Francis Ngannou regresa por todo lo alto a las MMA: campeón de PFL tras noquear en un asalto

Con lágrimas en los ojos y el recuerdo de su hijo, fallecido en julio con 16 meses, Francis Ngannou emocionó a todos los aficionados de las MMA tras su regreso a una jaula 1.001 días después. El camerunés, de 38 años, se estrenaba en su nueva empresa, PFL MMA, y lo hizo de la mejor manera posible: victoria y título. Renan Ferreira, campeón de la empresa, sucumbió en el primer asalto después del poderío en el ground and pound del africano. De este modo, Ngannou se proclama campeón de PFL.

Su triunfo va mucho mas allá del nuevo cinturón logrado en el segundo evento 'Superfight' que PFL organizó en Arabia Saudí. La última vez que Ngannou estuvo en una jaula fue en enero de 2022. Aplastó a Ciryl Gane y demostró que era el mejor peso pesado de la UFC. Su triunfo provocó una renovación automática de su contrato con la compañía, pero él quería mejores condiciones. La UFC se las ofreció, pero Francis perseguía dinero y mejorar las condiciones laborales de sus compañeros. Ante la negativa no dudó en dejar correr el tiempo, ayudado por una lesión en la rodilla que precisó operación, hasta acabar siendo agente libre. Antes de que se produjese el hecho la UFC le liberó, pero fue él quien no quiso seguir.

La búsqueda de una nueva casa le llevó a PFL, quien acabó comprando Bellator meses después. PFL MMA quiere ser la alternativa a UFC. Quitarle a uno de sus mayores activos era un gran golpe de efecto. Ngannou logró las condiciones que quería y firmó con ellos. Elegiría el sueldo de sus rivales, mejoraría las condiciones médicas de todos los peleadores bajo esa marca y empezaría un proyecto en África para buscar nuevo talento. Por si fuese poco, PFL le dejaba boxear. El sueño de Ngannou era ese y lo cumplió ante Tyson Fury y Anthony Joshua. La primera pelea provocó la segunda, pero tras ser noqueado por AJ era momento de regresar a las MMA.

Renan Ferreira esperó con paciencia su oportunidad. En febrero noqueó al campeón de Bellator Ryan Bader y se citó con Francis. La pelea se demoró, pero acabó sucediendo este sábado en Riad (Arabia Saudí). Había dudas con el desempeño del camerunés, pero pronto las hizo desaparecer. Ngannou se midió con Ferreira arriba, pero ambos iban con cautela debido al poder que tienen en sus manos. Consciente de ello, el africano llevó la pelea al piso, lugar en el que había mostrado su mejoría ante Gane, y empezó a trabajar. Ferreira casi le sorprende con una sumisión, pero salió y acabó colocando al campeón de PFL para que recibiese una importante golpiza en el ground and pound. El árbitro tardó varios segundos en parar la pelea. Se equivocó porque Ngannou estaba de vuelta demostrando todo su poderío.

Al acabar la emoción casi no dejó hablar a Ngannou, quien además de recordar a su hijo y agradecer el apoyo recibido no precisó cuál quería que fuese su futuro. Tras su paso por el boxeo tiene el futuro económico resuelto con creces, pero el legado en las MMA debe cimentarlo en la jaula. Fuera de UFC es más complicado todo, pero él no cejará en su empeño. Se fue siendo el número uno en la empresa líder y llega en la misma posición, aunque en diferente lugar.

En el combate coestelar de la noche la gran protagonista fue Cris Cyborg, quien ganó el duelo de campeonas, en el peso pluma, a Larissa Pacheco (había sido monarca de PFL). El pleito fue muy interesante. Cyborg comenzó mejor trabajando y dañando a su compatriota, pero Pacheco sorprendió a Cyborg con una mano recta que la mandó al suelo en el segundo asalto. Esa acción volvió a ambas más cautelosas y es ahí cuando todo cambió. Cyborg comprendió que debía ser inteligente y no arriesgó. Estaba cortada en los dos ojos, no podía jugársela. Dominó en distancia. Cada vez que entraba era para percutir y salir. Hizo un trabajo perfecto que le dio para vencer por decisión unánime (triple 49-46).

En el tercer combate en importancia de la noche, Johnny Eblen retuvo el Campeonato de Bellator del peso medio ante Fabian Edwards, quien vio como fue anulado durante cuatro asaltos y sólo pudo salir de esa presión asfixiante en el último round cuando tenía todo perdido. El estadounidense se impuso en las cartulinas de los jueces por triple 48-47.