MOTOGP

"Estoy en el límite, ya no puedo bajar más": cuando el peso es una obsesión para los pilotos

Aleix Espargaró y Maverick Viñales explican cómo han llevado lo que pesan al límite para tener algo de ventaja en su moto.

Aleix Espargaró, junto a su equipo en el box de Aprilia./EFE
Aleix Espargaró, junto a su equipo en el box de Aprilia. EFE
Borja González

Borja González

Circuito de Losail (Catar)-. Si algo puede percibir alguien que sigue desde dentro y desde hace mucho tiempo el Mundial de Motociclismo es que el nivel de exigencia para los pilotos ha aumentado. Como deporte se ha profesionalizado mucho, y casi se podría equiparar la velocidad del desarrollo tecnológico con la del tipo de preparación que tienen que tener los que se suben a las motos. Sólo hay que chequear las redes sociales para entender cuánto tiempo pasan en un gimnasio, sobre una bicicleta o en las distintas motos con las que se puede afinar la preparación. Un trabajo que incluye cada vez más el lado mental (reconocía hace poco Jorge Martín que ha sido uno de los puntos importantes de su invierno) y, por supuesto, la nutrición.

Pilotos mejor preparados, con una mayor estructuración de los niveles de exigencia a lo largo de un año y lo que esto supone en las cargas de trabajo en sus entrenamientos, pero con muchos todavía obsesionados en algo que siempre ha sido tema en este deporte: el peso. Este viernes, charlando con Maverick Viñales, nos confesaba que este ha sido un punto en el que ha trabajado mucho desde el final de la pasada temporada. "El año pasado estaba con cuatro kilos más que ahora. ¿Que cómo lo hecho? Sin comer. Te lo juro. He pasado hambre". ¿Y qué ha motivado que un piloto que estaba en 68 kilos haya decidido bajar a 64? "Lo he hecho para el consumo de las gomas", explicaba el de Aprilia, que ha pasado de contener un 8 por ciento de grasa en su cuerpo a un 5.2. "De ahí no me dejan bajar ya".

¿Tanto puede influir esto? Es conocido que el peso corporal ha sido una obsesión de muchos pilotos de las cilindradas más pequeñas, donde se nota mucho por la menor potencia de las motos. A principios de este milenio, Manuel Poggiali era famoso porque se le veía corriendo por el paddock cada vez que tenía que ir de un sitio a otro. El sanmarinense vigilaba mucho su dieta, algo que también obsesionó a Bradley Smith, uno de los más altos de la parrilla cuando estaba en 125cc (una obsesión que llegó a ser preocupante). También hay que recordar las polémicas alrededor de pilotos menudos como Dani Pedrosa, Marc Márquez o, más reciente, de Álvaro Bautista en SBK. Aunque nunca ha llegado a ser un tema capital en MotoGP, donde la menudencia se ha considerado ventajosa para algunas cuestiones, pero una desventaja para otras.

Preguntados este jueves Pecco Bagnaia, Jorge Martín y Marco Bezzecchi por esto, ninguno le daba demasiada importancia a esta preocupación de Viñales, aunque es cierto que ninguno de los tres pesa demasiado, y que los tres llevan la Ducati, porque no todas las motos se comportan igual en un aspecto como puede ser ese consumo de neumáticos que mencionaba el de Aprilia. "Claro que puede marcar diferencias al final de una carrera, yo lo he visto con Pedrosa, que pesa 15 kilos menos que yo", comentaba por su parte Brad Binder, piloto de KTM que comparte fábrica con la leyenda española, que ahora es uno de los probadores de los austriacos. "Yo, desde 2019, veo que cuanto más pesas más consumes el neumático", afirmaba por su parte con contundencia Aleix Espargaró, el más veterano de la parrilla y famoso por centrar mucho su preparación en la bicicleta, llegando a compartir sus entrenamientos con profesionales del pelotón.

"Cuando tuve a Scott Redding de compañero de equipo lo vi clarísimo, a mitad de carrera no tenía neumático trasero, porque pesaba ocho kilos más que yo. A Loris Baz le pasaba lo mismo. Siendo más ligero seguramente tienes otras desventajas, pero en el tema del consumo del neumático, que ahora es muy importante por la igualdad que hay, es básico. Y por eso hace tanto tiempo que yo estoy al límite de peso. Yo no puedo bajar más, desgraciadamente. Mido 1'80 y estoy en 65 kilos. Es importante y yo hace muchos años que le doy esa importancia". El de Granollers confiesa que pasa hambre, que no ingiere las calorías recomendadas para un adulto de 34 años, y que tira mucho de suplementación y de tomar cafés. Pero que es algo que necesita.

"Lo que tengo muy claro es en aceleración cuánto implican un par o tres de kilos. Es fácil ver la masa que mueve la moto. Y en el desgaste del neumático es realmente complicado medirlo, pero lo que está claro es que cuanto más pesas, más gastas el neumático, porque más cargas el tren trasero, y cuando aceleras las inercias son mucho más bruscas, lo que se transforma en un consumo de neumáticos más acelerados. Cuantificarlo es difícil, pero estar en el límite del peso ayuda". Una cuestión a la que, aunque no la verbalicen todos de la misma manera, todos atienden, sobre todo los que sienten que su envergadura natural puede terminar siendo una desventaja. O, como Viñales, los que creen que llegar a ese límite físico puede dar ese extra tan buscado en este igualadísimo MotoGP.