Álex Márquez se crece tras el primer duelo entre hermanos: "El pique de coña con Marc se ha acabado"

Marc Márquez ya celebraba ser el líder de la primera práctica de la temporada cuando su hermano Álex llegaba y marcaba la pauta en los últimos compases de la segunda sesión de este viernes. Una repetición, pero al revés, de lo que pasó en la última jornada de test de pretemporada en Buriram cuando el de Gresini estuvo liderando prácticamente toda la jornada de entrenamientos, pero en el último suspiro llegó su hermano y acabó arrebatándole la posición de honor.

El pequeño de los hermanos ya sabe lo que es liderar, de hecho lo lleva haciendo desde el primer test en Barcelona. En esta ocasión, con más valor si cabe, ya que comenzar la temporada de esta manera siempre es un plus, a pesar de que las sensaciones para el ilerdense no han sido del todo buenas. "Fue un día estresante. Fue un día bueno por la posición, porque acabamos primeros, pero no fue el mejor día en cuanto a las sensaciones. Probamos cosas y creo que en eso fuimos demasiado optimistas, porque me siento mejor con mi base. Tengo la velocidad pero me falta ritmo", reconocía.

Desde el primer test en Barcelona, el de Cervera reconoció haberse sentido muy cómodo con la GP24, lo que se ha acabado resolviendo en velocidad en pista que le colocan como uno de los pilotos más rápidos en este inicio de temporada. "Ser rápido en pretemporada te da confianza; ser primero el primer día de colegio te da calma. Y confirmas muchas cosas que has hecho en el test. Entonces, me da tranquilidad, me da calma, pero sé que queda mucho trabajo por delante y que si miras ahora la clasificación del campeonato seguimos con cero puntos", resumía.

La temporada ha comenzado de la mejor manera posible para los dos hermanos, que ya se postulan como los grandes favoritos para llevarse la victoria este fin de semana. Aunque en el caso del piloto de Gresini prefiere mantener los pies en el suelo. "Me falta mucho, sobre todo comparado a Marc. Si al final miras a los demás, pues podemos estar bastante a la par, pero Marc es el único capaz de hacer 1:29 cuando quiere. Hablando claro es así. Intentaremos esta tarde analizar y ver dónde marca más la diferencia para poder ser... la velocidad creo que la tenemos, sobre todo, ser más consistentes y que no caiga tanto el ritmo", confesaba.

El pique entre los hermanos lleva arrastrándose desde el test de Barcelona cuando Álex acabó por delante de su hermano. Entonces, el octacampeón dedicó una peineta a su hermano, una acción que volvió a repetirse en Sepang cuando el pequeño volvió a liderar frente al de Ducati Lenovo. En caso de que este fin de semana se repita, Álex lo tiene claro.

"El pique ese de coña creo que se ha acabado; ahora, cuando llegue lo serio, cada uno intenta ir a por faena. No sabía ni que había hecho primero, honestamente, porque en la última curva he encontrado tráfico, he encontrado tres pilotos superlentos y he tenido que adelantar a Miller, porque casi le doy por atrás. Ahí pensaba que había perdido muchísimo, pero he pasado por meta y he visto '1:29.0'. Entonces, estoy contento, pero no he pilotado como a mí me gusta. Mañana hay que intentar ser más consistentes, más sólidos y dar otro paso", concluía.