Aspinall regresa al lugar en el que su vida cambió: "Tengo mucho que demostrar"

Tom Aspinalltenía la flecha para arriba hace un año. El inglés estaba empezando a convertirse en una auténtica sensación en su país. Conectaba con el público y su estilo valiente hacía que nadie quisiese perdérselo. Sabiendo la receta, en marzo de 2022 la empresa le dio su primer estelar en Londres. Maravilló a los suyos gracias a una tremenda finalización sobre Volkov. Seguía su ascenso imparable.

Meses después, en julio, UFC repitió el plan. Aspinall se iba a enfrentar ahora a Curtis Blaydes. Una victoria le pondría con nueve victorias al hilo (seis en UFC) y le situaría como un contendiente al título. Todo se quebró esta noche de verano en el O2 Arena de Londres. Al dar una patada, el inglés se rompió el ligamento cruzado y el menisco.

La recuperación, como sucede en este tipo de lesiones, ha sido larga, pero las MMA siempre dan una segunda oportunidad. Ha tardado un año, pero UFC le ha puesto en el mismo lugar. Este sábado, en el mismo evento en el que pelea Joel Álvarez y Dani Barez, Aspinall volverá a estelarizar un show en el O2 Arena. En esta ocasión le tocará enfrentarse a Marcin Tybura y el título no estará en la siguiente pelea, pero un triunfo le acercará de nuevo al objetivo.

"Estoy deseando corregir ese error. No podía estar más contento de estar en el mismo lugar en el que ocurrió todo. Tengo mucho que demostrar. Creo que Tom Aspinall antes de la lesión después son dos personas diferentes. Antes todo iba bien y estaba como loco por todo… No me di cuenta de lo mucho que me gustaba este deporte y lo mucho que quería hacerlo hasta que me lo arrebataron. No tenía ni idea de cuanto ansiaba la grandeza hasta que me la quitaron. Ahora me levanto cada mañana y estoy deseando ir al gimnasio", apuntó el inglés en una entrevista en BT Sports tras confirmarse su regreso.

Aspinall llega confiado y su poder finalizador hace que cualquiera apueste por él. 11 de sus 12 victorias han sido en el primer round y ese triunfo que pasó de ese límite finalizó en el segundo asalto. Un 75% de triunfos KO hace que confiar en él sea casi obligación. Tiene 30 años y si se ha recuperado bien está en la edad perfecta para reengancharse dónde se quedó. Tybura, de 37 años, es el número 10 del ranking. El polaco tiene pegada, se defiende en el suelo, pero sobre el papel, y en igualdad, el local debe partir como favorito. La clave, la recuperación. Tybura viene de ganar a Romanov e Ivanov, pero se le empieza a notar el paso del tiempo. Querrá reivindicarse, al igual que su oponente. El nuevo Aspinall está de regreso.