El 'Angolazo' se convierte en una cuestión familiar con Aldama como protagonista: "Ese partido es leyenda"
El padre del hoy internacional español participó en la derrota ante el equipo africano, donde jugaba uno de los técnicos actuales del conjunto angoleño, así como el hijo de Conceiçao.

Valencia.- España ya tiene la primera victoria del Preolímpico en su casillero. Un triunfo contundente (59-104) ante Líbano que permite pensar ya en las semifinales… salvo hecatombe hoy (20:30 horas) ante Angola. ¿Les suena la historia? Un nombre propio que aparece en la leyenda negra del baloncesto español en 1992.
El conjunto nacional, entonces dirigido por Antonio Díaz-Miguel, jugaba en casa en los Juegos de Barcelona. Un equipo de circunstancias marcado por una huelga de jugadores apenas un mes antes de la cita olímpica y que había perdido ante Croacia y Alemania y había ganado Brasil antes de enfrentarse al equipo africano. Necesitaba la victoria para mantenerse con vida antes de enfrentarse al Dream Team estadounidense.
Todo parecía de cara por el nivel del rival. Sin embargo, España naufragó en un partido recordado como la mayor debacle en la historia del deporte de la canasta (63-83) en un partido que terminó con los pitos del público español hacia sus jugadores. "No merezco una despedida así. Nos han dado un baño", aseguraba Epi. Ernesto Segura de Luna, presidente de la Federación Española, apuntaba que "no esperaba vivir eso nunca", mientras que el seleccionador no pensaba en abandonar el cargo: "No pienso dimitir. Esto no es el fin de una etapa, sino el principio".
Un partido que hoy vuelve al recuerdo porque el rival es el mismo y porque hay apellidos comunes con los que estuvieron en la cancha aquel 31 de julio de 1992. Por el lado español estaba Santiago Aldama Aleson, padre del hoy internacional español y que en aquel partido terminó con 2 puntos y 2 rebotes en apenas tres minutos en cancha.

Hoy su hijo será protagonista tras haber sido el máximo anotador ante Líbano: "Los jugadores de Angola son muy grandes físicamente, muy fuertes, tienen algunos jugadores que están muy bien. En estos torneos cada partido cuenta, y yo creo que mañana tenemos que salir desde el principio a tope otra vez porque hay que jugar los 40 minutos", avisaba el canario, compartiendo discurso con su entrenador, que avisa sobre los peligros de una selección "atípica y con una gran exuberancia física".
Pero el apellido Aldama no será el único que repita partido entre España y Angola, una selección que sólo ha ganado en dos ocasiones en su historia a equipos europeos. Y una de ellas fue ante el combinado ibérico en un partido en el que también estuvo Anibal Moreira, autor de 12 puntos y hoy técnico ayudante en el staff que dirige el español Pep Clarós.
"No me han preguntado mucho por el Angolazo", reconoce el técnico catalán a Relevo horas antes de enfrentarse a España. "Aquí tengo a mi ayudante que jugó ese partido y también a Silvio Sousa, que su padre es Jean-Jaques Conceiçao (máximo anotador con 22 puntos y exjugador de Unicaja). Entonces, hay algo ahí. Fue histórico para España y muy histórico para Angola. Ese partido es leyenda". Un duelo que en Angola ven difícil repetir y del que España no quiere volver a hablar.