El seleccionador de Eslovenia responde a la ausencia de Pogacar en los Juegos: "He sufrido un linchamiento"
Gorazd Penko atiende en exclusiva a Relevo desde París para analizar la renuncia del campeón del Tour tras la no convocatoria de su pareja, Urska Zigart.

A las afueras de la Villa Olímpica, allí donde conviven deportistas, aficionados y vecinos del barrio de Saint-Denis, Gorazd Penko sale a paso lento, vestido de arriba a abajo, gorra incluida, con los colores de Eslovenia. A sus 61 años, el seleccionador nacional presume de llevar medio siglo en el ciclismo, algo que le ha servido, cuenta, para relativizar su última gran polémica, la no convocatoria de Urska Zigart para los Juegos Olímpicos y la consiguiente renuncia de Tadej Pogacar.
"He sufrido un linchamiento público", asegura a Relevo nada más comenzar la charla. "Por suerte o por desgracia, estoy acostumbrado a esto, ya me ha pasado dos o tres veces desde que estoy en el cargo, así que no es algo que me sorprenda. La gente lee la prensa y siempre se queda con lo peor, o mejor dicho, con lo que más le interesa".
Como responsable de diseñar la convocatoria del combinado femenino de Eslovenia, Penko citó a Urska Pintar, dejando en casa a otra Urska, Zigart, doble campeona nacional —en ruta y en contrarreloj— y eslovena mejor posicionada en el ranking UCI. La controversia explotó por dos motivos. Primero, porque Pintar es ciclista del BTC, equipo del que Penko es director deportivo el resto del año. Segundo, y quizás más importante a nivel mediático, porque Zigart, la perjudicada, es pareja de Tadej Pogacar, ídolo nacional y campeón del Giro y el Tour este mismo año.

"Seamos sinceros, si no fuera por Tadej, nadie estaría hablando de esto", apunta Penko, plenamente convencido de su convocatoria. "Si en París tuviéramos puertos de cuatro, cinco o seis kilómetros, Zigart sería la convocada, no tengo dudas, es una de las mejores escaladoras del mundo. Ahora bien, para carreras de un día con el recorrido de estos Juegos [158 kilómetros y 1700 metros de desnivel], Pintar es cien por cien mejor ciclista que Zigart y tiene muchísimas más opciones de obtener un buen resultado".
"Y no solo eso", añade, con ánimos de justificarse, "también influye cómo te mueves en el pelotón, en la tensión de un grupo grande, y Zigart no es la mejor en eso, la verdad. Este año, sin ir más lejos, tenía miedo de ir a Strade Bianche. Pintar no. Muchos defienden que Zigart ganó el campeonato de Eslovenia, pero no cuentan que Pintar estuvo enferma y con solo diez días de preparación… Al final, son muchos factores los que influyen, y he tomado la mejor decisión para el equipo".
Las explicaciones, sin embargo, no parecen haber convencido a todos. Horas después de que se anunciara la convocatoria, la agencia A&J All Sports, dirigida por Alex Carera, representante de Pogacar y de Zigart, criticó duramente la decisión de Penko, asegurando, entre otras cosas, que "el seleccionador se dejó llevar por un criterio no profesional". Pogacar no solo compartió la carta con sus cerca de dos millones de seguidores, sino que añadió un "So true, so true" ("Muy cierto, muy cierto") que centró todas las miradas en Penko.
"Yo solo tengo admiración por Tadej. Creció en nuestro equipo, en Liubliana, y ahora mismo es el mejor del mundo. Te digo más, para mí, es el mejor ciclista de la historia", declara el técnico desde París. "Pero sé que no voy a cambiar su opinión. Ni la suya, ni la de nadie que piense como él, probablemente. Es su forma de verlo y lo entiendo, están condicionados".
Sabedor del peso mediático que ha caído sobre sus hombros, Penko asume que la decisión podría incluso costarle el puesto. "Nunca se sabe, en esta vida todo es posible", sugiere con una tímida sonrisa que da paso a varios segundos de silencio. "No me quita el sueño, la verdad, porque los que me conocen saben que he tomado esta decisión como todas las demás, de manera objetiva e imparcial. Incluso Annemiek van Vleuten, que algo sabe de esto, dijo el otro día en la prensa neerlandesa que no entendía la polémica en torno a mi decisión".
Pese a todo, antes de volver a las entrañas de la Villa Olímpica, Penko subraya que su relación con Zigart no está ni mucho menos rota. "Hablamos por teléfono justo antes de la convocatoria y nos escribimos a menudo. Sin ir más lejos, durante el Giro de Italia femenino [del 7 al 14 de julio] le he ido mandando mensajes cada pocos días. Ella siempre me responde y me agradece el apoyo", sentencia. "Al final, nos conocemos desde hace mucho tiempo y nos tenemos cariño, una cosa como esta no lo va a cambiar".