PÁDEL

Los bombarderos, la sonrisa de Paquito y el reloj de la discordia

Tapia-Coello y Sánchez-Josemaría se han proclamado ganadores de un Open de Bruselas que ha dejado unos auténticos partidazos.

Agustín Tapia celebrando un punto en Bruselas./WPT
Agustín Tapia celebrando un punto en Bruselas. WPT
Álvar Madrid

Álvar Madrid

Hay una pareja que está por encima del resto. Arturo Coello y Agustín Tapia son unos extraterrestres. Llevan pleno de torneos conquistados esta temporada, seis de seis. Han firmado 27 partidos consecutivos ganando y en el próximo torneo pueden aspirar a quitar el número uno a Juan Lebrón y Ale Galán. Hoy han levantado al cielo de Bélgica el Open de Bruselas ante Martín Di Nenno y Franco Stupaczuck.

Los Superpibes arrancaban el partido desplegando todo su juego. Comandados por un valiente Martín Di Nenno se ponían por delante en el marcador hasta que en el noveno juego, Coello y Tapia les devolvieron la rotura para que el primer set se fuera al tie break donde los número uno de la RACE sacaron el rodillo para poner el 7-1 en 57 minutos. El segundo set nos deparaba algo extraordinario este año. Los bombarderos perdían su tercer set en lo que llevamos de temporada. Martín y Franco dieron con la clave para incomodar a sus rivales y poner el 6-3 en el tanteador. En el tercero y definitivo, Tapia-Coello volvieron a mostrar su mejor versión ante unos combativos Superpibes que estiraron el chicle hasta donde pudieron sus fuerzas. En dos horas y doce minutos los bombarderos cerraron un partido que les hacía levantar su sexto título WPT de la temporada.

Arturo y Agustín no son conscientes de lo que están logrando, así lo reconocía el propio Tapia en los micrófonos de WPT: "No me hubiese imaginado nunca hacer un comienzo de año así". Coello también se mostraba muy feliz pese no hacer su mejor partido: "Hoy hemos sacado un partido durísimo. He empezado un poco dubitativo, pero estamos muy felices. Es maravilloso poder jugar al lado de Agustín".

Ari y Paula consiguen su tercer título consecutivo

Una batalla de más de tres horas. La final femenina más repetida de la historia de la competición. Una remontada que quedará en la retina de los aficionados. En definitiva, ha sido una demostración de resiliencia de Ariana Sánchez y Paula Josemaría que han conseguido en Bélgica su cuarto título de la temporada ante Alejandra Salazar y Gemma Triay.

La final la empezaron perdiendo, pero en una demostración de coraje y garra, la pareja número uno ha tirado de épica para llevarse un partido que se les complicaba mucho después de arrancar el primer set por debajo en el marcador (6-7). En el comienzo de la segunda manga las cosas cambiaron para Ari y Paula que demostraron su mejoría para poner el 6-3 en el luminoso. El partido se iba al definitivo tercer ser, donde dos roturas consecutivas no fueron suficientes para que la pareja uno cerrara el partido con facilidad. Salazar y Triay apuraron sus opciones e igualaron el encuentro, hasta que Sanchez y Josemaría pusieron el definitivo 7-5.

Después del partido, las ganadoras quisieron poner en valor los sacrificios que llevan haciendo toda la temporada: "venimos trabajando muy bien con todo el equipo y se está demostrando en la pista. Sabemos sufrir y luchar. Estamos demostrando un gran nivel", apuntaba Ariana en los micrófonos de WPT. Paula también se mostraba feliz por conquistar por primera vez este Open de Bélgica: "han sido tres horas durísimas. Estamos reventadas tanto física como mentalmente. Ponemos una chincheta en Bruselas que no habíamos llegado nunca a ganar".

El reloj de Álex Ruiz

Ronda de cuartos de final, partido entre Tello y Álex contra Momo y Sanyo. 6-1 en el primer set, 5-4 en el segundo y punto de oro que podía valer el pase a semifinales para los últimos. Sacaba Momo con su segundo servicio y en un lance del juego, Álex se tira al suelo para devolver dos bolas complicadas con tan mala suerte que se le desabrocha el reloj y se le cae al suelo. El punto continúa y Sanyo la saca por cuatro para cerrar el partido.

Mientras Momo y Sanyo celebrababan el pase a semifinales, sus rivales reclamaban al juez de silla que el punto debía repetirse al estar el reloj en el suelo durante la disputa del punto. Bajo la estupefacción de la pareja que se veía ganadora, el árbitro revisa la jugada con el vídeo y decide que el tanto debe volver a jugarse. El punto lo terminan ganando Tello y Ruiz y se pasa de lo que podía ser un 6-4 a un 5-5. Finalmente el partido lo terminaron ganado Momo y Sanyo, que decidieron no hablar de la jugada en la entrevista post-partido.

Esta acción generó una enorme polémica entre aficionados en redes sociales. Acusaban a Álex de haber llevado a cabo un acto antideportivo, cuando estaba claro que habían perdido el partido. El jugador malagueño quiso pedir disculpas tras el encuentro en un vídeo publicado en sus redes sociales: "no me ha gustado absolutamente nada de lo que he hecho. Quiero dar mis sinceras disculpas tanto a Sanyo como a Momo".

Paquito Navarro vuelve a sonreír

La vida deportiva de Paquito Navarro ha cambiado desde la separación con Juan Tello y la unión con Fede Chingotto. El jugador andaluz se ha liberado, ha vuelto a jugar en el revés, su lugar natural. Esta semana en Bruselas hemos visto al Paquito de siempre, al de la garra, el de la pelea y el de la guitarra. Esta semana han desplegado un buen nivel de juego y consiguieron llegar hasta las semifinales donde Tapia y Coello se cruzaron en su camino.