Djokovic pasa a semifinales con oficio y... susto en la rodilla

Longevidad, gloria, victoria y fortaleza son cuatro aspectos claves y patentes en la carrera de Novak Djokovic. Su palmarés no habla, sino que vive por sí sólo, no hay otro igual en la historia del deporte de la raqueta. Es el dueño del récord de más Grand Slam con 24, pero en su vitrina todavía hay un hueco sin ocupar y que se resiste al carisma y a la calidad del serbio sobre una pista de tenis, el oro olímpico. París es su posible última oportunidad y la va a pelear hasta el final.

Y, así lo demostró en los cuartos de final de París 2024 ante Stefanos Tsitsipas. Tenía el partido encarrilado, la superioridad era evidente, nadie desconfiaba del juego del serbio ni de su pase a las semifinales. El supuesto trámite se estaba convirtiendo en realista. El primer set cayó del lado balcánico sin mucha disputa por parte del griego con un 6-3. El público elucubraba con la próxima ronda de Djokovic, nadie creía que pudiera cambiar ni un ápice de la película dramática que vivía en sus propias carnes el ateniense sobre la arcilla de París.

Pero, todo cambió en el segundo set. En un instante, en un abrir y cerrar de ojos, Tsitsipas hizo break al turno de servicio de Djokovic y lo aseguro para ponerse con un 4-0 arriba. No sabían a que se debía este cambio drástico, el murmullo sondeaba por la mítica pista Philippe-Chatrier del Roland Garros, principal sede del tenis en los Juegos Olímpicos. La familia y sus técnicos observaban perplejos los gestos ambiguos del serbio con cierto hedor a dolor en su rodilla derecha. Se venía lo peor a sus mentes, la mujer del tenista se tapaba con la bandera de Serbia, nadie quería pensar en lo que sucedió en esa misma pista hace 50 días.

En Roland Garros la rodilla derecha del serbio cedió, acabó lesionándose del menisco y, lamentablemente, quedó sin opciones de competir el Abierto de Francia y tuvo que operarse. Los peores pensamientos sobrevolaban sobre el futuro más inmediato de Djokovic en los Juegos Olímpicos, ¿tendría que retirarse, se acabó el sueño del oro?. Pero, después de un parón y ser atendido por el médico, se recuperó y la igualdad regresó al partido para terminar con un tie-break para decidir el segundo set a favor del número 2 del ránking ATP con un 7-6.

Aunque el capítulo de su rodilla no ha terminado aquí. Wimbledon resistió hasta la final nada más operarse y los Juegos Olímpicos estaban portándose bien, pero el percance ante Tsitsipas ha asustado al serbio. En palabras del propio tenista para los medios de comunicación, "Estoy muy preocupado, la verdad. No sé qué decir. El dolor fue muy fuerte durante dos partidos después de que sucedió. No sé si resbalé o qué pasó. Me pareció Roland Garros, donde logré cerrar el partido, sólo para descubrir que la lesión era grave. Le pido a Dios que todo esté bien".