La adicción al riesgo de Cata Coll en la portería: "Cuando he hecho algún regate, he dicho '¿tu eres gilipollas?'"
La meta del Barça y de la Selección, que destaca por su seguridad bajo palos, habla de su gran momento antes de los JJ.OO.
Hay impulsos en el fútbol que son innatos. Incontrolables. No se entrenan. No se preparan. No se piensan. Son esos gestos que levantan a los espectadores de la silla y que están en esa fina línea que separa el éxito del lamento. Sabe bien de lo que hablamos Cata Coll, portera del Barça y de la Selección. La balear atendió en una entrevista a Relevo durante la concentración de España en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas antes de los últimos dos partidos de la previa de la Eurocopa y con los Juegos Olímpicos a la vuelta de la esquina. Es una de las 18 convocadas de Montse Tomé para la cita olímpica, en la que se ve con muchas opciones de ser titular tras encontrarse "muy bien" y después de un año mágico en el que lo ha ganado todo, en su club y con La Roja, siendo titular en logros como la final del Mundial, de la Nations League o de la Champions, entre otras citas importantes.
Su seguridad, sus regates imprevisibles y su frialdad a la hora de actuar en el área le convierten en una de esas guardametas que se marcan en la retina. Y que disfrutan y hacen disfrutar ante los micrófonos, siendo una de las estrellas más accesibles del equipo azulgrana y de la Selección. "Te voy a responder a cualquier cosa que me preguntes con sinceridad y con la naturalidad que tengo. No creo que haya que esconder nada, sinceramente". Confirmamos que su cercanía hizo que no hubiese pregunta incómoda y que Cata Coll también da mucho juego fuera del verde.
Vaya año, Cata...
Sí, vaya año. Al final el destino es muy caprichoso y no sabes por dónde te va a salir. Ha sido un año increíble tanto con el club como aquí.
en este mismo lugar -Ciudad del Fútbol de Las Rozas- tras ser la gran sorpresa en la lista para el Mundial. Entonces, me sorprendió tu ambición y seguridad de que la situación podía cambiar.
Bueno, es que yo creo que la ambición es buena si tiene su curso. Y no es una ambición que se me vaya de la cabeza, sino una ambición de cosas reales, que puedes conseguir y de cosas que tú ves efectivas que puedan pasar. No voy a decir tengo la ambición de volar porque sé que no voy a volar, pero sí de ganar una medalla. Sé que es posible ganar una medalla y sé que es algo real. Soy una tía muy ambiciosa que va por todas y como digo, creo que al final eso se contagia al grupo y es lo que somos en este grupo, un grupo ambicioso.
Además de ambiciosa, también eres impulsiva. Dentro del campo has dejado más de un momento de frialdad máxima con un caño o un regate a una jugadora... ¿Eso se entrena o sale solo?
Me sale de la adrenalina del partido. De la presión. Siempre he dicho que soy una tía que me encanta jugar bajo presión, que es cuando mejor me siento. Es por esa adrenalina de sentir eso, por las mariposas en el estómago, que me sale solo. Ni siquiera lo pienso. Porque aquí los entrenos no lo hago. No lo suelo hacer porque no me sale, pero en el partido es como, bueno... No lo pienso porque si pienso que voy a hacer un caño, lo voy a fallar. Mejor no pensarlo. Luego me riñen un poco, pero ya está, se queda ahí.
Dentro de esa seguridad, ¿hay debilidades? No sé si hay momentos de miedo o en los que diga me ha salido esta vez, pero no más...
Sí. Cuando he hecho alguna vez un regate o tal, he dicho: 'tú eres gilipollas'. Y mi madre me lo recalca también. Es la que más me lo recalca. Porque al final que lo haga un delantero pues no pasa nada, pero al final es el último jugador, lo haces y te va a quedar eso de por vida, pero bueno. No tengo miedo y creo que por eso me sale. Habrá un día que no me salga, que me van a rajar. Pero no tengo miedo a eso. Mi madre sí que lo tiene y ya me lo dice.
