Las principales diferencias entre el kayak y una piragua

España es una potencia mundial en piragüismo. Así lo demuestra cada cuatro años, cuando en los Juegos Olímpicos el medallero español frecuentemente se ve engrosado con varios metales procedentes de la disciplina acuática. Sin embargo, pese a los éxitos conseguidos, se trata de un deporte tremendamente desconocido entre el gran público. Incluso en sus matices más básicos, como lo es la diferencia entre una piragua y un kayak.

Es una confusión lógica, ya que en muchas ocasiones se utilizan como palabras sinónimas. De hecho, en cierto modo, el lenguaje permite utilizar una u otra de forma indistinta, porque ambas se refieren al mismo tipo de embarcación. Fundamentalmente, porque el kayak es un tipo de piragua. Aunque, al menos en un contexto deportivo, no todas las piraguas son kayaks.

Para entendernos: una piragua es una embarcación larga y ligera que se utiliza para recorrer una superficie acuosa. Una definición que bien podría englobar al kayak. El piragüismo, por tanto, es la disciplina deportiva que utiliza este tipo de vehículos para competir. En deporte, piragua se trata, por lo tanto, de la palabra general. En los Juegos Olímpicos, la competición de piragüismo se diferencia entre kayaks y canoas. Según el tipo de barca y la posición del palista.

Así lo refrenda la Fundéu, que aclara: "El término piragua, de origen caribeño según el Diccionario de la Real Academia Española, abarca los dos tipos de embarcaciones usadas tanto en el canotaje esprint como en el de eslalon: kayak (un término de origen esquimal cuyo plural es kayaks) y canoa (de origen taíno)".

El lío semántico proviene del origen del significado de las palabras. Motivo por el cual la propia Fundación del Español Urgente lo remarca en su aclaración. Piragua es una palabra de origen español. El término que se utilizó en nuestro país para darle nombre a ese tipo de embarcación que se utilizaba, fundamentalmente, en Centroamérica. Por su parte, kayak es una palabra de origen Inuit, esto es de los distintos pueblos que habitan en las regiones árticas de América del Norte. Mientras el resto del mundo adoptó la palabra kayak de forma masiva, en España y regiones castellanohablantes se utilizó piragua. Aunque, en la mayoría de ocasiones, estaban hablando de lo mismo.

Sí que existen diferencias entre el kayak y la canoa. Al menos, en términos deportivos. Estos se fundamentan, sobre todo, en la posición del palista. También, en la herramienta que utilizan para propulsarse sobre el agua.

En el kayak, el piragüista va siempre sentado y muy cerca del agua. De hecho, se trata de una embarcación mucho más cerrada, por lo que los palistas deben utilizar una pala de doble filo, que poder utilizar a ambos lados de la embarcación sin tener que mover su cuerpo en exceso. En los JJ.OO existen competiciones de kayak de uno, dos y cuatro tripulantes.

Por su parte, la canoa es una embarcación mucho más abierta. Pese a que el deportista también puede ir sentado sobre ella, por norma general va en posición semisentada, con una rodilla apoyada en el fondo. Por su parte, la pala que utiliza posee un único filo, con el que va remando a un lado y otro de la barca. En los Juegos se puede competir en canoas individuales o por parejas.