JJOO | TENIS DE MESA
Tania Zeng, la palista de 58 años de la que no se creen que sea deportista: "Muestro mi credencial y les digo '¡soy atleta!'"
La jugadora chilena, de origen chino, volvió al tenis de mesa en 2022 y hoy está en su primera cita olímpica.
Si Tania Zeng (58 años) pudiese viajar al pasado, le diría a una joven de 22, de nombre de pila Zhiying, que no dejara de competir en el tenis de mesa.
"Quisiera decirle 'pucha, Tania, por qué no seguiste con el deporte que te gusta'. Ahora que volví a jugar, lo disfruto mucho. Antes me daba lo mismo. Cuando volví a empezar en 2022, quería estar todos los días en un gimnasio", dijo en entrevista con Relevo en la plaza de la Villa Olímpica.
Zhiying es el nombre real de Zeng. Cuando en 1989 desde Guangzhou aterrizó en Chile para entrenar escolares, adoptó el nombre con el que más se le conoce hoy. También se dedicó a su familia, lo que luego la llevó a otra ocupación. Casada y con hijos, se dedicó al comercio.
Como vendedora de muebles en Iquique, una ciudad en el norte de Chile, no encontró tiempo para el alto rendimiento.
34 años después tuvo su revancha inesperada.
La palista participó de unas eliminatorias nacionales y ganó su puesto hasta clasificar al Sudamericano. Tuvo buenos resultados a nivel regional, lo que le valió una nominación a los Juegos Panamericanos.
En la cita de Santiago 2023 su popularidad tuvo un ascenso meteórico y en su país de adopción se convirtió en una figura pública.
En París 2024, la china-chilena es una de las atletas más longevas, aunque muchos no se lo crean: "A veces en la Villa Olímpica me dicen 'lo siento, esto es para los atletas, no para los entrenadores', y yo les digo, 'perdón, ¡yo soy atleta! ¡cuidado!', así mostrándoles la credencial. Soy un poco vieja, pero soy atleta".
"A veces en la Villa Olímpica me dicen 'lo siento, esto es para los atletas, no para los entrenadores', y yo les digo, 'perdón, ¡yo soy atleta! ¡cuidado!'"
Zeng confesó que en la ciudadela se está llenando de juventud: "Estar aquí en la Villa se siente muy especial, veo a tantos deportistas jóvenes, y yo me olvido de mi edad. ¡Pensar que soy parte de ellos! Me muevo en bici, voy a tomar helado con mis compañeros. Me pongo a pensar en lo bueno que habría sido tener esto antes".
"Un amigo me molesta 'los próximos Olímpicos te están esperando, ahí ya vas a ser la de más edad'. Ahora soy la segunda de más edad de la historia olímpica en tenis de mesa", aseguró.
Que haya perdido en su debut en la competición de tenis de mesa en la South Paris Arena frente a la libanesa Mariana Sahakian es un detalle. "Fue muy emocionante, no sabía qué hacer, no sabía cómo calmarme antes de entrar. Mi entrenador me dijo 'calma, es un partido más'", dijo.
¿Piensa ya en Los Ángeles 2028?
"Voy a jugar hasta que mi cuerpo permita. El tenis de mesa me hace más fuerte. Es lo que me permite ser feliz".