El error de Marc Márquez se fue fraguando durante el fin de semana y no lo supimos ver

Cuando Marc Márquez llegó el pasado jueves a Austin tenía claro que todas las miradas estarían puestas encima de él. Después de un inicio de temporada soñado con victoria en las dos primeras citas, el catalán llegaba a su circuito fetiche, el mismo que le ha visto descorchar el champán de la victoria en siete de sus nueve visitas y el que estaba destinado a ser un nuevo escenario de victoria para el catalán. Sin embargo, en su interior había una espina que impedía al ilerdense quitarse de la cabeza la carrera de 2019, cuando se fue al suelo mientras lideraba, lo mismo que ocurría este domingo.

Durante la rueda de prensa oficial del jueves en la que Marc llegaba como líder y protagonista absoluto, el octacampeón lanzó el primer matiz de lo que acabaría siendo una especie de premonición. "Las expectativas van subiendo de carrera en carrera y los resultados ayudan a calmar las expectativas. Pero no es mejor tener altas expectativas sobre ti y dudas. He hablado de 2019 y el único error. Siempre trato de pensar de manera negativa para evitar los problemas que puedan surgir con esos excesos de confianza, que quizá puedan generar una situación que no nos gustaría. Vamos a ver cómo empezamos y cómo van los rivales y veremos", reconocía.

Entonces, el de Cervera hizo referencia a 2019, un año que recuerda mucho al que está protagonizando el piloto catalán esta temporada y en el que uno de sus pocos ceros fue en el trazado americano, precisamente, uno de los escenarios que siempre se presupone será territorio Márquez. Después de ello, el de Ducati Lenovo sumó su primera caída del curso encima de su Desmosedici oficial.

El sábado, después de conseguir su tercera pole consecutiva y la tercera victoria al sprint, Márquez volvió a hacer referencia a lo único que podría evitar que ganase en COTA, una caída. Durante la carrera de este sábado, el catalán tuvo un susto en la primera vuelta que por poco no termina en un cero más en su casillero. A pesar de ello, el ilerdense supo reponerse y vencer su tercera sprint del curso. Sin embargo, al acabar hizo una segunda reflexión que bien podía ser otro mensaje premonitorio de la carrera de este domingo.

"Soy muy consciente de que llegará el día, y puede ser mañana, y si es mañana lo tenemos que entender, puede ser en Catar, en Jerez, donde sea, pero es imposible estar primero en todas las poles, en todas las Sprint y en todas las carreras", reflexionaba acerca de la posibilidad de que pronto llegase su primer error. Algo que se presuponía complicado en un circuito que históricamente ha jugado muy a favor del octacampeón pero que en las dos últimas temporadas ha abierto una especie de historia de amor-odio que pretende resolver en el futuro.

Sea como fuere, lo que es seguro es que, pese a la caída, la carrera de este domingo en COTA volvía a llevar el nombre de Marc Márquez en el trofeo de ganador. El catalán logró salir vencedor en la primera curva para ponerse a liderar y comenzar su particular caza de brujas. Vuelta a vuelta el ilerdense había abierto una clara diferencia con sus rivales, pero un error a falta de diez vueltas acabó impidiendo un hat-trick del piloto catalán esta temporada, a pesar de sus intentos por volver a carrera.

"Lógicamente, he perdido, he cometido un error y lo único que queda es pedir disculpas. Pero lo seguía repitiendo, son milésimas de segundo, son bajadas de tensión, bajadas de concentración y estaba muy concentrado, tenía muy claro lo que tenía que hacer en carrera, pero cortando un poquito más ese piano es donde perdí, era uno de los puntos fuertes míos en este circuito, significa riesgo, pero quizá la lluvia... Aun así, creo que ya había cortado varias vueltas, me he caído, ayer no era superman, y hoy tampoco es un desastre, simplemente son errores que se tienen que aprender, lo positivo es que estoy cometiendo un gravísimo error, estamos segundos en el campeonato, a un punto de líder", concluía en modo reflexión este domingo.