MOTOGP

Marc Márquez roza los 600 días sin ganar en el Mundial

Si logra la victoria este domingo en Mugello habrían pasado 595 días desde su anterior triunfo, también en Italia.

Marc Márquez, este año tras una carrera con Honda. /Reuters
Marc Márquez, este año tras una carrera con Honda. Reuters
Borja González

Borja González

Circuito de Mugello (Italia).- Marc Márquez corrió su primera carrera en el Mundial de Motociclismo el domingo 13 de abril de 2008, en el Circuito de Estoril, en Portugal, con una KTM de 125cc pintada con los colores de Repsol, en un equipo en el que tenía a Tito Rabat como compañero. Era la tercera cita de esa temporada y se había perdido las dos primeras (en Qatar y Jerez) por una lesión. Márquez terminó decimoctavo en un día en el que ganó Simone Corsi, con Joan Olivé segundo y Nico Terol tercero.

En 2009, en Jerez, logró su primer podio, un tercer puesto. Y tuvo que esperar hasta 2010 para volver a subir a un cajón: tercero otra vez en la cita inaugural en Qatar y tercero de nuevo en el tercer gran premio, el de Francia. Ahora con una Aprilia vestida de Derbi, dentro de la estructura de Aki Ajo y como único piloto. Y en el cuarto, precisamente en Mugello, escenario de la prueba de este fin de semana del Mundial, subió a lo más alto del cajón. Victoria por 0.039 milésimas sobre Terol, 0.116 sobre Pol Espargaró. La primera de cinco consecutivas, la primera de una carrera meteórica.

Entre su debut en Portugal y aquel domingo 6 de junio habían pasado 784 días. A partir de ahí, la 'peor' racha del 93 fue la de estar cuatro fines de semana seguidos sin subir a lo más alto del cajón, entre la prueba de cierre de aquel 2010 en Valencia (fue cuarto, lo que necesitaba para llevarse el título de 125cc), y su estreno en lo más alto de un podio en Moto2 en 2011, en el cuarto gran premio, disputado en Francia: 196 días. También en 2016, ya en MotoGP, no fue capaz de ganar ni en Austria, ni en República Checa, ni en Silverstone, ni en Misano. Otros cuatro grandes premios, 70 días.

Así que estas malas rachas terminan pareciendo una broma si se comparan con las dos más largas, si excluimos la que vivió entre debut y primer triunfo, que son las dos últimas que ha vivido: la primera la de los 581 días que transcurrieron entre su victoria en la última carrera de 2019, en Valencia, y la que logró en Alemania en 2021. Entre medias, la lesión que ha marcado todo este periodo, la que se produjo en julio en Jerez en la cita inaugural de la extraña campaña 2020, la de la pandemia. Un incidente físico con varios capítulos al que se ha sumado la mala situación de Honda.

A finales de ese 2021, en el Circuito de Misano, en el segundo gran premio que se disputó ese año en ese trazado (bajo el nombre de Emilia-Romagna), Márquez cruzó la meta en primera posición por delante de su compañero de equipo por entonces, Pol Espargaró. Todo hay que decirlo, en otro domingo de esos con fallo de Pecco Bagnaia, que se fue al suelo cuando rodaba solo en la primera posición. Aquella es, hasta el momento, su última victoria.

Y este domingo (recordemos que los resultados de los sprints no se computan para las estadísticas de podios y victorias) se cumplirán 595 días sin que se le haya visto hacer eso a lo que tan acostumbrados tenía a los aficionados: ganar. Una racha que ya ha superado esos 581 días que transcurrieron entre su penúltima y su última victoria. Eso sí, de nuevo con varias bajas médicas por medio. Márquez llega a un trazado, Mugello, en el que sabe lo que es ganar con la MotoGP, aunque hay que irse hasta 2014, en un escenario que sólo ha visto en lo más alto del cajón a Yamaha (cinco veces) o Ducati (cuatro) en la última década.

En su regreso en Francia, en Le Mans, fue capaz de asomar delante y pelearle el podio a Jorge Martín, aunque muy a su estilo, tan en el límite que terminó por los suelos. Sea como sea, la moto sigue pareciendo un hándicap limitante, aunque tal vez si se cumplen las previsiones meteorológicas y aparece la lluvia a lo largo de estos días, las condiciones puedan permitir que tenga más opciones de no llevar esa racha no victoriosa por encima de los 600 días. Porque la semana que viene en Alemania, uno de sus trazados fetiche (desde 2010 ha ganado siempre que ha corrido allí), llegaría hasta los 602.