El caos con los visados provoca la alarma para el estreno de MotoGP en India
Marc Márquez es uno de los muchos damnificados que esperan en estos momentos el permiso para poder viajar al gigante asiático.

Greater Nodia (India)-. Este martes a primera hora Marc Márquez ha subido una historia a su cuenta de Instagram subido en su bicicleta de montaña y con la frase: "Vuelo retrasado por falta de visado para #IndiaGP. Así que nos vamos a pedalear un ratito". Un recorrido por la madrileña Casa de Campo cuando el campeón español debía de estar iniciando su viaje hacia Nueva Delhi para el Gran Premio de India que se va a disputar este fin de semana en el Buddh International Circuit, la novedad del calendario 2023 del Mundial de motociclismo.
En realidad, este mensaje de Márquez no ha hecho otra cosa que terminar de dar forma a lo que venía siendo un runrún en el paddock: el caos con la emisión de los visados exigidos por el gigante asiático. Una cantinela que estaba colapsando los grupos de WhatsApp y que estaba suponiendo un auténtico quebradero de cabeza para los coordinadores de los distintos equipos, no sólo del Repsol Honda, y también de muchos de aquellos que se los tienen que gestionar por su cuenta (entre ellos algunos de los pocos periodistas que van a cubrir el estreno de India, o personal del equipo médico que sigue al campeonato).
Así que, repartidos por distintos aeropuertos del mundo, principalmente de Europa, muchos de esos afectados esperaban la llegada de esas visas, con muchas pérdidas y cambios de vuelos y con la incertidumbre de saber cuántos no llegarán a tiempo o cuántos incluso renunciarán a viajar. Escuderías como el Aspar Team o el GasGas de MotoGP habían recibido este domingo la mayoría de esos visados, aunque no todos, y otros como el citado oficial de Honda, el Tech3 de Moto3 o el Red Bull KTM de MotoGP (en este caso más de 40 de sus trabajadores), esperaban aún este martes a recibir noticias sobre si podían desplazarse o no hasta Nueva Delhi. Y con casos como el del segundo de la general, Jorge Martín, que recibía la documentación una hora antes de salir.

Un retraso relevante, a falta de que se concrete en qué quedará, porque los equipos empiezan a montar sus boxes los miércoles (cuando se les reparten las cajas que se utilizan para los desplazamientos transoceánicos), esto de cara a un fin de semana en el que habrá trabajo extra por ser el de Buddh un circuito inédito para el Mundial. En cualquier caso, la asociación de equipos, IRTA, ya había comunicado este martes a los afectados que se iban a hacer cargo de los costes extra por cancelaciones o cambios de vuelos, mientras que el promotor, Dorna, había tratado de pedir ayuda a la embajada española, aunque la tramitación de las visas se estaba haciendo a través de una empresa externa (que alega en estos momentos estar sobrepasada), por lo que esa vía no ha dado resultados.
Este miércoles, Márquez tenía programada una cita comercial junto a su compañero de equipo Joan Mir en los cuarteles generales de Honda en el país asiático, a las dos de la tarde hora local (tres horas y media más que en la Península), evento al que no podrán acudir. Esto mientras se cruza los dedos para que los retrasos no sean mayores, porque el trabajo en pista va a ser mayor en este fin de semana. En Japón el año pasado no se disputaron los primeros libres por la imposibilidad de que todo el material llegase a tiempo (esta prueba iba enlazada con la de Aragón), y antes en Argentina se canceló la jornada del viernes por unos problemas con los aviones de carga que viajaban desde Indonesia.
Una homologación, aún pendiente
Pero una cancelación parcial de la actividad en pista supondría un problema mucho mayor en esta ocasión. El viernes Moto3 y Moto2 van a contar con media hora más de entrenamiento (dos sesiones de 50 minutos y dos de 55, respectivamente); y MotoGP con 35 más (dos prácticas de 70 minutos). Parece impensable que pueda llegarse en condiciones al sábado si no pudiese aprovecharse ese primer día.
Y el jueves será también relevante porque va a ser cuando se examine al detalle la pista, y cuando se homologue, aunque en realidad este un procedimiento que está estandarizado para cualquier circuito. El día previo al arranque de la actividad se homologa, algo por lo que tiene que pasar cada año cada circuito. En cualquier caso, Loris Capirossi, expiloto de MotoGP y actualmente responsable de seguridad, lleva toda la semana examinando Buddh, e incluso ha podido rodar con una moto para cerciorarse de que, al menos, esa parte va a estar lista.