Poirier vs Gaethje: una revancha para sustituir a Masvidal y mirar al título del ligero
Dustin Poirier y Justin Gaethje se verán las caras cinco años después de su primer combate. El ganador alzará el cinturón BMF de UFC y pondrá el título en su horizonte.

Si la UFC tiene que quedarse con una pelea del año 2018 lo haría con el eléctrico duelo en el que Dustin Poirier derrotó a Justin Gaethje (el primero ganó por TKO en el cuarto asalto). Ese pleito fue nombrado Combate del año y cinco años después todavía se sigue recordando. La gran batalla que ambos regalaron al público hizo que siempre la opción de una revancha sobrevolase a los dos… pero el momento tardó en llegar, hasta este sábado en el UFC 291.
Aquel 14 de abril de 2018, Poirier y Gaethje se enfrentaron en el estelar de un fight night. En esa ocasión también cerrarán la noche, pero lo hacen en un PPV. Los dos han crecido mucho en este tiempo y la UFC lo ha premiado. Además, estando la división en punto muerto se han sacado de la manga el recuerdo del Campeonato Baddest Mother Fucker (BMF). El cinturón fue creado para el duelo entre Jorge Masvidal y Nate Díaz (2019). La retirada de Masvidal provocó que el cinturón quedase vacante y lo hayan querido recuperar para esta ocasión.
"Es un cinturón para vagabundos", apuntó Islam Makhachev, campeón del ligero al conocer la noticia. "No son dignos de él", afirmó Nate Díaz. El regreso del BMF no cayó demasiado bien dentro de UFC. Lo cierto, es que anécdotas aparte, que este título no deja de ser eso, el combate genera mucha expectación y al estelarizando un evento un reclamo extra no viene mal. En la anterior ocasión el título se puso en juego en el welter y esta vez será en el ligero. Comparando contendientes, la actitud de Poirier y Gaethje dista mucho de la de sus antecesores… pero el negocio es el negocio. Había que colocarlo y lo hicieron.
Fuera de la polémica, la pelea servirá para ordenar la división. Charles Oliveira dio una exhibición en el UFC 289 y tendrá la oportunidad titular frente a Makhachev en octubre. Poirier y Gaethje, por tanto, alzarán la mano para enfrentarse al vencedor. Los dos llegan en buena dinámica. El primero ha ganado cuatro de cinco pleitos desde que cayó contra Khabib y el segundo dos de tres teniendo en cuenta el mismo luchador. Son dos hombres con pegada y que no se guardan nada, la guerra está asegurada. Poirier podría partir como favorito por números y porque dos de esas victorias son ante McGregor, pero ahora mismo el irlandés es más nombre que rival. Gaethje querrá revancha sabiendo además que si pierde el título se alejaría demasiado. Es un 50-50, el ganador será el fan. El espectáculo está garantizado.