¿Sufre mucho tu madre viéndote?
Sí. Mi madre nunca ve los partidos. Se va a andar. No los quiere ver. Cuando ve el resultado, ve el partido.
Tú has vivido todo el proceso de transición entre Jorge Vilda y Montse Tomé.¿Cómo ha cambiado la película para vosotras en el trato personal?
Montse es una tía cercana, que nos habla, que al final es entrenadora-jugadora y que nos deja un poco nuestra libertad de poder jugar. Es algo bueno. Estamos contentas, ha renovado un año más y espero que le vaya igual de bien que a nosotras porque eso significará que seguimos ganando cosas. Estamos en un ambiente muy bueno, entrenando se nota y esperemos que siga todo así.
¿Cómo ha sentado en el vestuario la renovación que, como en el caso de Vilda, llega antes de un torneo?
No decidimos nosotras si renovar o no. Eso viene de arriba. Pero creo que ahora estamos en un ambiente muy tranquilo. Estamos jugando, que es lo que nos gusta, y nos divertimos, que es lo que también nos gusta. Si es para seguir así, bienvenido sea. Si sigue así, pues estaremos contentas de eso.
y que no lo merecéis. ¿Lo sentís así también vosotras?
Sí. Es que siempre hay algo. Siempre hay algo... A veces dices: 'Quiero jugar al fútbol y ya está'. Pero bueno, creo que ese también es nuestro trabajo. Sí que a veces solo te quieres dedicar al fútbol y dejar de lado lo externo. Sabemos que es parte de lo nuestro, del fútbol, y lo aceptamos igual.
Con ese ruido... ¿miráis las redes sociales?
Yo sí. A mí me gusta. En plan, a ver qué dicen, las tonterías que dicen, lo que no... Me río. Me gusta. Nunca he tenido necesidad de decir no voy a mirar esto porque creo que lo malo es lo que te hace decir: 'Sí, pues ahora voy a callar de que no es así'. Me gusta mirar, estar enterada de todo y ver qué pasa.
¿Hay alguna compañera que te diga: 'A mí no me digas nada'?
Sí, bueno, al final esto es muy personal y hay gente que no le gusta y que le afecta. Lo entiendes y ya está. Al final cada una decide sobre eso.
Hace unos meses hubo una imagen tuya muy viral durante la recepción de Pedro Sánchez. ¿Te lo han recordado mucho? ¿Te llamó tu madre?
(Risas) Siempre me dicen que la estoy liando. Saben que soy una tía que me gusta celebrar. Estamos acostumbradas a ganar y el día que no ganemos no vamos a celebrar nada. Entonces, se tenía que celebrar y nada, estaba con María Pérez y lo típico de que te da un ataque de risa, de eso que te ríes por una tontería, una gilipollez, y no podía parar. Y bueno, fui el meme de ese día. No pasa nada.
Se ha quedado en el grupo de WhatsApp del equipo, ¿no?
Sí, sí. Ha quedado, ha quedado. (risas)
, con jugadoras que siguen aquí y son descartes...
Una de esas jugadoras es Jana, con la que yo me llevo muy bien y, al final, es duro. Cuando te dicen eso, es un palo duro, pero creo que, en ese sentido, somos un equipo. Ellas son profesionales al 100% y desde el minuto uno que se eligieron, estuvieron bien, entrenando a tope y creo que eso dice mucho de ellas. Nos están ayudando a prepararnos y, si al final conseguimos algo, es parte de ellas al 100%.
En la lista definitiva también está Patri Guijarro, balear como tú y compañera en el Barça. ¿Cómo de importante es para ti que haya vuelto a la Selección?
Muchísimo. Al final es una compañera, pero la considero una amiga y súper contenta de que esté aquí. Cuando la vi en la lista dije: 'por fín'. Creo que es una jugadora diez y una persona diez también. Ojalá nos dé muchos puntos en estos Juegos Olímpicos y podamos conseguir una medalla juntas.
¿Cómo ha sentado en el vestuario que vais a los Juegos Olímpicos, pero no a la villa olímpica?
