Jorge Lorenzo reaviva el debate sobre un futuro de Marc Márquez fuera de Honda, ¿qué hay detrás?

Durante el Gran Premio de España disputado en Jerez, Jorge Lorenzo concedió una entrevista al portal oficial del campeonato en formato Carpool -con el entrevistador conduciendo y el entrevistado de copiloto-, un modo informal de charlar, en este caso en una especie de juego de predicciones. ¿Cuándo vivirán los humanos en otro planeta? ¿Cuándo nos sustituirá la Inteligencia Artificial? ¿Quién será el próximo campeón de MotoGP, que no sea Pecco Bagnaia? ¿Quién una futura súper estrella de la clase reina? ¿Correrá Marc Márquez con otra fábrica?

Y esta última cuestión, y su respuesta, ha relanzado un asunto que se lleva tiempo comentando por el paddock del Mundial, y que abonó el propio Márquez el pasado año en su visita a Austria cuando todavía estaba recuperándose de su última operación de hombro. Allí dijo que quería volver a ganar, en Honda o fuera de Honda. "Sí", contestaba rotundo Lorenzo a la pregunta sobre el tema, con una segunda respuesta igual de contundente a la repregunta de dónde. "Creo que en Ducati. Con la oferta no estará muy contento, pero la aceptará".

El mallorquín no predecía, porque no olvidemos que esto va de predicciones (en una acción de un patrocinador implicado en esto, de hecho), en el lugar de qué piloto, o si en una estructura oficial y satélite. "Tras tres o cuatro años sin ganar su motivación será la de volver a hacerlo otra vez. Tendrá 31 o 32 años, los jóvenes aprietan, pero Marc Márquez es Marc Márquez", razonaba, una declaración con suficiente atractivo como para seguir abonando el debate.

Porque Honda sigue sin reaccionar, y Márquez sigue siendo considerado como el mejor piloto de la parrilla, así que es normal que se quiera pensar en que algo tiene que hacer en su futuro para no terminar lastrado por su marca. Y, obviamente, Ducati cuenta con el atractivo de ser la moto dominadora, con dos apuestas potentes en el pasado (también en lo económico) que no terminaron de fructificar, nada la de Valentino Rossi, y quizás por falta de tiempo la del propio Lorenzo.

Para añadir material a este tema (y la llegada de Alex Márquez a la casa italiana alguno ya la quiso ver como un paso previo) hay que escuchar también lo que Ducati tiene que decir, y lo ha hecho por boca de su máximo responsable, Gigi Dall'Igna, que en una charla con los compañeros del portal especializado italiano GPOne valoraba si esta posibilidad es realizable o no.

"Primero de todo, no creo que Marc aceptase ir a un equipo no oficial. Es una estrella y normalmente las estrellas quieren ser tratadas como estrellas. Esta es la primera consideración", señalaba Dall'Igna, sobre esa idea de correr para una escuadra satélite.

"La segunda consideración es que, en su regreso, tras varios grandes premios de inactividad, se ha caído, pero ha hecho una carrera buenísima con la Honda, algo que sólo los grandes campeones pueden hacer. Así que yo esperaría antes de decir que Marc y Honda se separarán a final de 2024, no lo doy por hecho. Creo que existen todas las posibilidades para que todavía lo puedan hacer bien juntos, y después se verá. Dicho esto, nosotros, sinceramente, estamos contentos con los pilotos que tenemos en estos momentos", añadía, poniendo en espera lo que pueda hacer Enea Bastianini, lesionado desde principio de año, y valorando lo mostrado el año pasado por Bagnaia.

"Hizo cosas estratosféricas con nuestra moto, se recuperó de una situación objetivamente difícil, logró la mayor remontada en la historia de MotoGP, logró cuatro victorias seguidas, hizo cosas que sólo un gran campeón consigue hacer. De aquí a 2024 van a pasar muchas cosas y todo puede suceder".

Y es que el millonario contrato de Márquez con Honda no vence hasta finales del año que viene, aunque algunos hasta se lanzasen a la piscina de prever una ruptura prematura de esa relación, algo muy complicado de creer.

Porque la posibilidad/sueño de que Márquez cambie de aires ya se había puesto antes sobre la mesa. En otra fábrica que brilla en estos momentos, KTM, aunque su propietario, Stefan Pierer, quiso ser muy claro con eso. Si el astro español llegaba a su fábrica y ganaba el título, el mérito sería suyo y no de la moto, algo que el orgullo austriaco no quiere contemplar.

Dicho esto, y si la situación de Honda no mejora, es seguro que este asunto volverá a sobrevolar MotoGP, en un mercado de pilotos en el que se moverán piezas en este 2023, pero que promete ser muy activo en 2024, cuando los contratos de los pilotos punteros vencerán.