí sentada y dándole ahí a la raqueta decía: « Va a volver seguro, va a volver seguro».
Es que esa es nuestra realidad. O sea, yo cuando hice eso, yo lo que para mí fue primordial es decir, yo quiero transparencia. Yo no quiero ficción en el sentido de que me tengas que decir algo que tenga que hacer. O sea, si esto se va a grabar y esto la gente lo va a ver, quiero que vea si lloro, si estoy contenta, si estoy sufriendo, si estoy divirtiéndome y pasándomelo bien. Yo que eso quiero que la gente lo vea, porque esa es mi realidad. No hay nada de ficción ni nada preparado.
Después de ver la entrevista, te ves el documental y luego vas a los Juegos pensando que efectivamente, a pesar de dos lesiones de rodillas, a pesar de la edad, porque has dicho que hay que pensar en la edad, vas a estar al máximo. Además, te noto muy tranquila. Estás como muy...
Sí, estoy tranquila porque ahora (entonces) sé que me vienen semanas muy duras por delante, semanas en las cuales tengo muchas ganas de afrontarlas, porque es como te digo, es que no estoy al 100%, pero sé que para París lo voy a estar y para ellos ahora me toca sufrir, y sufrir mucho, pero estoy totalmente segura de que todo va a merecer la pena.
Y después de los juegos, ¿tienes algo pensado o no?
Vacaciones. Un respiro. Y después de las vacaciones ya pensaremos.