(Risas) Es verdad que, al principio, decíamos la villa olímpica, que guay. Vivir la experiencia.. Y, claro, cuando me dijeron: 'No, no, que vais a un hotel aparte en Nantes'. Fue como: 'Vale'. Es lo que hay. Nos adaptamos a todo, si queremos ir a la villa olímpica pues habrá que llegar a esa final para disfrutarla.
Eres una de las jugadoras que, tanto en el Barça como en la Selección, sueles atender bastante a la prensa. ¿Alguna vez te ha dicho alguien que no te expongas tanto?
Es una cosa que no me importa. No me afecta que me preguntes de cualquier cosa. Te voy a responder con lo que pienso sincera y con la naturalidad que tengo. No creo que haya que esconder nada, sinceramente. Es algo que me da igual, que lo hago y que sé que pertenece a esto y ya está. Lo hago con la naturalidad de siempre.
Se agradece, la verdad. Antes te decía que no sabía si esa seguridad y tu fuerte personalidad también se trabaja. ¿Se trabaja? Si es así, ¿cómo se trabaja?
Tengo que reconocer que de pequeña siempre he sido así, por lo que lo tengo en los genes. Es verdad que al final, psicológicamente, a veces no estás en tu mejor nivel y tienes a un psicólogo que sigue trabajando contigo la autoestima y que te dice que hay qeu creer en ti. Al final, pues te lo crees y yo pues me lo creo y soy segura en eso. Y espero que nunca se me vaya esto porque es lo que me define.
¿Tú cuando te pones en la portería te sientes empoderada?
Sí. En el momento que empieza a sonar el himno y que nos damos las manos con el rival, ya me siento que vamos a ganar. Es lo que te hace ganar un partido. Sentirte que sí puedes hacerlo y es lo que marca un poco la diferencia de nuestro equipo. El decir vamos a por ello y vamos a ganar.
te pilló en Málaga, de vacaciones con tus amigas. ¿Echas de menos algo de tu vida anterior?
Sí. Sobre todo, el no poder decidir cuándo ir a mi casa porque no sé cuándo voy a tener libre.
¿Se pierden muchas amistades?
Sí. Se pierden. De los amigos de la infancia para toda la vida, hay muy pocos. Al final, para ir a tomar algo hay muchos, pero de verdad hay pocos. Y cuando te vas fuera es cuando te das cuenta de eso. Yo me he dado cuenta de eso. Puedo contar mis amigos con una mano, pero son los que quiero a mi lado. Los demás, me puedo ir a cenar o cualquier cosa, pero los que quiero son estos y creo que es bueno salir para darse cuenta de eso.
Imagino que la vida social es prácticamente imposible, teniendo en cuenta que no sabes ni cuándo puedes librar con antelación.
Es con las compañeras de equipo. Siempre lo decimos. Acabamos de entrenar y, con quien quedamos al final, las que somos de fuera, es con las del equipo. Quedamos para hacer unos bolos, para tomar un café... Al final, compartes 24 horas con ellas y yo creo, jugando, se nota.
El Barça ha fichado a una nueva portera y dicen que se parece a ti. ¿Has hablado con ella? O con el resto de fichajes, Ewa Pajor y Kika.
La conocía desde que había jugado en el City y la veía. Sí que es una portera como yo, que le gusta arriesgar con los pies. Entonces, tendrá a nuestros fans del Barça taquicárdicos cada partido. Y tanto Kika como Pajor, pues también contenta de que hayan fichado. Creo que son buenos fichajes y ojalá podamos repetir los cuatro títulos con ellas.
para remarcar ese cambio de ciclo tras la marcha de Jonatan Giráldez?
No. Han respetado mucho eso de que Jona acabara todo y luego, cuando empiece la próxima temporada, ya lo haría (hablar) con nosotras. Ahora estamos en los Juegos Olímpicos. Luego, seguramente se pondrá en contacto con nosotras.
La última... ¿Hay tatuaje pensado si vuelves con el oro en el cuello?
Hombre... La mítica de los arillitos. No hay duda.