Estos son los árbitros más famosos del snooker
La paradoja del árbitro consiste en que contra mejores son en su trabajo, más desapercibidos pasan para el público.

La paradoja del árbitro en cualquier disciplina deportiva consiste en que cuanto mejor es en su trabajo, más desapercibido suele pasar. Pese a que sin ellos un evento no podría celebrarse en condiciones normales, los colegiados son los grandes desconocidos para el público general. Están ahí, en un segundo plano. En muchas ocasiones vestidos en colores oscuros, ideales para no llamar la atención. Es cierto que esta máxima posee algunas excepciones, siendo el fútbol la más notable de todas. Si bien en el balompié sus decisiones son discutidas, y en muchas ocasiones son el centro de toda controversia, lo cierto es que hay deportes en las que su autoridad todavía es respetada de forma casi reverencial.
Es el caso del snooker. En una situación ideal, al presenciar un partido de billar el espectador no debe reparar en el árbitro en ningún momento. Es cierto que sus guantes blancos, los cuales siempre han de utilizar a la hora de tocar una bola, pueden llamar la atención. Sin embargo, su posicionamiento, detrás del jugador, siempre atento a sus movimientos, está pensado para no interferir en la visión del espectador. En la mayoría de ocasiones, para aquellos que siguen los partidos por televisión, se sitúan fuera del tiro de cámara.
Como decíamos, los árbitros de snooker son respetados por norma general. Eso no quiere decir que en momentos puntuales sus decisiones no sean discutidas. Algunos de ellos se convierten en pequeñas micro celebridades. El mayor reconocimiento que puede recibir un árbitro de snooker es dirigir la final del World Snooker Championship. Estos son los árbitros más famosos de snooker:
Jan Verhaas (Países Bajos)
Jan Verhaas se convirtió en un pionero al ser el primer árbitro no británico en colegiar la final del Mundial de snooker en 2003. También es el colegiado en activo que más veces ha arbitrado dicho partido, con un total de seis (2003, 2006, 2008, 2011, 2013 y 2017), además de cuatro finales del campeonato del Reino Unido (2005, 2006, 2008 y 2015) u ocho del Masters (1999, 2001, 2002, 2004, 2007, 2009, 2010 y 2019). No solo eso, sino que ha tomado parte directa o indirectamente de los momentos más icónicos en la historia del deporte.
Ente ellos, el décimo 147 en la carrera de Ronnie O'Sullivan. También conocido como break, se trata de la máxima puntuación que se puede lograr en snooker: se consigue al embocar 15 bolas rojas, con sus 15 negras, y posteriormente los seis colores. El 20 de septiembre de 2010, O'Sullivan iba camino de conseguir el décimo break televisado de su carrera pero, al descubrir que no había un premio adicional por conseguirlo, decidió darle la mano a su oponente Mark King. En el snooker, existe la regla no escrita de no humillar al rival si no hay necesidad. Sin embargo, Verhaal convenció al billarista británico de embocar la negra para así conseguir el récord personal. "Hazlo por tus fans", le dijo.
Paul Collier (Gales)
Paul Collier ha arbitrado en tres ocasiones la final del Campeonato Mundial de snooker (2004, 2016 y 2021). Con el añadido de haber sido el árbitro más joven en haber dirigido dicho partido, ya que tenía únicamente 33 años cuando fue seleccionado para tal honor por primera vez. Aquel choque enfrentó a O'Sullivan contra Graeme Dott, con victoria para el primero por 18-8.
Curiosamente, poco después, se retiró del tour debido a la baja remuneración del mismo. Un desencanto que le duró hasta 2011, cuando volvió a arbitrar habitualmente, con el añadido de ser nombrado también Director de Torneo. Desde su regreso, ha sido uno de los colegiados más destacados del panorama.
Olivier Marteel (Bélgica)
La internacionalización del snooker se puede presenciar en la figura de Olivier Marteel. El belga fue el segundo árbitro continental en ser elegido para dirigir la final del Campeonato Mundial, por detrás de Verhaas. En total, ha arbitrado dicho encuentro en dos ocasiones: 2015 y 2022. La figura de Marteel trascendió de su puesto durante la pandemia del Covid-19. Sanitario de formación, estuvo en primera línea trabajando como enfermero en un hospital de Veurne. Presentándose, además, como voluntario para trabajar en urgencias, cuando su puesto habitual es en radiología.
Marteel se hizo viral en 2023 al detener a una manifestante del grupo Just Stop Oil que pretendía sabotear un encuentro del Campeonato del Mundo de snooker. La intención de la activista era arrojar unos polvos naranjas sobre la mesa de billar que impidiesen que se pudiese desarrollar el juego, algo que por ejemplo también realizaron en Wimbledon. Mientras que el partido entre Robert Milkins y Joe Perry tuvo que ser detenido por esta razón, y la sesión del día cancelada, la rápida actuación de Marteel en la mesa en la que estaban jugando Mark Allen y Fan Zhengyi hizo que no se hubiese que suspender el juego.
Labores de un árbitro de snooker
Fundamentalmente, un árbitro de snooker es el encargado de velar para que una partida se desarrolle en las condiciones adecuadas. Antes del partido, entre sus tareas está el asegurar que cada uno de los jugadores posean a su alcance todo lo necesario para poder concentrarse únicamente en el juego.
Durante la partida, su tarea más crítica es la de recolocar las bolas en la mesa. También, claro, juzgar los movimientos de los jugadores. Especialmente, en casos en los que pudiesen haber tocado una bola de manera involuntaria o incurrir en el llamado doble golpe, esto es tocar dos veces la misma bola en un mismo tiro. Por ello, su posicionamiento respecto a la mesa es clave. Anticipando el lanzamiento que va a intentar el billarista.